Disclaimers: Los personajes aquí presentes no me pertenecen, son propiedad de Craig Bartlett y Nickelodeon.

Arnold POV

Iba camino a casa de Helga… así como lo oyen, caminaba hacia la casa de mi verduga "favorita" gracias al profesor Wittenberg, el de literatura, había sido uno de mis profesores favoritos hasta que se le ocurrió emparejarme con Helga para, lo que según el, seria el trabajo mas importante del bimestre. La verdad no me sorprendió mucho el hecho de que nos tocara juntos y me pareció que a ella tampoco, ya que curiosamente en la mayoría de los trabajos de ese año nos habían asignado juntos. Hasta ese entonces los equipos habían estado conformados por 3 o mas integrantes, y debido a la tensión que existe entre nosotros, que nuestros compañeros ya bien conocen, siempre nos reuníamos en terreno "neutral", pero esa vez seria diferente.

Una vez frente a casa de Helga, suspire y llame a la puerta golpeándola pausadamente con mis nudillos.

Olga, la hermana de Helga, fue quien respondió a mi llamado.

-Hola Arnold- me saludo son una sonrisa.

-Hola Olga. ¿Se encuentra Helga?-le pregunte.

-¡HELGA!-grito inclinándose un poco hacia atrás para que su voz llegara a su destino en el segundo piso.

-¡¿Qué quieres?-Se escucho como respuesta en un tono de fastidio muy poco amigable, típico de Helga.

-Yo nada, pero un chico muy apuesto esta en nuestra puerta preguntando por ti-le contesto Olga, dirigiéndome una sonrisa, yo le devolví la sonrisa un tanto abochornado.

-¿A mi? ¡Estas loca! Además, no estoy de humor para bromas-escuche decir, o mejor dicho, gritar, a Helga.

-¡Oh, vamos Helga! No es ninguna broma, además puede que te ayude a olvidar tu pequeño accidente-dijo Olga soltando una risita.

"¿Accidente?", pensé preocupado. Si, talvez Helga no sea la mejor de las personas, ni tampoco la mejor de mis amigas, pero no pude evitar preguntarme que le había sucedido. Unos pasos interrumpieron mis pensamientos, era Helga bajando las escaleras.

-Bien. Ya estoy aquí. ¿Dónde esta?- escuche a Helga decir sin muchas ganas mientras se aproximaba a la puerta, ya una vez en la entrada, me miro. -¡Vaya! Tienes razón, es todo un Adonis- dijo sarcásticamente.

-También me da mucho gusto verte, Helga- Le conteste sin ganas, al momento que Olga se alejaba de la puerta rumbo a la cocina.

-Bien, no te quedes ahí parado- oí decir a Helga, y la seguí hacia el interior de la casa hasta llegar a la sala. Ya una vez ahí, Helga se sentó en uno de los sillones, mas precisamente, el que se encontraba frente a la televisión.

-Helga-Escuche decir a Olga desde la cocina.

-¿Qué?-pregunto Helga sin siquiera voltear a verla.

-¿Podrías venir a ayudarme un momento?

-¡Dios mío, Olga! ¡Acabo de sentarme!-contesto Helga irritada, pero seguía sin moverse.

-Lo se, y lamento molestarte, pero necesito tu ayuda.

-Esto es increíble…- susurro Helga sarcásticamente, y para mi sorpresa y desconcierto la mire levantarse del sillón donde estaba y dirigirse hacia la cocina. La verdad pensé que rezongaría o que simplemente la ignoraría, pero todo lo contrario, se levanto a auxiliar a su hermana. -Bien, ¿Qué quieres que haga?- pregunto Helga en un tono servicial.

-Ah, no. ¡Primero lávate las manos! – le ordeno Olga.

-De acuerdo…-dijo Helga resignada, ya se dirigía al baño a lavarse las manos cuando Olga interrumpió su trayecto.

-Y ten cuidado, no lleves nada que se pueda caer al escusado- le dijo sonriendo.

-Olga…-dijo Helga, volteando a ver a su hermana- todo lo que se podía haber caído al escusado ya lo hizo, así que no molestes- y dicho esto retomo su caminata al baño.

-Esta bien, pero de todas maneras ten cuidado- dijo Olga tratando de contener su risa, lo cual no logro. La observe mientras rebanaba los vegetales preguntándome el sentido de aquella pequeña conversación.


Se que esta corto el capitulo, lo que pasa es que la idea salio de algo que me paso esta mañana y decidí publicar mi anécdota, y la verdad es que con uno de los personajes con el que mas me identifico (de todas las caricaturas que eh visto, que son bastantes...) es Helga, incluso me han comparado con ella, así que convertí mi anécdota en un episodio de una de mis series favoritas. Se me ocurrieron muchas maneras de continuarlo y cada una me llevaba por un camino distinto y por lo tanto también a un final diferente, pero no quería perder la esencia de los hechos reales que me dieron la idea. La verdad es que amo esta serie y me encantan las parejas disparejas y espero darle rienda suelta a la historia como se lo merece. En cuanto se organice mi cerebro escribiré el segundo capitulo que ya tengo mas o menos pensado de que va a tratar.

También les quiero pedir que me tengan paciencia ya que como dice mi perfil, tengo un IQ elevado así que mi cerebro todo el tiempo esta maquinando ideas, así que tengo muchas historias que escribir, y mientras mas avanzo en una historia se me ocurren otras (Es un tanto estresante... y molesto a decir verdad ¬¬'). Pero les prometo no abandonar mi fic.

Ya los dejo, me voy a organizar mis ideas.