Disclaimer: The Legend of Korra es propiedad de Michael Dante DiMartino y Bryan Konietzko.
Este Fic participa en la Semana Boleska, organizada por el Foro ¡El Cometa de Sozin!
Fue divertido, ¿no?
Ha llegado el momento de regresar a Ciudad República, a su hogar. Pero... ¿Qué es el hogar sin ella?
Bien lo dijo cuando la conoció "Te haré mío" y lo cumplió en todo el sentido de la palabra.
Ahora le pertenecía, pero no de una manera carnal, o por lo menos no del todo. Ahora estaba ligado a Eska, en alma. Aunque la idea no lo agradaba del todo, en especial ahora que con cada segundo que pasaba, él se encontraba más lejos de ella.
¡Y vaya que le había rogado que se fueran juntos!
"Será divertido, podremos ser felices los dos. Bueno tres. ¡Desna también puede venir!"
Pero ella siempre sonría ligeramente y negaba con la cabeza: No estaba en sus planes compartir un futuro con aquel Maestro Tierra.
Y con el corazón abatido y decepcionado, Bolin se marchó a su Ciudad.
Repitiendo en su cabeza imágenes de la mujer que con su extraña forma de querer, logró conquistarlo.
El primer e inesperado beso... No se lo imaginaba, pero le encantó pobrar los dulces labios de Eska. Porque a diferencia de lo que muchos pensaban, transmitían calor.
Bajó la mirada al recordar que la dejó plantada en el altar. ¿Esa sería la imagen con la que Eska se quedaría de él? Un hombre que en un principio se mostró interesado en ella, para después huirle como la peste, y finalmente, regresar a sus brazos.
Quizá Eska no había sido la mejor novia del mundo, ni por asomo. Pero no era nadie para juzgarla. Porque también él había cometido errores.
Y a pesar de todo, se habían divertido. Sí, incluso Desna le llegó a agradar.
El tiempo que pasó con los mellizos, serían recuerdos que se quedarían por siempre en su memoria. Intactos y claros como el agua.
O eso quería creer, pero lo cierto era que, mientras más se alejaba, más miedo sentía de olvidar todas esas memorias.
Y quizá nunca volvería a verla...
¿Y si se casaba con alguien más? Alguien apuesto, algún Maesto Agua poderoso, valiente, y noble. Y que, por supuesto, no la abandonaría en el altar.
Un nudo se formó en su garganta de sólo pensarlo.
Mako, al verlo tan nervioso, decidió preguntar.
—¿Todo bien, Bo?
Bolin se dejó caer dramáticamente en el hombro de su hermano mayor.
—¡La extraño, hermano! —Confiesa desesperado.
Mako, levemente sorprendido, pues no creyó jamás que alguien fuera capaz de extrañar a alguien como ella, decide consolarlo como puede.
—No te pongas así. Podemos venir a visitarla alguna vez... O quizá ella vaya a Ciudad República. Además tú lo dijiste: Ella guarda un lugar para ti en su frío corazón —Hace todo lo que puede, no le gusta ver a su hermano triste.
Bolin alza la vista, esperanzado: Una vez más su hermano tiene razón.
—¡Ella guarda un lugar para mí en su corazón! —Repite con notable emoción. Y Mako le sonríe ligeramente.
—Jamás me olvidaría, ¿verdad? Quiero decir, soy apuesto, gracioso, tierno, imposible de olvidar —Hace un gesto coqueto, y su hermano rueda los ojos con diversión. Por lo menos ya no se le veía angustiado.
Bolin ríe para sí. Porque ahora tiene la certeza de que su relación será recordada por siempre.
Aunque no se vieran todos los días, Eska siempre estaría en su mente, y esperaba que ella también pensara en él.
Gracias por leer.
Si encuentran algún error, por favor me dicen *n*.
Saludos.