Ya han pasado un par de años desde que haru afronto la decisión de tsuna de quedarse con kyoko , ella seguía su vida.
Había conocido en su visita a el parque de diversiones a un joven alto, de tez blanca, de aspecto delicado, rubio, que a ella le pareció sacado de cualquier manga shojo(*3*).
Su nombre Antuan , Antuan reford un joven ingles que llego a Japón a estudiar su cultura y sus tradiciones, era un estudiante de la universidad de Tokio , donde logro entre los mejores promedios de su generación al ingresar
.
Haru lo conoció de forma casual, al armarse de valor y subir sola a la montaña rusa, se asusto en uno de sus violentos giros y se encontró con un preocupado Antuan asistiéndole.
¿Está bien señorita?
Si, si, estoy perfectamente... (Su recordada muletilla (hahi) ya había sido dejada, Para parecer más madura y evitar las molestias de Bakadera)
Al bajar, la ayudo ofreciendo su mano y bajándola amablemente del juego.
¿Me concedería el honor de conocerle más hermosa señorita que han visto mis ojos?
Haru completamente ruborizada no logro conectar ninguna oración y solo asintió cortésmente mientras la dirigía un pequeño café donde tenían una vista perfecta del parque. Era un lugar soñado, lleno de color y alegría.
Fue un día soñado, un joven apuesto y atento, una salida al parque sin ningún problema.
En una palabra ¡Perfecto! Eso pensó...
Mientras entraba en su apartamento, el cual fue sido dado por tsuna.
No podía negar que aunque le dolió el no ser ella la nueva , tsuna siempre ha estado pendiente de ella, de sus estudios y de su seguridad por lo cual al haberse negado a vivir en la mansión , el se encargo de conseguirle un apartamento de lujo.
Haru pensó: Que día tan maravilloso *0*…en ese momento sonó el timbre de su piso…Voy..
¡Baka-onna! ¿Por qué no contestas tu celular?
Bakadera…tenía que tener algo malo en este día
