Los personajes pertenecen a Masashi Kishimoto
La muerete de Neji me traumatizó más que la de Ned Stark y Fred Weasley juntas
Mi idea de japonés es la misma que la de criollo haitiano: nula
La trama se situa durante la 4ª guerra ninja (creo, porque me volví a reenganchar a Naruto hace poco después de 5 años de abstinencia)
Es mi primer fic
1. Dreaming
Todavía no sabía si se hallaba más cerca del sueño o de la vigilia. Sentía un zumbido en los oídos y el frescor del viento en la cara. Intentó mover los brazos y las piernas pero algo se lo impedía: estaba atrapada.
Le dolía ligeramente la cabeza y cuando intentó abrir los ojos, un sentimiento de tristeza absoluta la invadió repentinamente, devastándola sin miramientos. Una lágrima solitaria se deslizó por su mejilla derecha. No llegó a notar cómo rodaba por su barbilla porque se dejó volver a mecer por el sueño entre pensamientos tormentosos. Se dijo a sí misma que no quería saber nada y en su cabeza se empezó a crear una nube que la hizo sentir tranquila, reconfortada….
"Mira, ahí están Gai sensei y Lee"
- ¡Tenten! Tu idea de cambio de look ha sido realmente genial!- decía Lee mientras era tironeado del brazo por una chica desconocida de pelo violeta y rasgos gatunos – Gai sensei, ¿vamos?
- ¡POR SUPUESTO! Nena – dijo girándose hacia Tenten- has hecho que una llama de la juventud más elegante que nunca nazca en nosotros- Gai sensei alzó el pulgar y le guiñó el ojo derecho - ahora somos los más sexys de Konoha.
Lee y la chica desconocida empezaron a besarse sin ninguna vergüenza mientras su maestro echaba a caminar y un montón de mujeres le silbaban al pasar.
La verdad es que estaban muy bien para lo patanes que habían llegado a ser.
Tenten sonreía radiante, llena de orgullo. Por fin había conseguido que esos dos dejasen de ser unos freaks y sacasen el sex appeal (que ella durante un tiempo consideró inexistente) que llevaban dentro.
Los observo mientras se alejaban con paso decidido llenando el aire de carcajadas y vitalidad y con los ronroneos de la chica, aun colgada del brazo de Lee, de fondo.
- ¡Genial! Ya no tendré que molestarlos más – dijo para sí misma en voz alta con los brazos en jarras y sentimiento de triunfo.
- ¿Estás segura?
Había estado callado hasta este momento mirando con incredulidad el espectáculo de su sensei y su compañero de equipo en el momento más" nice" de su vida. Nunca pensó que pudiesen a llegar a ser los galanes que eran hoy aun siendo tan escandalosos.
Tenten lo miró sonriendo. No pudo evitar observar su perfil. La línea de su mandíbula, tan delicada y masculina. Y sus ojos, que vistos desde esa perspectiva daban un espectáculo exquisito: se podía ver la curvatura de la cornea totalmente transparente al ser atravesada por la luz del mediodía. También tenía el ceño fruncido provocándole una arruga en la frente.
- Neji, necesitaban un poco de picardía para armarse de valor y acercarse a alguna mujer - opinó con convicción – y además, ahora nos dejarán sol… en paz… un buen rato… ¡sí!
Casi la traiciona el subconsciente. Bueno, en verdad la había traicionado. Se puso ligeramente roja y el corazón le dio un vuelco. Se atrevió a mirar a Neji de soslayo.
Su expresión parecía inmutable aunque había dejado de fruncir el ceño. Sus ojos prácticamente blancos miraban a un punto cualquiera detrás de Lee y Gai Sensei. Tenten sitió como se ondulaba el aire y pensó que hasta sin el byakugan activado, Neji podría percatarse de su chakra a mil por hora junto con su torrente sanguíneo.
- Joder - dijo una voz a sus espaldas.
La kunoichi se tensó y se giro lentamente rogando a los dioses que la siguiente frase a "joder" no fuese alguna babaridad delatora.
Neji tan sólo giro el torsó y miró por encima del hombro.
Los deseos de Tenten no se cumplieron.
- Apestas - dijo Kiba dirigiéndose a ella con una media sonrisa en la boca enseñando un colmillo.
"Mierda, mierda. Un pergamino para autosellarme y no salir jamás, gracias" pensó muerta de vergüenza. Estaba recta y tensa con cierta expresión de pánico mirando al Inuzuka, esperando la siguiente estocada.
Kiba no se refería precisamente al olor del sudor. OJALÁ hubiese ido empapada en sudor y tierra de hacía semanas por que así sus feromonas no estarían bailando salsa en el aire: Kiba se refería al olor de su cuerpo reaccionando a su metedura pata respecto a Neji, a su cercanía, al cual ahora sí que no se atrevía a mirar.
Akamaru ladró 2 veces alegremente, moviendo la cola y levantando remolinos de polvo y hojas.
Kiba olfateó el aire.
- Sí, Akamaru… Y tú también – dijo sin ningún tipo de miramientos señalando a Neji abiertamente con el dedo – ¡Iros a un hotel!
- Ki- Kiba-kun! – Hinata miró con espanto a su primo que estaba más blanco que de costumbre. Miró a su compañero de equipo asustada a la par que abrumada- Gomen nasai Neji, Tenten … Kiba-kun – dijo susurrando esta vez – cómo se te ocurre…
- Nada Hinata, esos dos deberían darme las gracias
Tenten todavía estaba espantada y el silencio que dejaron Hinata y Kiba al marcharse del lugar después de semejante sentencia estaban por acabar con ella. Tenía que salvar la situación o empezar la retirada. Llegó a la conclusión de que la opción b era la más plausible. Poco se podía salvar ya. Kiba la había delatado sin compasión. Aunque a Neji también…
Suspiró.
– Está como una cabra - dijo intentando restarle importancia- Bueno, pues yo me voy a…
- Tenten
Tragó saliva. Le iba a costar horrores mantener la mirada.
Sintió como unos dedos cálidos cogían delicadamente el meñique de su mano derecha y se giró con el corazón a mil latiéndole en el pecho.
Neji la miraba desde su altura con algo que ella nunca había captado. ¿Intensidad, tal vez? Él miró a sus ojos castaños, miró a sus labios entreabiertos percatándose también del rubor de sus mejillas. Miro a sus ojos oscuros otra vez. Le parecieron chispeantes, sinceros y llenos de calidez.
No era la primera vez que lo pensaba. Ni sería la última.
- ¿Tomarías un té conmigo antes de ir a casa?
...
Gracias por leerme. Se agradecen los reviews. ¡Necesito feedback! :)
