Discraimer: Los personajes no me pertenecen a mí, si no a Clamp.

Hailsham: Mansión para mujeres.

Capitulo 1: Un nuevo aspirante.

Un auto negro se paró frente a la luz roja del semáforo. Dentro solo se escuchaba el sonido de las teclas de un computadora portátil y el ruido que emitían unos audífonos pequeños a todo volumen. Una mano femenina pálida toca a la dueña de la portátil, que se quita los audífonos rápidamente.

-¿Pasa algo, Tomoyo?-pregunta la mujer castaña.

-Toma-dice mientras le entrega una carpeta con documentos-, es la mejor opción, y él está sumamente interesado.

Sakura Kinomoto toma la carpeta, la abre y la lee atentamente.

-Shaoran Li-dice en voz alta-, veinticinco años, castaño y alto, fue barman durante cinco años y busca ahora una nueva experiencia.

La castaña cierra la carpeta, mientras sonríe a Tomoyo Daidouji.

-Sabes que confió en ti, tienes un buen ojo para esto-dijo alegremente-, aunque él parezca sólo uno mas del montón.

-Lo sé, pero necesitamos gente nueva para Hailsham-repone Tomoyo-, tu sabes, las clientas se vuelven cada día más exigentes.

-Por supuesto, vamos has lo que creas conveniente.

Sakura Kinomoto vuelve a sonreírle, sin poder evitar recordar cuando todo esto inició. Pasó de ser una broma juvenil ha convertirse en la fuente de sus riquezas, pero tuvo un por que. Cuando era joven su padre abandonó a la familia por una aventura fácil, y no volvió a saber de él, poco a poco se generó en ella un interés sobre el feminismo y su negocio se basó en una pregunta sencilla hecha una tarde de verano "Si ellos pueden ¿Por qué nosotras no?". Fue entonces cuando decidió crear "Hailsham" una mansión ubicada a las afueras de Tokio donde las mujeres ricas encontraban hombres de compañía -no simplemente de carácter sexual-, si no que también podían ser amigos, compañeros o cualquier cosa que se le ocurriera a la dama en cuestión. Sakura salió de la Universidad con esa idea en mente, sin embargo, le parecía inverosímil llevarla a cabo. En ése momento conoció a Tomoyo Daidouji, ella era el prototipo ideal de sus futuras clientas en potencia: rica, excéntrica y llena de ideas feministas de liberación. Tomoyo quedó al instante encantada con Sakura, así que le propuso un trato: ella tenía el capital y Sakura la idea, formaron una dupla inigualable, Tomoyo introdujo a Sakura a la sociedad y logró que ella obtuviera las influencias y amistades necesarias para iniciar su ambicioso proyecto.

Ahora Hailsham era famoso entre las damas de sociedad, y ellas estaban dispuestas a pagar sumas altas de dinero, con tal de obtener los servicios de Hailsham.

-¿Cómo ha pasado el tiempo, eh?-preguntó Tomoyo al notar la mirada de Sakura-, ¿recuerdas al principio?

-Sí, recuerdo muy bien-sonrió Sakura-, nos costó trabajo pero lo logramos.

Tomoyo incluso requirió los servicios de Hailsham, aunque Sakura no le cobrara ni un centavo por verse con algún hombre que ahí trabajaba.

Cuando menos lo esperaron, la puerta metálica y gigantesca de Hailsham se dibujo en el horizonte, a lo lejos se podía ver la gran mansión con arquitectura mayormente Renacentista.

-Llama al tal Shaoran-dijo Sakura-, hazle una cita a las cuatro para poder conocerlo mejor, a él y a otros dos más.

-Esta bien.

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Shaoran Li dejó el café a la una de la tarde, y llegó a su departamento exactamente media hora después. Cuando abrió la puerta de su departamento, la contestadota automática sonó repetidamente, señal de un nuevo mensaje. El joven de cabellos castaños se acercó y presionó un botón que activo al aparato.

"Señor Li-reprodujo la máquina-, habla Tomoyo Daidouji de Hailsham, estamos interesados en su solicitud, por favor pase ahora a las cuatro de la tarde a la mansión, estaremos esperándole, que tenga un buen día"

Li se sorprendió un poco, pero inmediatamente tomó su celular y marcó rápidamente un número.

-Señor, -dijo al hombre al otro lado de la bocina-, si tengo cita a las cuatro en Hailsham… Sí, haré todo lo posible señor, le informaré en la noche.

Colgó su teléfono, no perdió tiempo y comenzó a arreglarse para su cita.

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Eriol Hiraguizawa dio tres toques a la puerta. "Entra" dijo una voz conocida desde adentro.

La oficina de Sakura era amplia y con un estilo muy clásico, como a ella le gustaba. La llenó de óleos y esculturas renacentistas, con espacios amplios y un gran pecera en las paredes. Eriol vio a la castaña enfrascada revisando unas nóminas.

-Buenas tardes, Sakura-saludó amablemente.

Ella se exalto un poco, pero le sonrió después.

-Buenas tardes Eriol, ¿qué te trae por aquí?

-Acabo de dejar a la señora Himura-contó exhausto- , jugamos golf hasta el cansancio.

-¿Tienes alguna queja?

-No, no, para nada-contesto el ingles-, simplemente Tomoyo me contó que contratarías a nueva gente para Hailsham.

-Así es-lo miró con picardía-, ¿Tomoyo no se guarda nada para ti verdad?

-Vale, ¿no es suficiente con que tenga que compartirme?

La sonrisa de Eriol le recordó cuando lo encontró en Las Vegas. Había viajado a Estados Unidos por asuntos del negocio, y decidió ir a relajarse un poco en los famosos casinos de la ciudad que nunca duerme. Jugó varias veces, pero al cabo de algunas partidas de Black Jack terminó por convencerse de que no tenía madera para el juego, estaba cansada, pero antes de irse fue al bar del hotel, donde lo vio por primera vez. Estaba sentado en la barra, en su mano derecha sostenía un martíni y su cabeza estaba recostada sobre la barra. Sakura se acercó y pidió un vodka, y se sentó a su lado pero no lo despertó. A los minutos él alzo su cabeza y le sonrió ampliamente, Sakura intuyó que estaba ebrio.

-Una linda dama no debe estar sola-le dijo.

Ella sonrió distraídamente, mientras meneaba un poco su vodka. Le llamó la atención la ropa de Eriol, claramente era de un diseñador exclusivo y por más ebrio que estuviera tenía un porte y un carisma impresionante.

-Supongo que las apuestas no están bien hoy-dijo el joven-, ya perdí casi toda mi fortuna.

-Suele pasar-contesto Sakura-, el destino es un factor imperioso.

Eriol la miró divertido.

-Es usted una dama muy agradable.

-Gracias, ¿y qué hace un caballero como usted por aquí?

El grito de felicidad de un hombre a la distancia los interrumpió.

-Bueno, mi familia es muy rica y con gran prestigio en Inglaterra -comenzó-, y yo pues, estaba harto de toda esa parafernalia de buenas modales, y el clasismo así que, tomé toda mi fortuna y vine aquí para formar una nueva vida.

Sakura se sorprendió un poco, pero siguió escuchándolo atentamente. Su estado no le impidió mostrar esa lucidez extraordinaria para hablar, y más bien ahora parecía no estar tan ebrio como antes.

-¿Lo perdió todo en las apuestas?

-No todo-contesto con una sonrisa amarga-, me queda el dinero suficiente para un boleto a Inglaterra, e ir a que me humillen y se burlen de mí.

Sintió lastima por él, y una idea descabellada se le vino a la cabeza.

-¿Aceptaría trabajar en una mansión para mujeres?-pregunto Sakura

Aquellos recuerdos le traían tanta gracia, aún recordaba el rostro de Eriol ante la propuesta y el poco que pensó antes de lanzarla. Pero fue su mejor jugada, pues Eriol era el más solicitado de todos sus hombres.

-Llegará dentro de algunos minutos- le dijo Sakura cuando dejó de recordad-, Tomoyo lo escogió y lo citó a las cuatro.

-Tomoyo sabe escoger hombres-dijo con falso ego-, espero y todo salga bien Sakura.

-Esperemos.

Sakura acomodo todos los papeles y los metió a una carpeta. Sintió la mirada de Eriol sobre ella.

-¿Qué pasa?-pregunto desconcertada.

-Cuándo sentarás cabeza Sakura-dijo con tono dulce-, eres una gran mujer, y según Tomoyo eras una mujer idealista y tierna.

El pasado de Sakura con los hombres era ciertamente doloroso. Solía ser una mujer con vitalidad y grandes ideales, creía en el amor verdadero y era una mujer con gran ternura. Sin embargo, todos los hombres que tuvo le rompieron el corazón; el engaño y las mentiras poco a poco formaron su carácter, y se fue convirtiendo en una mujer más dura y realista con el tiempo. Yukito Tsukishiro fue el mejor novio que tuvo, era el mejor amigo de su hermano, pero pronto comprendió que el sólo sentía amistad por ella. Desde ahí ya no busca más, se dedica de lleno a su negocio que irónicamente se basa en hombres.

-Eres hermosa Sakura-continuó el ingles-, y no sólo por que eres mi jefa, si no por que eres mi mejor amiga y te apreció.

-Ya tiré la toalla respecto a eso Eriol-contesto con franqueza-, es demasiado sufrir y se puede decir que ya perdí mi inocencia.

-Sakura, Dios no creó al hombre y a la mujer sólo por capricho-explico calmado-, los creó por que juntos hacen uno solo y se necesitan para sobrevivir.

La voz de Naoko, su secretaria, se oyó por el aparato de comunicación.

-Li Shaoran está aquí señora- anunció.

-Hazlo pasar-ordenó

Li Shaoran irrumpió en su oficina vestido con un elegante esmoquin. Eriol se despidió de Sakura con la mirada, no sin antes decirle "piénsalo" en voz baja. Shaoran se quedó parado al inicio de la puerta. Su aspecto era muy serio y pulcro, fisicamente, Sakura se sintió atraída por ese halo de misterio en el joven, pero segundos después se recordó el "es uno más" en su cabeza.

-Pasa, toma asiento por favor- le dijo señalándole una silla frente a su escritorio.

-Gracias.

-Dígame Shaoran-comenzó Sakura-, ¿por qué decidió enviarnos su solicitud?

-Bueno, es una propuesta diferente-comenzó a explicar Shaoran-, realmente me sentiría complacido con participar en un proyecto así.

-¿Le parece un buen negocio?

-Aparte de eso, las mujeres necesitan de vez en cuando algo con que distraerse-sonrió-, ¿no es así?

-Si, lo creó-contesto Sakura-, por eso creé esto.

-Sé que puedo dar lo mejor, trabajaré duro para usted.

En casos normales, Sakura entrevistaría a su nuevo trabajador mas extensamente. Pero Tomoyo le insistió con que él era un buen partido, y tomó la dedición rápidamente, además, le pareció una buena explicación de su parte.

-Contratado-le dijo.

No pudo contener su sorpresa. Para Shaoran era una dedición demasiado rápida, sin embargo, eso era lo mejor para él.

-Inicia mañana-le dijo Sakura- ven a las ocho de la mañana, mi secretaria te dará los detalles más ampliamente, que tengas buena tarde.

Lo dijo con tono cortes, pero sonó algo cortante en su despedida, él se limito a asentir y enfilarse a la puerta. Tomoyo entró y casi lo golpea.

-¡Perdona Li!-dijo alarmada.

-No hay problema señorita Daidouji.

Sakura arqueó las cejas.

-¿Qué ustedes se conocen?-pregunto extrañada.

-Claro que si-contesto Tomoyo-, el es el barman del Skyy Line, por eso te lo recomendé, llevo un par de semanas conociéndolo.

Los dos le sonrieron a la castaña.

-Siento no haber mencionado eso-se disculpo Shaoran.

-No hay problema-contestó Sakura volviendo a los papeles-, nos vemos mañana.

Shaoran les sonrió a las dos y salió por la puerta. Tomoyo se acerco hasta donde Sakura.

-Interesante, ¿no?

-Debiste habérmelo dicho- replico Sakura divertida-, no tendría que haberlo citado si lo conocías.

-Lo conozco poco-confesó Tomoyo-, pero es un buen hombre según veo.

-Eso espero de verdad.

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Shaoran aceleró más su deportivo negro. La carretera estaba desierta, le dio más oportunidad de acelerar con confianza. Al cabo de un par de minutos llegó a un restaurante de comida rápida aún lado de una estación de gasolina. Se bajo apresurado, aventó su abrigo dentro del auto y lo cerró, para después correr dentro del restaurante. Cuando entró estaban casi todas las mesas vacías, excepto por dos: en una estaba una pareja, y en la otra un rostro conocido para él. Se acercó rápidamente.

-Hola Li-saludó Clow Reed.

Shaoran hizo una reverencia y se sentó frente a él. Clow Reed era el jefe de investigaciones especiales del departamento de policía de Tokio, le había asignado especialmente el caso de Hailsham a Shaoran.

-Siento que nos veamos aquí- se disculpo Clow-, es por la confidencialidad del caso.

-No hay problema señor.

-¿Cómo te ha ido?

-Bien. Me aceptaron al instante-dijo Shaoran-, el entablar amistad con Daidouji me sirvió.

-Me alegra oír eso, Li- dijo antes de darle un sorbo a su café-, recuerda muy bien, esto es importante, tienes que avisarme de cualquier movimiento raro en esa mansión. Han insistido que hay movimientos ilegales detrás.

-Claro señor, así será.

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¡Hola a todos!

Bueno aquí yo con esta historia. Se me ocurrió en una noche de insomnio, y la estuve pensando varios días. Espero, que sea de su agrado, cualquier opinión al respecto dejen review.

Saludos

SilverWomen.