¿Persistente?Sin duda

¿Inteligente?Por supuesto

¿Aspiraciones? A líder

¿Cómo te defines en cuatro palabras? Mujer de armas tomar

Confianza, irónica la vida ¿verdad?, una palabra de nueve simples letras, demasiado fácil pronunciarla, pero al mismo tiempo difícil de ponerlo en practica. Según las personas una virtud que solo lo poseen quienes tienen códigos ¿Acaso tan errónea fue mi elección al momento de integrarlos a mi vida? Equivocada o no, hoy en día solo puedo decir que se convirtió en algo banal. Y he de agradecer ¿el porque?... simple, sin ellos hoy no seria quien soy… ¿Y quien soy?... Sakura Haruno. Una jodida mujer que va a patearte el culo tantas veces hasta ponerte una colosal zapatería en cuanto infrinjas la ley. Con un solo objetivo en la vida, atrapar a aquella alimaña culpable de la cantidad de traumas infringidos en su adolescencia.

Mi nombre es Sakura Haruno, tengo 24 años, nacida en la ciudad de Tokio, aunque radico en Los Ángeles actualmente, me independice a los 19 años, motivos por el cual vivo sola hace ya 5. Mis padres están divorciados desde que tengo noción del tiempo, y tengo una molesta hermana menor llamada Ino Yamanaka, de 23 años de edad que aun vive con mi madre, se preguntaran el porque de su apellido, ¿la razón? es adoptada, su madre la abandono al nacer quedando al cuidado de su padre, este a su vez cayo en depresión y luego al vicio del alcohol, las autoridades se hicieron cargo de la situación y la enviaron a un orfanato, luego fue adoptada por mis padres.

Flash Back

Señorita Haruno- Apenas podia escuchar con claridad aquella masculina voz.

Señorita Haruno- volví a oír, pero esta vez con mas claridad¡señorita Haruno!

Pegue un gran brinco y me levante de el pupitre donde hace segundos descansada placidamente. Lo primero que escuche fueron las fuertes carcajadas de los inútiles de mis compañeros.

Que falta de respeto hacia su profesor y compañeros dormirse, ¿acaso tanto le aburre mi clase señorita Haruno?- recrimino mi profesor de ciencias.

Genial otro día mas, con los mismos profesores, los mismos compañeros, y los mismos regaños.

¡Hey Sakura chan!, si que te pasaste hoy con el profesor Asuma, mira que quedarte dormida justo en su clase- Recrimino mi compañero de curso, su nombre, Naruto Uzumaki, íbamos al mismo aula, y al igual que yo poseía 12 años, se había convertido en alguien indispensable en mi vida, no se que haría sin el.

Hmp, dobe lo dices como si fuera algo nuevo para nosotros, ya sabes como es de molesta- Ahora había sido el turno de mi otro compañero Sasuke Uchiha, como Naruto y yo el tenia 12 años, y era mi mejor amigo también, aunque… a quien quiero engañar, estaba enamorada de el, aunque nadie lo sabia a excepción de mi hermana Ino.

Bueno ya muchachos no hay nada que hacer así soy, ¿es que acaso no les aburre la clase del profesor Azuma?- Acote mientras estiraba mis piernas en la banqueta de aquella plaza dos cuadras del colegio el cual visitábamos rutinariamente al final de las clases.

Sakura, si por cada clase que te parece aburrida te durmieras no terminarías la escuela ni con 50 años, aparte ya conoces como son mi padres, no puedo llegar con menos de 7 en las calificaciones- comento al momento de apoyarse debajo de aquel árbol justo frente mio.

Teme tampoco exageres, Minato también es exigente pero no a la décima potencia-

Y así paso el tiempo, llegando las vacaciones, Naruto, Sasuke y yo éramos carne y uña, no nos separábamos para nada, nuestros padres se habían hecho muy amigos gracias a nosotros, de manera que todos los fines de semana sorteábamos la casa en la que pasaríamos toda la noche viendo películas, contando historias de terror, etc.

El tiempo sin detenerse transcurrió, tanto pero tanto que ya estábamos en la preparatoria, todos con 16 años, pensé que seria mi mejor año, pero resulto ser todo lo contrario, Sasuke y Naruto conocieron el sabor del placer carnal, por lo cual, lo único que hacían las pocas veces que nos reuníamos era comentar lo buena que estaba la chica que se habían tirado. Quizás por Naruto me daba celos, pero celos sanos, el era como un hermano para mi, pero Sasuke, con el era diferente, cada vez lo veía mas lejos de mi, lo amaba con todo mi ser, y escuchar cuanta mujer se tiraba aunque sea por una noche, me rompía en mil pedazos. Alguna vez tuve un sueño, y era el perder nuestra virginidad juntos Sasuke y yo. Desde ese día mi sonrisa se convirtió en una fingida, demasiado bien me salía diría yo, porque nunca nadie se dio cuenta o eso creía. Ese día llegue a mi casa donde vivía con mama e Ino, llore y llore como era costumbre hace ya varios meses.

Al día siguiente me levante a las 12 del mediodía, era Sábado no me preocupaba porque no había clases, me bañe, me arregle, y me vestí con una pollera de Jean y un top negro que decía bad girl, deje mi pelo suelto lo tenia 10 centímetros mas largo que mis hombros, luego baje, y me prepare un sándwich, ya que los Sábados estaba sola, mi madre Tsunade Trabajaba en el hospital ella era la jefa, e Ino estaba con mi padre Jiraya seguro cumpliéndole todos sus caprichos, yo no quise ir con ellos porque hoy habíamos quedado con Sasuke y Naruto en vernos y a pesar de ser una masoca por saber de que iban a hablar ellos eran mis amigos.

Hacia mas de 15 minutos que estaba sentada en el maldito bar y mis "amigos" aun no llegaban, quedamos en encontrarnos a las 3 de la tarde y eran las 3:15 y nada.

Hasta que me sorprendió lo que vi. Por la puerta del bar entraron la muerte y el Degollado, sus caras espantaban, que demonios les había sucedido.

Hola Sakura Chan- Saludo Naruto, arrastrando los pies y sentándose de mi lado izquierdo.

Hmp, Sakura- apenas pronuncio ¿a que no saben quien?, si Sasuke, siempre tan hablador.

¿Pero que demonios les paso, es que tuvieron una mala noche?, la peor diría yo- dije en modo de burla.

No te equivocas Sakura chan, fue todo lo contrario, el teme y yo…-

Shh Dobe, ¿que te pasa?, ¿acaso vas a estar escupiendo las cochinadas que hiciste anoche?- Pregunto enojado Sasuke.

Que hicimos querrás decir teme- corrigió Naruto, y fue inevitable sentir ese nudo que me asfixiaba mas y mas, el solo hecho de imaginar a Sasuke con otra mujer, me hacia sentir… no se… es un sentimiento que no se lo deseo a nadie.

Bueno ya no me interesa su jodida vida sexual, hablemos de otras cosa, hace mucho que no nos juntábamos chicos- dije para cambiar el ambiente que se había instalado, y creo que Sasuke lo noto, ya que no despegaba su vista de mi. Sin duda Sasuke sabia que algo no andaba bien conmigo, solo esperaba que no supiera el motivo.

De esta manera paso toda la tarde, hablando de estupideces y riéndonos de las locuras de Naruto. Este a su vez se fue antes con la excusa de que su madre lo necesitaba, aunque yo sabia que era mentira de segura el motivo era una chica, a mi no me molestaba en lo mas mínimo, eso significaba toda una tarde de Sasuke para mi sola.

Sasuke-Lo llame, el solo poso su mirada en mi dándome a entender que tenia toda su atención en mi- ¿que te parece si vamos a la plaza del vagón?, ya sabes recordar viejos tiempos- dije nerviosa, es que no apartaba la mirada de mi, y eso me inquietaba.

Hmp, como quieras- contesto.

Pagamos lo que habíamos consumido, y luego emprendimos marcha hacia la plaza, en todo el camino estuvo ese incomodo silencio, ninguno de los dos dijo una palabra. Una vez que llegamos nos sentamos en el banco que solíamos desde que éramos chicos donde cada una llevaba su vianda preparadas por nuestras madres.

¿Y bien no vas a decir nada ¿sabes? con Naruto llegamos a un acuerdo y la verdad es que estas demasiado rara, es que acaso creíste que podrías engañarnos con esa entupida y fingida sonrisa, vamos Sakura nos conocemos hace años- Critico Sasuke muy enojado.

Yo…yo no se de que me estas-

No me mientas, no a mi ¿oístes?, ahora solo dime el maldito motivo- me grito y eso hizo que mis ojos se fueran humedeciendo de apoco, y una ira la cual desconocida hasta ahora sumergiera.

Cállate- grite brotando las primeras lagrimas- Cállate Sasuke, tu no sabes que es lo que siento, solo cierra tu jodid…-

Shh no no, Sakura ese no es vocabulario para una dama-

¿Me estas comparando con tus zorras de turno Sasuke?- Grite ya histérica.

Carajo- grito- solo dime el maldito motivo por el cual te comportas tan estúpidamente infantil- Ja ¿yo infantil? Maldito Uchiha, agradecía al cielo por estar tan nublado y la gente estuviera resguardada en su casa, dejándonos las plaza sola, sino seriamos la atención del lugar.

Quieres saber que es lo que me sucede, pues afina bien tus oídos Uchiha-

¿Como me dijiste Sa ku ra?-

Te dije U chi ha, ¿te quedo?, ¿sabes como me siento el escuchar a Naruto a ti las revolcadas que se dan con sus zorras, mientras yo voy quedando en un rinconcito inhóspito en sus vidas, ya no compartimos noches de películas, no vamos todos los viernes al cine, ni los lunes a las clases de pintura, nuestra amistad va muriendo poco a poco, por lo menos el lazo que los une a mi, ¡maldición Sasuke! ¿Cómo te sentirías si encuentro un hombre para pasar el rato y te aparto bruscamente de mi vida?- Finalicé de hablar con todo mi rostro repleto en lagrimas, me sentía ligera, como si me hubiera sacado un peso de encima, aunque me era imposible ver el rostro de Sasuke ya que había bajado el mío, no querría o mejor dicho no podía verlo.

Sakura ¿en realidad es así como te sientes?- me pregunto con un tono suave.

Si- me imite a contestar.

Lo Lo lamento- dijo y luego lo sentí detrás mío, mientra me daba un tierno abrazo, y apoyaba su barbilla en el hueco de mi cuello.

Dime como compensarte todo este daño- propuso con un tono de vos dulce.

Bésame- ¡mierda! ¡No! lo dije en voz alta, que estupida soy, dios piensa Sakura piensa como salir parada de esta bochornosa situación.

Pero antes de encontrar la excusa perfecta, delicadamente me dio vuelta poniéndome frente a el y me beso.

Dios era increíble, sus labios eran tan suaves, se sentían mejor que en mis sueños. El beso era sutil y delicado, como si fuera una muñeca de porcelana, pero yo no me conformaba con eso, así que intensifique el beso, la verdad era una inexperta en este campo, Sasuke era mi primer beso, el ante mi acto sonrió altaneramente sobre mis labios, y su lengua pidió permiso a mi boca para entrar, obviamente no me negué, el beso se hacia cada vez mas exigente, hasta la lamentable falta de aire. Nos separamos y sentí mis mejillas arder, el ante mi acto, volvió a sonreír.

¿Y bien esto compensa mis entupidos actos?-

Mmm no se déjame pensarlo, quizás si, quizás no- respondí coqueta.

Pues tendrías que estar saltando en una pata, besaste al gran Sasuke Uchiha-

Una carcajada salio de mis labios, pero se borro automáticamente cuando recordé que tenia que decirle la verdad sobre mis sentimientos.

Sasuke yo… yo… veras-

¿Que sucede Sakura? Dilo con confianza- me alentó, y me dio a su vez la fuerza para hacerlo.

Yo te… tu me…- ¡mierda!- yo te amo- dije de repente, el solo me miraba, como si no hubiera entendido, pero luego de unos segundos, su seño se frunció.

¿Es una broma verdad?- me pregunto, yo solo lo negué con mi cabeza.

Dime que es una maldita broma, se supone que tu eres distinta a ellas, Sakura ¡¿Qué carajo te pasa? Acabas de arruinar nuestra amistad- Término de gritarme para luego levantarse e irse. Yo estaba en un estado de parálisis, no me movía, no respiraba, no nada. Luego ese día llegue a mi casa, informe que no bajaría a comer, y llore como no lo hice en mi vida, el simplemente no me dio tiempo a nada.

Otra vez el estupido tiempo no dejaba de transcurrir, había pasado un mes desde el suceso de la plaza, no había vuelto a ver a Sasuke, y no lo haría hasta que empezaran las clases a lo cual faltaba un mes mas, Naruto venia a visitarme de vez en cuando para ver como estaba, pero nunca me dijo nada de Sasuke ni lo que le había pasado entre el y yo.

Hasta que una tarde mirando el noticiero algo llego a captar mi atención.

Ultimo momento poderoso matrimonio asesinado por su hijo mayor, se desconoce el motivo y paradero de este, su nombre es Itachi Uchiha, en solo momentos pondremos una foto para colaborar con cualquier tipo de información sobre el fugitivo. Desde ya muchas gracias les informa Yukito karuto.

Mi corazón se detuvo por segundos la sensación que sentía era nada a la que Sasuke estaría sintiendo en este momento, ¡Sasuke!

Corrí y corrí, llegue a la mansión Uchiha miles de reporteros y policías rondaban la zona, entre a hurtadillas ya que no dejaban pasar a nadie, afortunadamente yo conocía otra entrada poco vista por la gente el me la había enseñado de chicos. Una vez dentro de la mansión recorrí toda la casa como pude era un mundo de gente, hasta que lo vi, abrazado por Naruto, sentados los dos sobre el sillón de la sala. Saque fuerzas de no se donde, y entre.

Sasuke Kun- dije en un murmullo, pero de igual manera llego a ambos.

Sakura chan- dijo Naruto su mirada estaba triste vacía, no era para menos.

Me acerque lentamente, Naruto se levanto y yo tome su lugar delicadamente, pose mis brazos alrededor de su espalda y lo atraje hacia mi, el me correspondió al segundo, me abrazaba tan fuerte como si se le fuera la vida.

Cuando quise darme cuenta era ya de noche, me había quedado dormida, no encontré ni a Sasuke ni a Naruto. Me levante y empecé a buscarlos por la ya sola casa, los reporteros y policías se habían ido. Ya no quedaba nada de ellos. Seguí caminando hasta llegar a la cocina, y de repente lo vi. Empecé a sudar como testigo falso, no podía ser, ¡por favor no!. Me acerque lentamente y tome el sobre junto a la mesada que decía Sakura, esa letra era de Naruto. Temerosa lo abrí, y la peor de mis pesadillas no era nada a comparación de lo que decía la carta.

Sakura:

Lamento tener que decirte algo tan importante por escrito, pero era la única manera para nosotros, Sasuke y yo nos iremos de la ciudad, estamos tras los pasos de Itachi, y yo voy a ayudarlo, prometo escribirte todas las semanas, cuídate mucho, entiende esto es por tu bien. Te queremos.

Elteme y yo.

Fin Flash Back