Una mañana sobre el área de Kanto, más precisamente, Ciudad Azafrán, una muchacha joven buscaba desesperadamente sus pantalones cortos por toda su habitación.

Remera roja sin mangas, medias de red, botas negras, seria perfecto sino fuese porque no podía salir con sus pantys rosadas. En ese momento una Lopunny salio de debajo de la cama con la prenda que la veinteañera buscaba y se la alcanzó.

_ Gracias Gizelle. Spectra, por favor, búscame a Lucifer que ya casi salimos.-dijo la joven dirigiéndose primero a la Lopunny y luego a una Gastly.

Terminó de ponerse unas botas bajas negras y coloco sus pokeballs en su mochila, mientras llamaba a su Lopunny y a su persian.

_Gizelle y Lucifer, los quiero en sus pokeballs ahora mismo para que salgamos rápido.

Los pokemons obedecieron y solo el fantasma quedo fuera.

La joven bajó las escaleras y salió de su casa mientras releía una carta con fecha de la semana anterior:

"Después de mucho tiempo, finalmente a final de esta semana el pokemon que te entregué cumple 10 años. Debe haber subido mucho de nivel y confío en que los has criado bien, es por eso, Lady que quiero que me lo traigas a mi laboratorio para hacerle una revisión

Atte.: Profesor Sammuel Oak"

_ Finalmente podré ver a Green- suspiró Lady mientras se encaminaba a Pueblo Paleta.

En Pueblo Paleta, un hombre mayor daba vuelta por todo su laboratorio algo impaciente.

Uno de los asistentes se acerco con un anuncio:

_ Profesor, la invitada que esperaba ya llegó, la hago pasar?

_Por favor, Hideki- respondió el anciano profesor.

Lady entró al laboratorio escoltada por Hideki y saludo a Sammuel Oak como a un viejo conocido.

_ si pudieses dejarme a tu equipo por un momento Lady, quisiera observarlos tu puedes recorrer el pueblo, mi nieto te puede guiar.- La muchacha se sonrojó abruptamente y entregó sus pokeballs para luego salir de la habitación y dirigirse a la residencia de los Oak.

En el interior de la vivienda una mujer preparaba takoyakis (albóndigas de Octillery) ayudada por una jovencita que, al ver por la ventana reconoció a Lady y pidió a su hermano que la invite a pasar. El muchacho abrió la puerta y busco con la mirada a la visitante. Sus ojos verdes se encontraron con los plateados de ella como la última vez hacia ya diez años.

_Tu nombre es Lady, verdad? Mi abuelo me avisó que vendrías, pasa por favor, mi hermana quiere verte- Dijo el sin inmutarse.

Lady le dedicó una sonrisa a Green y pasó por la puerta seguida del muchacho. Una vez dentro encontró la casa tal y como la recordaba, en Kanto no era diversa la arquitectura. Una vos femenina la llamó desde la cocina y al girarse, nuestra protagonista observó a una adolescente de cabello castaño como el suyo con un vestido naranja y un delantal cubierto de harina.

_ Daisy! La última vez que nos vimos tenias apenas 13 años, como has cambiado- exclamó La veinteañera abrazando a la joven. Las dos muchachas se habían hecho amigas cuando la mayor, que no llevaba pokemon consigo, fue atacada por un spearrow salvaje y el recién adquirido charmander dorado de la menor prácticamente incineró al ave.

_ Lady, Vas a viajar otra vez, no es así? –preguntó al madre de su amiga

_ iré a Johto a visitar a mi hermano, como lo supo?

_ Porque un mapa de Johto sobresale de tu mochila- Las dos muchachas rieron y Daisy le entrego una caja de almuerzo con takoyakis a Lady

_ lleva esto para el camino y por favor, permíteme darles un masaje a tus pokemons antes de irte.

_ acompáñame al laboratorio entonces, tu abuelo los tiene aun.

_ Yo… también quisiera ver a tus pokemon, debes haberlos entrenado mucho desde nuestra ultima batalla en mi gimnasio- Lady se sonrojo otra vez ante el comentario de Green. Los tres jóvenes se dirigieron al laboratorio y antes de entrar Spectra se acerco velozmente a su entrenadora atravesando al líder de ciudad Viridian.

_ Creo que a Spectra no podré darle un masaje- rió Daisy mientras ingresaban por la puerta donde el profesor entregaba su Pokemon inicial a un niño.

_Ahh, Lady! Iba a buscarte luego de que Pat eligiese a su compañero.- se excusó el profesor

Lady se acerco al niño que tenia en su rostro seria duda respecto a su elección

_Dime, Pat, te gustaría un Pokemon de fuego, uno de agua o uno de hierba? Porque cada uno requiere un tipo deferente de entrenamiento.

_ yo quiero uno tan fuerte como el de mi papá, fuerte como su Magmar.

_ Si es así talvez deberías elegir el de fuego, Charmander, es el mismo que yo elegí hace diez años y tanbien el- señalo a Green- Que ahora es líder de gimnasio.

El niño puso mucha cara de ilusión y tomó la pokeball que tenia al Pokemon de fuego, pero al verlo salir se quejó de su pequeño tamaño.

_ Es pequeño ahora-señalo Green

_ Pero crecerá si lo entrenas bien-completó Lady y ambos sacaron a sus charizards

Pat se fue corriendo emocionado en tanto Lady le dio sus pokeballs a Daisy.

_Tus pokemons se encuentran en estupenda forma, y el crecimiento de tu Charizard es increíble.

_ Titán es un Pokemon Brillante, por eso crece mejor que otros pokemons –respondió la veinteañera al profesor.

Daisy finalmente regresó y Green inspeccionó a los pokemons de Lady un rato mientras ella comentaba al profesor de su siguiente viaje.

_ Mi medio Hermano vive en la región de Johto así que voy a verlo y a comenzar con mis investigaciones de campo

_ Oh! Es cierto, estas estudiando los orígenes prehistóricos de los Pokemon. Si haces algún descubrimiento llámame- dijo el profesor muy interesado.

Finalmente Lady se despidió de sus amigos de Pueblo Paleta y estaba por montar a su charizard par volar hacia Johto cuando Green la alcanzo y la observo fijamente desde tierra. Ella bajo de Titán y lo miró algo confusa.

_Cuando regreses, por favor, pasa a verme en Viridian y vuelve a desafiarme.

Ella solo le beso la mejilla, sonrió y volvió a trepar a su Pokemon.

Al sobrevolar pueblo primavera para entregar algunos papeles al profesor Elm, Lady recibió una llamada en su pokenav.

"Lady, soy tu padre, tu hermano me informó que pasarías a verlo pero un imprevisto lo puso en viaje y no lograba comunicarse contigo así que me pidió a mi que te avisara, adiós!"

Ella solo suspiró y le indicó a su charizard que descendiera en el pueblo

_ Bien hecho Titán, quieres volver a tu pokeball para descansar o me acompañas a ver al profesor Elm?

El Pokemon echó a andar ya que prefería acompañar a su amiga y con Spectra flotando detrás de ella la joven siguió su camino hasta el laboratorio.

Elm era un hombre bastante distraído y torpe pero una eminencia entre los profesores Pokemon.

Nuestra protagonista debía entregarle algunos papeles respecto a su investigación para recibir un pase de estudiante que le permitirá entrar a ciertas cámaras no abiertas al público de las Ruinas Alpha.

Lady entró al laboratorio y preguntó en vos alta por el científico mientras su charizard esperaba afuera con la gastly.

_ Tu eres Lady, no es así?- dijo una maltrecha bola de espuma que Lady supuso seria Elm cubierto de algo jabonoso.

_ Si, si soy yo, pero que le pasó a usted?

_ Un incidente con un wooper, nada grave. Dime, tienes los papeles? Oak me dijo que vendrías.

Lady le entregó las solicitudes y la autorización firmada por Sammuel Oak. Elm por su parte le entrego una tarjeta y la acompaño a la puerta mientras hablaban de la investigación de la muchacha.

_ Y, dime Lady, como se te ocurrió estudiar esta rama de las ciencias geológicas?

_ De pequeña encontré esta foto en un libro, y, simplemente lo supe.

_y a donde te diriges ahora, puedo darte indicaciones- se ofreció el profesor

_ Gracias, conozco bien Johto, mi medio hermano vive aquí en Pueblo Primavera.

_Ahhh ya sabía que tu nombre me sonaba, eres la Hermana de Goetz. Hace poco salió en un viaje otra vez.

_ Si… mi padre me lo dijo-suspiró Lady necesitando abrazar a su hermano después de tanto tiempo. –Pero bueno pasare por Caoba a ver a alguien antes de visitar las Ruinas Alpha.

_ No dejes de visitar la guardería de Caoba, pregunta por Jake, si de algo sabe es de cuidados Pokemon, podría serle útil a tu equipo descansar allí un poco- recomendó el profesor Elm sin saber que era exactamente eso lo que la muchacha de los ojos de plata planeaba. Ella decidió no decir nada y simplemente salió por la puerta montando sobre su Charizard y saludando.

Definitivamente una sorpresa le esperaba en Caoba.