Hooolaaa Este es mi primer fic*-* y estoy muy emocionada la verdad, esta historia la había escrito hace muchísimo tiempo y tenía dudas sobre si subirla o no, pero de todas formas ahí les va!, se ubica luego de los acontecimientos en HP and the DH y perdónenme si quedó algo OCC, intenté hacerlo lo mejor que pude, de todas formas me dirán en un review si quedó bien o no y si quieren que lo continúe ;D
Sin más que decir les dejo con el cap 1!
Capitulo 1: La Bienvenida a Hogwarts…
Era una mañana agitada en el andén 93/4, ya que el año escolar se había atrasado debido a la reconstrucción del castillo, era 15 de Septiembre y los alumnos esperaban con ansias el nuevo año que comenzaría dentro de poco, sobre todo con la notica que tendrían 3 nuevos estudiantes de intercambio, que venían desde muy lejos.
Por su parte Harry, Ron y Hermione quienes decidieron continuar con su último año escolar, muy a pesar de las quejas de Ron quién decía que era una pérdida de tiempo, ya que habían derrotado al Señor Tenebroso, y no le encontraba sentido a pasar un año más de tortuosa escuela.
Los tres amigos se encontraban ya en el tren y emprendieron la tarea de encontrar un compartimiento vacío, luego de caminar por aproximadamente 15 minutos encontraron uno, aunque no tan vacío como esperaban.
-¡Hola!- Saludo una muchacha de cabellos rubios muy alegremente y con aire soñador que sostenía un ejemplar de El Quisquilloso.
-¡Luna!-Gritaron los tres chicos entre sorprendidos y alegres de encontrarla allí.
Rápidamente ocuparon los asientos vacíos y entablaron conversación con la rubia quién estaba emocionada que sus amigos también estuvieran allí y como ella, decidieran continuar con sus estudios ese año…
-¿Has sabido algo sobre Neville, Luna?-preguntó Hermione mientras guardaba su maleta- Emm pues... creo que lo vi sentarse junto con Dean y Seamus unos compartimientos más adelante- Respondió la chica sin apartar la vista del periódico que leía.
-Valla al menos no somos los únicos anormales que decidieron continuar con la escuela- refunfuñaba Ron con cara de fastidio mientras sacaba un Sándwich de su maleta y comenzaba a devorarlo.
-Anormal serás tú Ronald, es lo más sensato, ya que el año pasado no pudimos por culpa de Quién tu sabes, además es genial que todos volvamos a la escuela- lo reprendía Hermione mientras Luna y Harry observaban la escena.
-Sí claro, lo dices porque eres una cerebrito- decía Ron quién no controlaba su mal genio de ese día.
-Pero así me quieres tú- contraataco Hermione con una sonrisa de suficiencia, Ron enseguida suavizaba su expresión para tomarla de la mano y darle un suave beso mientras decía con una sonrisa- Por supuesto-.
Luna se limitaba a sonreír y leer el periódico. Harry por su parte escuchaba la plática de sus amigos y pensaba que por fin podrían relajarse en Hogwarts ese último año, ya que todas las posibles amenazas estaban erradicadas por la derrota del Señor Tenebroso hacía ya casi un año. Cuando de repente un movimiento sacó de sus cavilaciones al chico, el tren estaba arrancando y cada vez estaría más cerca de su hogar, el lo consideraba así ya que sólo en Hogwarts se sentía bien y seguro, a pesar de cualquier problema que ocurriera.
El viaje fue muy tranquilo y por todo el tren habían estudiantes hablando sobre los 3 nuevos chicos de intercambio, a Harry realmente no le parecía la gran cosa, aunque tenía cierta curiosidad por cómo serían esos chicos o chicas, rápidamente esto se desvaneció cuando Ginny entro al compartimiento a saludarlos, vagamente se daba cuenta que venía acompañada por Neville, quién también los saludo y se quedaron platicando; Harry por su parte se maravillaba con Ginny, podía quedarse observándola durante toda su vida y sabría que nunca se cansaría de hacerlo; ahora podría darse el lujo de estar con ella sin el temor a que le pasara algo por culpa suya, ya que el muchacho estaba confiado en que ahora su vida sería realmente distinta y no tendría problemas nunca más…. O al menos eso esperaba...
En ese momento, Ginny lo sorprendió observándola, le sonrió ampliamente y Harry le devolvió la sonrisa. Ron se percató de este intercambio y bufó enojado, y se desquitó dándole un gran mordisco a su 3er Sándwich.
Más tarde. Cuando se encontraban muy cerca de la estación de Hogsmade, Luna preguntó:
-¿Qué les parece la idea de los estudiantes de intercambio?- Dijo la chica mientras ponía cara pensativa.-Pues no lo sé, me parece genial que traigan nuevos estudiantes, así podremos conocer más personas- Decía un emocionado Neville, mientras un Harry embelesado con Ginny no se dio cuenta que el tren frenaba y cayó de boca contra el asiento de enfrente, golpeándose la cabeza, levantándose muy rojo y rápidamente mientras sus compañeros salían del compartimiento, el único que se percató de este incidente fue Ron, quien enseguida lo ayudó a levantarse mientras se reía por lo bajo.
Cuando salieron del tren se encontraron con Hagrid quién los saludo efusivamente con la mano mientras guiaba a los alumnos de primero hacia los botes, ellos le devolvieron el saludo y se encaminaron hacia los carruajes tirados por Thestrals, una especie de caballos alados invisibles, sólo aquellos que han presenciado la muerte pueden verlos. Harry y los demás subieron a los carruajes platicando sobre cosas sin sentido mientras esperaban el banquete de bienvenida, valla que Harry estaba hambriento, en el tren no le dio tiempo siquiera de comprar algo por el viaje, o tal vez no presto atención cuando la señora del carrito pasaba, todo por quedarse mirando a Ginny, bueno eso no importaba, el punto es que tenía hambre y sólo contaba los minutos para llegar al Gran Comedor. Tampoco podía dejar de mirar a Ginny, el chico empezaba a reprocharse a sí mismo por ser tan dependiente de ella, claro, estaba enamorado; era un adolescente y tenía hormonas a flor de piel, aunque tampoco era esa la excusa, también quería arreglar las cosas con ella, y a la menor oportunidad lo haría, si señor -¡Claro que sí!- Se decía a sí mismo el chico mientras iban de camino a sus habitaciones en la torre de Gryffindor a alistarse para el banquete, sin querer esto lo había dicho en voz alta y ahora Ron y Neville que estaban con él subiendo las escaleras lo miraban como si estuviera loco, Harry los ignoro olímpicamente y llegó a la habitación.
Después de estar listos para el banquete, Harry y Ron prácticamente corrieron hacia el Gran Comedor, Neville llego exhausto por tener que seguir a los 2 chicos tanto tiempo corriendo, finalmente localizaron a los demás que ya estaban sentados en sus respectivos sitios, Ron al lado de Hermione, Neville del otro lado junto a Seamus y Harry al lado de Ginny, cosa que Ron no pasó desapercibida y frunció el ceño profundamente. Acto seguido, McGonagall se aclaro la garganta y se dispuso a hablarles a los estudiantes, los saludo y les anunció lo que ya todos sabían pero querían escuchar:
-Como ya todos saben este año tenemos a 3 estudiantes de intercambio- Comenzó la profesora con aire soñador-Quiero que le demos la bienvenida a: Lyo Romannov, Amanda Malfoy y a Samantha Morrigan.- Decía emocionada- También tenemos a un nuevo profesor de Defensa contra las Artes Oscuras, Denle también la bienvenida al profesor Stefan Alucard, y suerte profesor.- Terminó de decir McGonagall
Todo el mundo los aplaudió, los 3 chicos y al profesor que se levantaron de sus asientos, el chico de nombre Lyo era Alto, Rubio, con unos extraños ojos de color Gris, de piel pálida y facciones juveniles, un aire de autoridad lo envolvía y le daba un toque serio; una de las chicas, Amanda era una esbelta rubia de unos ojos Azules de color igual al mar, facciones de modelo y un aire de suficiencia que le daba el propio aspecto de los Malfoy, ambos 2 estaban muy ruborizados, mientras que la otra, Samantha era pelinegra, piel pálida y de facciones sorprendentemente hermosas a pesar de estar marcadas por una mueca de aburrimiento, su expresión era de indiferencia pura y la hacía ver como si todo eso le aburriera de sobre manera, mientras que el profesor, tenía un semblante frío y calculador, parecía como si no hubiera dormido en mucho tiempo, y su expresión era de incomodidad.
-¡Es idea mía o esa chica que esta allá- señaló a la rubia Amanda- es pariente del mocoso Malfoy!- Decía Ron impresionado.- Al parecer sí- Respondió Harry mirando a la chica con cierto interés, esta lo capturo y le giño un ojo coquetamente. Harry se ruborizo al tiempo que sentía un fuerte dolor en el pie izquierdo producto del pisotón que le acababa de propinar Ginny, quién ahora lo agarro por el brazo territorialmente. El chico no entendía aquello, y decidió olvidarlo, aunque lo que le había hecho Ginny ni se comparaba con la patada que le propino Hermione a Ron por no dejar de mirar a Amanda como un completo idiota, ahora se quejaba y agarraba su pierna por debajo de la mesa, al tiempo que maldecía a Draco Malfoy (N/A: Sólo dios y yo sabemos el porqué ;D xd!).
Neville observaba esto divertido mientras que no dejaba de mirar a Samantha, que a pesar de estar sentada en la mesa de Ravenclaw, y el tener que girar completamente su torso para hacerlo, no le incomodaba.
A la mañana siguiente después de clases en la sala común, Hermione estaba emocionada gritando a los 4 vientos que dentro de 3 días sería su cumpleaños nº 18 y su fiesta, a la que por supuesto estaban invitados sus amigos y los Weasley, sin contar sus padres, la fiesta se realizaría en un salón de Hogsmade, sería una fiesta de disfraces por lo que Harry estaba preocupado, nunca en su vida había ido a una fiesta así y mucho menos sabía de que disfrazarse por lo que le pidió ayuda a Ron cuando estaban en su dormitorio, era obvio que su amigo iría, era el novio de Hermione, y también el que tenía más probabilidad de saber cómo eran las fiestas de disfraces de los magos…
-Bueno colega es casi igual a las que hacen los muggles- Decía Ron luego que él le pregunto cómo eran las fiestas de disfraces en el mundo mágico- lo único que las diferencia es que en las de nosotros, los disfraces a veces suelen tener magia, y parecer muy reales- Había dicho mientras comía una Gragea de Todos los Sabores y le pasaba el empaque a Harry.-Ahh… Entonces... Puedo disfrazarme de lo que yo quiera e ir, ¿como si fuera una fiesta normal?- Pregunto este mientras también comía una Gragea pero enseguida la escupía: le había tocado una con sabor a barro.- Exacto, ahora solo tenemos que encontrar un disfraz rápido para no estar apurados el día de la fiesta.-Dijo Ron mientras ponía cara de fastidio- Mañana podríamos ir al callejón Diagon y comprar los disfraces- ofreció Harry recordando que mañana tendrían día libre a pesar de ser Jueves. Así siguieron hablando hasta que los dos se quedaron dormidos, en la mañana se dirigieron junto con Neville, Ginny y Luna a comprar sus respectivos disfraces, cuando llegaron a la tienda, la dependienta les ofreció varios modelos, pero ninguno llamó la atención de Harry, hasta que oyó que Ginny compraría uno de princesa griega, el se decidió por uno de gladiador y al ver que Ron tampoco se decidía le sugirió que fuera de emperador, este aceptó mientras que Neville por su parte eligió uno más convencional como lo era el de Doctor; ni Luna ni Ginny dejaron ver sus disfraces, con la excusa de que querían mantenerlos en secreto hasta que llegara la hora de la fiesta, lo mismo paso con Hermione, quién se había ido con sus padres a elegir el suyo, pero en el mundo muggle.
Salieron de la tienda, y se fueron a comprar los regalos para Hermione, Ron por su parte no le compró nada, alegando que ya él había comprado el regalo para su novia, Harry le compro un libro, luna le había comprado un micropuff, Ginny y Neville también habían comprado sus regalos por lo que regresaron al castillo para guardarlos y platicar, La fiesta era en parejas, por lo que Harry invitó a Ginny y Ron iría con Hermione, eso no cabe duda, Luna no había querido decir con quién iría, Neville había invitado a Cho Chang; lo que sorprendió a todos, porque aunque su amigo no les hubiera dicho; secretamente sabían que a quién Neville quería invitar, era a Samantha Morrigan.