Kalan Hoonah Boox
LOS GUARDIANES OSCUROS DE LA PUERTA
CAPITULO 01: LA LLUVIA
Era una fría y lluviosa noche, impropia para el mes de marzo, en la ciudad de Karakura y un joven de cabellos anaranjados caminaba por las calles de su vecindario acompañado por una conocida teniente amiga suya, eran Kurosaki Ichigo y Kuchiki Rukia, regresaban de la tienda de Urahara, ya que la mañana de ese mismo día en la academia Karakura se había llevado a cabo la ceremonia de graduación de los estudiantes de último año y después de dicha ceremonia el joven shinigami y su grupo de amigos acordaron celebrar todos juntos en la tienda de Urahara, sin que él lo supiera simplemente llegaron a la tienda a celebrar, se divirtieron, hablaron de sus planes en la universidad, no obstante el joven peli-naranja y su amiga se fueron temprano a casa del joven ya que las hermanas menores estaban solas en la vivienda y Ichigo quedo a cargo de la cuidarlas y a la clínica familiar en lo que su padre volvía de un viaje de emergencia que tuvo realizar. Ambos jóvenes caminan juntos por las calles del vecindario cubriéndose con su propio paraguas, hablando de todo los sucesos que habían ocurrido en ese año, como el haber ganado con muchas dificultades la guerra contra Yhwach sus Vandereich, el obstinado arrancar conocido como Grimmjow se volvió su aliado y cada cierto tiempo iba al mundo humana a exigirle una pelea al shinigami sustituto o simplemente a perder el tiempo, ya que Hueco mundo no volvió a ser el mismo desde la guerra, y el que Uryu los hubiera ayudado al último segundo del combate, y la temporada que Ichigo tuvo que quedarse a entrenar en la sociedad de almas para adiestrar sus nuevos poderes y temió que tuviera quedarse para siempre, para su suerte no fue así, todo aquello parecía que había ocurrido ayer, cuando en realidad ya había ocurrido un año desde aquello, también hablaban de las extrañas circunstancias en las que se dio el viaje del padre del shinigami…
-¿Entonces solo recibió la llamada y se fue?- Pregunto Rukia
-Así es, fue muy extraño, se puso histérico cuando recibió la llamada, dijo que tenía que irse de viaje y se largó a toda velocidad- contesto Ichigo con una mirada algo seria
-¿Y no se ha comunicado desde entonces?- Continuaba interrogando Rukia notando la seriedad de su amigo
-No y ya ha pasado una semana desde que se fue, Karin está más que furiosa y Yuzu está muy preocupada –Decía Ichigo con un pequeño eje de preocupación
-Y tú también, verdad- dijo la pelinegra de forma burlona, tratando de quitar esa mirada seria de Ichigo
-Claro que no, el viejo siempre ha sido de raro- le contesto - Pero debería llamar o dar señales de vida de algún tipo- agrego molesto, pensando en la paliza que le daría a su padre cuando volviera de donde sea que este
La teniente shinigami solo se limitó a echar una pequeña risilla al ver como cambiaba rápidamente las expresiones de su amigo y que le había quitado aquella mirada tan severa y fría como la lluvia que caía a su alrededor, tras de un rato de seguir caminando llegaron a la residencia, se dieron las buenas noches y cada quien se dispuso por su lado, Rukia a la habitación que compartía con las hermanas del shinigami y el susodicho a la suya, pero no podía conciliar el sueño, no podía dejar de rememorar aquel momento, una semana atrás…
Flashback:
Eran alrededor de las 3 de la mañana, todos los miembros de la familia Kurosaki dormían tranquilamente, hasta el momento en el que el teléfono comenzó a sonar repetidamente, Ichigo que hasta entonces estaba dormido se levantó pesadamente de su cama para ir a contestar, no había terminado de abrir la puerta de su habitación cuando escucho que el ex–capitán shinigami que era su padre levanto la bocina deteniendo el escándalo y contesto somnolientamente, el joven iba volver a la cama cuando escucho a su padre alzar la voz
-QUE! ES IMPOSIBLE! AMBOS! PERO QUE DEMONIOS PASO?! Si entiendo… muchas gracias por avisarme… iré inmediatamente- grito Isshin sorprendido para luego sacar de un mueble lo que parecía un papel y mirarlo detenidamente –
-Espero, llegar antes de que pase otra cosa… Perdóname hermano…- fue lo único que dijo antes de notar que su hijo estaba en las escaleras mirándolo sorprendido- Ichigo! Con que a ti también te despertó el teléfono!- dijo tan enérgicamente como siempre
-¿Todo está bien? ¿Y quién llamo a esta hora?- Pregunto Ichigo aun sorprendido por las reacción de su padre ante esa llamada
-Es una larga historia, pero tengo que salir de viaje por unos días así que te la contare luego, Dime Ichigo ¿te acuerdas de una niña que vivió con nosotros un par meses cuando tenía 4?-Dijo Isshin sin prestarle mucha atención a la pregunta de Ichigo
-No y no me cambies el tema ¿Quién llamo?- Volvió a preguntar ya algo molesto
-Ya veo, deberías hacer algo con tu mala memoria, por cuida a tus hermanas y la clínica, hasta que regrese- le respondió Isshin evadiendo nuevamente la pregunta, para luego ir presuroso a su habitación
Ichigo trato de hacerles más preguntas al ex-shinigami, pero este las ignoraba y le daba más indicación a su hijo sobre cuidar a sus hermanas y a la clínica con su particular buen humor de siempre, pero el peli-naranja que había cierta preocupación en el rostro del viejo, y como alma que llevaba el diablo, Isshin se fue del domicilio. Ichigo miro a su padre salir por la puerta rápidamente, no hacía otra cosa que pensar en esa llamada telefónica, luego se dirigió al mueble donde su padre dejo el papel que había sacado que resultó ser una fotografía, fotografía en la que aparecía el de niño, a juzgar por lo pequeño que se veía debía tene años, saludaba enérgicamente con una gran sonrisa en su rostro y a su lado había una niña vestida de negro, un poco más pequeñas, muy pálida, peinada con 2 lazos rojos en su negra cabellera, uno a cada lado de su cabeza, sonría pero al mismo tiempo se veía realmente triste, como si en cualquier momento rompiera a llorar, parecía que ambos niños estaban frente la clínica Kurosaki, el shinigami sustituto trataba de recordar el momento en que le tomaron esa fotografía y a la niña en la foto, pero su mente estaba en blanco en esos momentos, a la mañana siguiente le dijo a sus hermanas que su padre se iría por unos días por una emergencia y que volvería lo antes posible, luego le mostro la foto para ver si sus hermanas conocían a la chica en la foto, pero además de un regaño por parte de las menores por tener tan mala memoria, ellas tampoco sabían quién era esa niña.
Fin del Flashback.
Estas imágenes no dejaban de pasar por la cabeza del joven de cabellos anaranjados, que se encontraba con la mirada perdida en el techo de habitación, mientras que su en escritorio reposa aquella fotografía, aunque no lograba recordar cuando fue tomada ni quien la tomo o a la niña, pero esa imagen impresa en papel le provoca cierta nostalgia, mientras que al otro lado del globo, en un aeropuerto se encontraba Isshin esperando su vuelo con una chica de largo cabello negro peinado con lazos rojos a su lado
-No era más sencillo pedirle a Watanuki que nos transportara con magia- le preguntaba la chica cabizbaja a Isshin
-Dejaríamos un rastro de reiatsu si hacemos eso, además quería gastar mis millas acumuladas- Dijo cómicamente el ex-shinigami a la chica esperando una reacción alegre de la misma, pero esta ni se inmuto- Oye, sé que esto está ocurriendo muy rápido y es difícil de asimilar, pero te prometo que harás nuevos amigos que te ayudaran lo superaras rápido-Le dijo Isshin a la chica dedicándole una sonrisa, la peli-negra le correspondió dándole una sonrisa también, pero era forzada y solo recalcaba más la triste imperante en su mirada y en su corazón, tristeza tan fría y honda como la lluvia.
CONTINUARA…
