Bueno, hola a todos! Bienvenidos a mi nuevo fic jeje… NanoFate en toda regla. Un poco de magia y drama, pero muuucho fluff aviso xD. Espero k os guste n_n
NOTA: AL PRINCIPIO OS PARECERÁ MUY FANTASIOSO Y QUE NO HABRÁ CASI NADA DE ROMANCE, PERO ESO ES SOLO INICIALMENTE XD
Por cierto la narraré en tercera persona e.e
Y sin más demora… ¡Por qué eres tú! .
Capítulo 1: ¿Te conozco?
Era una noche de verano, cuando todo empezó. Nanoha, una chica de unos 16 años, castaña, ojiazul y peinada con una coleta larga al lado. Regresaba del instituto a casa, tal vez eran las ocho, ya que se había quedado en casa de Suzuka a hacer los deberes. Ella no tenía idea de lo que le esperaba ese día… Hasta que…
-¡CRASH! –Se escuchó un extraño sonido como de algo rompiéndose y de repente todo el mundo parecía detenerse.
La castaña se sorprendió al ver como algo parecido a una barrera amarilla rodeaba toda la zona. Giró una calle hasta ver gente. Paralizada.
-¿Pero qué…? –Nanoha no se asustó ni mucho menos, a ella le gustaba afrontar las cosas y explorar así que se propuso dar vueltas por allí hasta dar con la clave de aquél suceso extraño.
-¡CUIDADO! –Una voz la sorprendió. De repente vio delante suyo un círculo mágico, como el que veía en los animes shonnen. Curiosamente del mismo matiz que el de la barrera que envolvía todo aquello.
Pronto se percató de semejante criatura delante suyo. Un basilisco de 10 metros de altura por lo menos. Quiso gritar, pero no le llegó la voz a la garganta y cuando se dio cuenta, un pequeño animal se abalanzó hacia el basilisco, lanzándole un ataque conjunto de rayos. Al instante en que la magia chocó contra el monstruo, éste desapareció, dejando tras de sí una especie de fuego negro.
Nanoha se quedó boquiabierta. Y entonces el aura amarillenta y el círculo mágico que envolvía a la castaña desaparecieron.
-¿Tú has sido el que ha hecho eso? Pero… -¿Cómo…? ¿Qué…? ¿Cuándo…? –El rostro de la castaña se veía cada vez más confundido y la cabeza le daba vueltas.
-Tranquila. Me alegro de que no estés herida. –Dijo el zorro sonriéndole.
-¿Eh? Sí, bueno… Gracias por salvarme la vida… Pero… ¿Eh? ¿Eh? ¿¡EEEEHHHHH?! –Nanoha abrió los ojos cómo nunca al darse cuenta de que el animalito hablaba.
-Tranquila, a ver si te va a dar un ataque cardíaco. –Rió de medio lado.
-¿Cómo es qué…?
-Fácil, soy tu guardián. Yo te protegeré de esos monstruos, como el de ahora. Hace poco fui liberada de mi santuario para protegerte, es mi destino. No te alteres.
Al ver que Nanoha seguía sin habla, el pequeño animal siguió;
-Verás, esos monstruos parecidos a los basiliscos se llaman ghouls. –Dejó salir un suspiro y continuó; -Son magos, bueno eran, que han absorbido magia o han intentado conseguir poder mágico artificialmente, mediante un ritual. Éste cuando les sale mal, sus almas se oscurecen y terminan transformándose en esas horrendas criaturas.
-Ah… Vale… ¿Pero por qué me ha atacado? –Dijo intrigada.
-Eso es por qué posees un poder mágico abrumador en tu interior. Perteneces a un clan antiguo cuyos magos eran muy poderosos, Takamachi.
-Sí… ¿Eso significa que puedo usar magia? –Insistió Nanoha con un brillo indiscutible en sus zafiros.
-Bueno… No… -Se quedó pensativa unos instantes para luego añadir;
-Sí puedes, pero la magia del clan Takamachi es diferente. Sólo la magia saldrá fuera de tu cuerpo en situaciones extremas, es decir, cuando realmente estés en verdadero peligro. –Se intentó explicar el zorro.
-Entonces mi madre, ¿mi padre y mis hermanos también tienen esa habilidad?
-No, ellos lo tenían hace tiempo pero poseían muy poca cantidad de poder mágico, así que con el paso del tiempo se extinguió… Pero tú… Tú has nacido con un poder inimaginable en tu interior, no sé por qué.
-Ah… De… Acuerdo… Mejor vayamos a mi casa y me explicas más… -Le dirigió Nanoha la mirada al animal debajo suyo.
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-Etto… ¿Quién o qué dices que eres? –Le preguntó la castaña al animal hablador que poco antes le salvó la vida.
El zorro dorado cuyas extremidades eran de un tono oscuro se le quedó mirando con sus ojos rubíes.
-Ya te lo he dicho, soy tu protector. Tienes una magia que yace en tu interior demasiado poderosa, así que atraerás ghouls. Yo he sido liberada de mi santuario y me han enviado aquí para protegerte.
La castaña la miró confundida, no entendiendo nada.
-Disculpa, muchas gracias por salvarme la vida antes pero no sé lo que son ghouls, nyahaha… -Dijo frotándose la nuca.
El animal se llevó una pata a la cara y poco después agachó la cabeza, pero luego la levantó para hablar.
-A ver… Lo que nos ha atacado antes… ¿Lo entiendes? Eso es un ghoul. Simplemente, monstruos. Pero no te preocupes, el de antes era muy débil, lo he derrotado sin esfuerzo prácticamente.
-Ah… Ya… Veo… Des de luego que no se ve todos los días un zorro dorado con las extremidades oscuras luchando con magia y atacando a un basilisco de casi diez metros, nyahaha… -Exclamó la castaña con las manos en las rodillas, sentada en su cama.
El pequeño animal dejó salir un suspiro y se aproximó a la castaña.
-¿Cómo te llamas?
-Nanoha, Nanoha Takamachi.
-Nanoha-sama.
-Emm… Realmente no es necesario que me llames así… -Dijo mirando al animalito extrañada.
-Sí es necesario, usted es mi ama, con mucho gusto la protegeré a partir de ahora. –Dijo el zorro firmemente.
-De acuerdo…. –Dijo la castaña no muy convencida.
-¿Cuál es tu nombre?
-Fate, Fate Testarossa. Puede llamarme como desee, ama.
-Mou, Fate, ¡No me llames así! –Infló los pómulos.
-Des de ahora te ordeno que me llames por mi nombre.
-Pe-
-Nada de peros. Es una orden. –Miró al animal, sonriendo.
-Na-Nanoha-san…
-Quita el san.
-Na-Nano…
-Vamos… Dilo.
La castaña disfrutaba de la vista, el pequeño animal había bajado la cabeza, algo ruborizado
-¡Nanoha!
Dijo al final, casi gritando.
-Bien, ¿ves como no es tan difícil?
El zorro no respondió pero se podían oír refunfuños.
-¿Fate…chan?
Al instante, el animal levantó la vista y miró a la castaña con algo de brillo en la mirada, esa mirada intensa y borgoña.
-Puedes llamarme como quieras, Nanoha. –Dijo al fin.
-Vale, Fate-chan. –Respondió sonriendo.
-Oye, ¿Y si dormimos? –Preguntó la ojiazul.
-De acuerdo… -Susurró el animal mientras bostezaba intentando ocultarlo con una pata.
-Bueno, yo me voy. –Dijo finalmente el zorro mientras abría la ventana para saltar a fuera.
-¡Espera! ¿Dónde piensas ir? –Le detuvo la castaña.
-A dormir bajo algún techo, ¿por qué?
-No te pensarás ir… ¿verdad? –Le dijo tristemente Nanoha.
-Sí.
-No te vayas. Quédate conmigo. Recuerda que si algún monstruo viene a buscarme y tardas demasiado en llegar, moriré… -Esto último lo dijo casi en un susurro.
Al oír esto, el animal se enterneció y al mismo tiempo se horrorizó. Se acercó a ella y le puso las patas en las piernas, como si fuera un perro. Con la cabeza, acarició la pierna de la castaña y ésta la levantó del suelo son las manos y la abrazó.
Fate se acurrucó debajo de su mentón y movió la cola.
-Está bien, me quedaré contigo. –Cedió el animal al deshacer el abrazo.
-Gracias… -Le dijo Nanoha con una brillante sonrisa y mirando a Fate con cariño.
Nanoha se comenzó a desvestir para ponerse el pijama, a lo que Fate se alteró;
-¿Q-Q-Qué haces?
Nanoha miró al animal extrañada, como si lo que estuviera haciendo fuese lo más normal del mundo.
-Pues, cambiándome… ¿No lo ves?
Fate giró la cabeza. Sonrojada y calló.
Nanoha al percatarse de ello, cogió al animal por debajo de los brazos y lo alzó, sonriéndole con ternura. Luego lo achuchó contra su pecho y más tarde lo volvió a separar, alzándolo.
Claro que después del achuchón, a Nanoha se le había aflojado el broche del sujetador, que no tenía tirantes, y se le cayó.
Rápidamente el rostro del animal se transformó en uno completamente ruborizado y cuando estaba a punto de tener una hemorragia nasal, se tapó la nariz lo más fuerte que pudo, deteniéndola.
A Nanoha no parecía importarle realmente, por lo que el zorro tuvo que hablar.
-Na-Na-Nano-Nanoha… Etto… Tu… Bra-Brasier… -Tartamudeó el zorro.
-Oh, no te preocupes, igualmente siempre me lo quito para dormir, nyahaha…
Dejó al animal en su cama y se puso rápidamente el pijama para luego tirarse donde éste estaba, casi aplastando al animal. Entonces se arropó y atrajo hacia el zorro hacia ella. Éste se acurrucó en el pecho de Nanoha y cerró los ojos.
-Además… Ya sé que eres un zorro hembra. No hay por qué preocuparse, nyahaha. –Rió de medio lado.
-¿Cómo sabes que soy hembra?
-Por tu voz y tu bello pelaje tan bien cuidado, jeje. –Dijo Nanoha sonriéndole.
-Ah…
-Por cierto, hay confianza, ya que eres un animal. No tengo vergüenza, tranquila…
Al oír esto, el animal comenzó a sudar, pero Nanoha no lo notó.
-Sí…Claro… Un animal… -Y se durmió, o al menos, lo intentó.
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Bueno… Jejeje, aquí acaba el primer capítulo, nyahaha. Oh vaya… Se me está pegando la risa de Nanoha T_T xD
Bueno espero qu haya sido de su agrado, gracias x tomarse la molestia de leer. Iré siguiendo este fic siempre y cuando me dejen reviews, ya saben que siempre ayudan jeje.
PD: En el próximo capítulo… ¡Nanoha se entera de que Fate es una humana! O_O