Bufé exasperado; tenía más de una hora recorriendo los pasillos de la escuela y no encontraba a Sakura, era desesperante necesitar ayuda en una tarea que debía entregar en la siguiente clase y que mi inteligente amiga no apareciera por ningún lado. Ciertamente podría pedirle ayuda a Shikamaru, Neji, a mi linda novia Hinata ó al idiota de Sasuke, pero a mi parecer, ella era aún más inteligente que todos ellos cuando de Biología se trataba; eso, sin contar que mi mejor amigo no aparecía por ningún lado al igual que Sakura. Preguntar por ellos a los demás era una pérdida de tiempo, todos parecían incómodos al respecto, o me miraban como si fuese un idiota que se perdió de algo, ¡por Dios!, en serio los idiotas son todos ellos al creer que saben algo que yo no.
Sin saber muy bien cómo, terminé en una pequeña área verde del instituto que se encontraba técnicamente abandonada, nadie iba para allá desde un tiempo, todavía no sé muy bien porqué; se encontraba muy bien cuidada, había árboles muy lindos y bueno, quizás no fuese el sitio más espacioso de la preparatoria pero se veía confortable.
Fastidiado y cansado, caminé hasta el árbol más cercano decidido a sentarme bajo su sombra hasta que escuché un ligero murmullo. Agudicé el oído mientras intentaba acercarme un poco más al árbol sin ser detectado. Eran dos personas, dos desagradables personas dándose muestras de afecto detrás del árbol, quizás era por culpa de ellos que nadie más iba a aquel lugar; qué desconsiderados, me dispuse a aproximarme más al árbol para interrumpir sus sonoras caricias cuando escuché algo más.
—Alguien puede vernos… —escuché susurrar con preocupación a una voz femenina muy familiar para mí mientras su acompañante seguía repartiendo besos en lo que imaginé sería el cuello de ella. No tardé más que unos segundos en reconocer que era la voz de Sakura. Instintivamente me llevé una mano a la boca, mi correcta amiga en una situación como esa.
—Eres molesta, te dije que nadie viene a esta parte del instituto —respondió el muchacho mientras dejaba de proporcionarle besos a Sakura. Tardé muchísimo menos en reconocer aquella voz; estaba demasiado acostumbrado a ella. Me llevé la otra mano al pecho, creí que se me escaparía un grito al reconocer a mi siempre serio mejor amigo. ¿Desde cuándo Sakura y Sasuke tenían algo?, ¿por qué no estaba enterado de nada?
Escuché como los besos y caricias volvían junto con una que otra risita por parte de Sakura, o algún gemido proveniente de cualquiera de los dos. Lentamente y todavía sin poder creérmelo me fui retirando de ahí.
No estaba seguro si podría encontrar la ayuda de alguien a tiempo, o si podría entregar la dichosa tarea hoy, pero de algo que sí estaba muy seguro era que necesitaría mucho tiempo para poder borrar de mi mente tan desagradable escena.
Bueno, eso sería todo. Mi intención al principio era hacerlo en el mundo ninja pero para eso habría tenido que spoilearle a muchos ciertas cosas porque lo hubiese ubicado después del final del manga, único espacio de tiempo razonable para que estén juntos los tres sin querer matarse.
Muchas gracias por leer.
