Capítulo I El despertar de un sueño
Todo era oscuridad, como su alma, pero a lo lejos escuchaba el murmullo de las conversaciones de la gente que estaba esperando que ella saliera.
Cerró los ojos con fuerza obligándose a no llorar, no podía hacerlo aunque quisiera, tenía que aguantar, tenía que soportar…
– ¿Estás bien? –dijo su amigo preocupado.
– Sí –dijo ella fingiendo una sonrisa.
– Mentirosa –dijo su amigo mirándola- mejor hubiera sido cancelar la presentación hasta que estuvieras mejor…
– No –dijo ella con voz calmada- estoy bien no te preocupes.
- ¡Flor! –dijo el chico sin creerle.
- Damián –dijo Flor mirándolo- estoy bien, aparte no hay nada mejor en este momento para mí que cantar… en verdad lo necesito.
- Muy bien Flor –dijo Damián dándose por vencido- como tú digas.
- Gracias –dijo Flor en voz baja.
- Yo te aviso en el momento en el que debes de salir –dijo Damián, saliendo del camarín y dirigiéndose al estrado en donde Flor iba a cantar.
Flor se miro en el espejo, estaba hermosa como siempre, pero sus ojos siempre alegres ahora estaban tristes, pues ahora nada tenía sentido, todos sus sueños estaban rotos, no tenía ánimos para nada y Damián lo sabía. Claro que lo sabía, la conocía demasiado bien, veinte años de convivencia no pasaban en vano, además eran como hermanos, se habían criado juntos desde el nacimiento de Flor, aunque ella había ido a vivir a la casa de Damián cuando su madre murió, en esa época Florencia tenía nueve años y Damián diez, la mamá de Damián era la tía de Flor así que la acogió en su casa con mucho cariño.
Damián y Flor se levaban muy bien, tenían muchas cosas en común, ambos amaban la música, así que junto a unos amigos habían formado una banda de música, donde Flor era la voz principal, Damián el baterista y dos chicas para hacer los coros, Clara y Natalia, ambas muy amigas de Flor y de la misma edad que ella .
Los cuatro habían logrado hacerse conocidos ya que tocaban en diferentes bares o club, poco a poco iban ganando más fanáticos y hace poco una disquera le había ofrecido grabar su primer CDS.
Los cuatro estaban eufóricos, ese día un representante de la disquera iba ir al concierto a comprobar si en verdad ellos eran tan buenos como decían y si daba su visto bueno en ese mismo momento firmaban el contrato, por eso Flor estaba ahí, dispuesta a cantar. Era la primera vez en esas dos horribles semanas que había vivido, que recién había salido de casa, pues porque pensaba que no tenía derecho a destruir el sueño de sus amigos solo porque ella estaba mal, no, no era justo.
Esa noche iba a cantar con todas sus ganas, iba a dejar su alma en el escenario, nada la iba a detener…
- ¡Flor! –dijo Natalia desde la puerta, mirándola preocupada- ¡vamos!
- Sí –dijo Flor sonriendo levemente, pero no pudo evitar que una lágrima recorriera su rostro.
Natalia abrazo a Flor con fuerza y dijo- No tienes que hacerlo…
- Así es Flor –dijo Clara que había visto todo y también la abrazaba—cancelamos todo no hay problema.
- No chicas, estoy bien vamos –dijo Flor secándose la lagrima y sonriendo- ¡Vamos a cantar! ¿Sí?
- Sí -dijeron las chicas dudando.
- Chicas –dijo Flor en tono de advertencia.
- Sí –dijeron Clara y Natalia con más ganas.
- Vamos –dijo Flor y las tres se dirigieron hacia el escenario.
Clara entro primero entre los silbidos y aplausos de la gente.
- Natalia dile a Damián que toque la última canción –dijo Flor antes de que su amiga entrara al escenario.
- ¿Estas segura? -dijo Natalia.
- Sí –dijo Flor sonriéndole- ¡vamos! ¡Entra!
- Bien –dijo Natalia.
Antes de entrar Flor se persigno y con la otra mano apretó el amuleto que su madre le había dado antes de morir, su nuez de plata.
HOLA ESTE ES MI PRIMER FIC AQUÍ EN ESTA PAGINA….la historia fue colgada en otro fic… espero que comentéis si os gusta lo hice con mucho cariño… hoy voy a colgar tantos capítulos como pueda…. Cuídense y si pueden comenten…
Besosssss….
