En la pacifica aldea escondida entra las hojas, recién reconstruida después de que la gran cuarta guerra ninja acabara, la quinta hokage seguía estando en el puesto aunque claro ella quería retirarse para disfrutar de su jubilación y de sus años dorados.

Pero mientras tanto seguía sentada en su oficina, leyendo el papeleo y mandando a misiones algunos shinobis, ya que aunque se allá acabado la guerra seguían vivos unos pequeños grupos de ninjas malvados que querían interrumpir esta nueva paz.

Mientras que el equipo siete estaban reunido nuevamente, ya que Sasuke había pedido un tiempo para hacer su viaje de redención pero ya por fin había acabado y estaba de regreso en la aldea.

Aunque claro al principio no fue bien recibido por los aldeanos ya que seguían desconfiando de él, el Uchiha tuvo que hacer trabajo comunitario además de estar vigilado por los cazadores ambu las veinticuatro horas del día.

Pero eso no fue impedimento para que el regresara ahora como miembro activo del equipo siete, Naruto tenía que estudia para que se pudiera convertir en hokage ya que aunque era el héroe de la cuarta guerra ninja era muy joven y seguía siendo muy impulsivo.

Y es por eso que en ocasiones Sakura le pegaba para que dejara de hacerlo, mientras que la pequeña flor de cerezo que daba vida al equipo siete se había convertido en la mejor medico ninja además de que era conocida como la princesa del puño por la tremenda fuerza que podía acumular en un solo de su puño.

Aunque estos chicos se habían vuelto a reunir junto con su sensei kakashi Hatake, estaban separados la mayor parte del tiempo ya que tenían actividades muy lejanas uno de los otros así que solo se reunían para entrenar o para ir a comer a ichiraku.

Pero un día todo fue diferente.