Disclaimer: Los personajes no me pertenecen, si fuera así 7v7 jujujuj
Advertencia: Lo mas probable es que esto termine siendo un two-shot, no estoy segura.
Disfruten.
De hecho, eran las estrellas las que iluminaban el lugar y de pronto el extenso silencio que lo cubría todo. De hecho, había luciérnagas que bañaban el palacio del joven príncipe y con ello daba vida al frondoso lugar que repleto de flores se podía escuchar, cada pétalo ser movido por el viento y cada flor morir al instante por la fuerza del mismo.
Era bellísimo.
Sin embargo entre aquel momento, entre las nubes alguien se asomó, suspirando miro y enternecido bajo hasta sentir el mundo bajo sus pies y así escuchar el melifluo de un piano y el saboreo de una tristeza infinita que le carcomía el alma.
Sentía que podría dormir bajo el balcón del príncipe y abrasar su jovial cuerpo muriendo si es posible por el frió del lugar, no obstante en su interior había algo que le decía que solo exageraba.
Que lo que sentía solo era porque era él, él no era ágape, él no sentía un amor incondicional, él sentía una atracción física.
Por esa razón se escondía entre las montañas y desnudo se bañaba en el mismo lugar que él príncipe cuando podía, por esa misma razón bajaba y miraba por su ventana hasta poder arrullarse entre sus hermosos cantos y sentir como sus brazos lo rodean y sus ojos le queman, le hace suyo.
De pronto siente que es más Ágape que Eros.
Y que nunca debió enamorarse de un humano.
Caminaban a paso apresurado, los campesinos cargaban grandes carretas con mercancía y personas vestidas para un gran evento se organizaban. La nación de Hasetsu, resguardado bajo la ala del rey Nikiforov estaba desesperada, nuestro amado príncipe cumplía ya su mayoría de edad y por fin iban a dar comienzo a la era de Viktor "la leyenda" proclamado así por sus grandes atributos en la esgrima, arco y flecha y su jovial rasgo para ser perfecto en todo.
Cuando fuera coronado, este hermoso joven con cabellera larga y sedosa tomara entre sus manos una gran nación y será el futuro que todos esperaban.
Él que sacara adelante este reino y prosperara hasta que muera y sus hijos sigan su legado.
Todos desean lo mejor para él pero…
-¡Viktor! ¡¿Dónde estás?! – Los arbustos se movieron con rapidez y una silueta Salió corriendo mientras que cruzaba su jardín y rodeaba los frondosos árboles hasta llegar al bosque.
¡Por fin!
Tanta responsabilidad, ¡Tanto Viktor, aquí y allá! Que necesita prometida, que necesita cortarse su cabello, que debe de tomar responsabilidad ¡Basta ya!
Solo quería recorrer de vez de cuanto el bosque, tal vez hasta subirse a un árbol y comer una manzana. No era que odiara ser un príncipe y tener personas que incluso le cepillaran los dientes, pero de vez en cuento requería un respiro, ¡Tenia 18 años! Y toda una nación estaba a sus pies, era un adolescente y nadie llamaba su atención.
Nunca logro su sueño de ser un caballero o por lo menos poder servir debes de ser él que daba órdenes.
No lo odiaba, pero solo quería un respiro.
-¿No crees que es hermoso? – Un suave sss, se oyó encima del árbol que daba manzanos rojos y el sol reflejado a su piel morena fue suficiente para que se notara que tenía el reptil encamarado en su cuerpo y que además, su lengua viperina le estaba susurrando cosas en el oído.
-¿Sabes qué? Eres asqueroso- Eros miro a ágape con una sonrisa en los labios que se le antojaba divertida, nunca se cansaría del genio de este ser extraño.
Ágape, pff, patrañas, si este disque Dios lo único que hacía era comer aunque no lo necesitara y burlarse como todo un malcriado de aquellos que amaban incondicionalmente a sus seres queridos.
No quería admitirlo, pero si no fuera por su fuerte atracción por lo hombres y por el hecho de que varias personas le oraban por él que su amor fuera verdadero, en un acto que se reflejaba más por el frenesí y la pasión que por el amor, el sería un buen ejemplo de ágape.
Con su cabello pelinegro, sus ojos marrones, su piel suave, su cuerpo moldeado como aquel que despide una hambrienta sed de ser probado; era la envidia de tantas diosas, pero que más daba, el solo tenía ojos para un miserable humano que ni siquiera iba a su santuario a orar.
-Si claro, como si tú no estuvieras que babeas por eso herrero ¿Cómo era que se llamaba? Am… Otaki..No…¡Otabek! ¡Ese es el nombre del humano que espías! – Se sintió triunfante al ver su rostro, su cabello dorado cayendo en picada en su frente y sus fuertes ojos verdes que parecían gemas, los cuales cualquiera quisiera deleitarse viéndolos.
-Maldito… ¡Deja de..- Y por tal razón tenía Envidia, envidia que le recorría el pecho y atravesaba su estómago hasta volverlo un nudo, un infierno que ardía. Era hermoso, Ágape era hermoso, era una belleza utópica con sus cabellos de oro y sus gemas verdes.
Aunque...
¡Él era Eros! Un Dios del amor sexual que era un afrodisíaco para todos tus secretos y encantos, él no era menos porque un humano no lo quería, él tenía una fuerza que no se comparaba con ningún Dios, él podía tener su amor.
Amor
Cansado, se dio cuenta que interrumpió a Ágape cuando se recostó en su hombro, tenía la serpiente recorriendo sus muslos y enredándose en su cuello, tenía los ojos brillando en un desesperado sentimiento de amor, amor que dolía.
Ágape le miro y suavizo la mirada hasta poder cambiar a su expresión aburrida de siempre, miro al humano que se hacía llamar Viktor y mascullo una maldición.
¿Quién se creía ese idiota para hacer sufrir a su amigo?
Eros debería de estar pavoneándose en su trono mientras que mira su reflejo, debería de estar alardeando de lo hermoso que es, ser un narcisista que no se detiene en mirarse en las aguas cristalinas y peinar sus hebras.
Ser aquella persona que lo importaba nada que no fuera él
-Eres un idiota- Y mientras que suspiraba y desplegaba sus alas hasta poder cubrir su miseria, Ágape tomo saliva y miro más allá del palacio.
El príncipe pronto se enamorara.
Tomo camino por una calle transita por vendedores y cubrió sus cabellos plateados con un capucha negra que era parte de una capa que estaba utilizando. Habia salido del bosque después de sentir varias miradas inquietantes en su espalda y ahora estaba solo curioseando su pueblo, tocando collares extravagantes que colgaban de algún puesto o acariciando anillos que parecían mágicos y que juraban que lo eran.
Las personas no sospechan nada, no obstante no podía ver a nadie a los ojos directamente, el azul cielo que tenia como ojos lo delataba, estaba seguro que era él único que tenia mirada color azul y pestañas blancas luminosas.
No quería volver.
Se detuvo a observar alrededor intrigado, estaba en medio de la plaza principal, la verdad era que su secretismo estaba levantando sospechas, tal vez hasta un ligero miedo. Claro que para disimular, opto por entrar a una tienda de bisutería y actuar sobre que veía el precio de un collar.
-¿Le gusta? – Asintió sin tomarle importancia a la tersa voz que le hablaba, una voz suave que le ponía los pelos de punta. –Desearía usted llevar-Oh –El príncipe saco unas monedas de oro de su bolsillo y se los tendió a la muchacha.
-Me lo llevo – Dijo con apuro y casi por inercia. Dio medio vuelta, pero algo en su cabeza le pico demasiada curiosidad y miro, lo primero que contemplo fue una mata de cabellos rojizos y después unos perfectos ojos azules bañados con una respingada nariz morena y unos labios rosados y carnosos que sin igual a duda le sonrieron en una amable sonrisa mostrando una hilera de dientes blancos.
Perfecto.
Miro la tierra hasta fundir sus ojos con ella, y movió sus labios en un suave suspiro que lo declaro derrotado, al mismo tiempo movía sus piernas en su posición boca abajo y desde las puerta del olimpo, Eros cerro sus ojos.
Recordó las palabras de su amigo Ágape y se desinflo como un globo, desanimado, enojado, exhausto, triste.
Sentía ira, dolor, frustración, vergüenza.
Enfurruñando miro hacia sus espaldas y entre la gran infinidad de vacío que había, Eros se levantó de su cómoda nube y se escabullo hasta su guarida.
Oro, bordados de oro, diamante, Colgaban de un hilo, se movían. Constelaciones grabadas en la pared, La osa mayor por allá, Orión saludando con su brillante escudo. Cortinas con planetas y un trono bañado en Almohadas, un arpa, un arco y flecha, varios espejos, brocados de seda con un retrato suyo, un arcón viejo repleto de joyas.
Pero lo que mas apreciaba, su hermosa cascada.
Eros se deslizo hasta la cascada y asomo su cabeza, abajo se bañaban los jóvenes muchachitos que en su templo iban y venían trayéndole una ofrenda, una petición de amor eterno. Que querían que aquel hombre les amara, que mágicamente él hiciera que captaran sus ojos en ellos.
A duras penas algunos creían en que podía hacerlo, sin embargo y a pesar de que no quisiera admitirlo, Eros podía obligar a cualquiera que se enamorara de ti, la pasión que desbordaba su ser conseguía magia, conseguía que el corazón de otra persona te perteneciera.
No era un muchacho rubio hijo de venus y no tenía los ojos vendados. Era un joven que cuando se le antojaba cumplía los deseos de los mortales, era un joven con alas blancas y que poseía una gran pasión por hombres hermosos. Un dios narcisista que se miraba en lo cristalino de su cascada y decía lo hermoso que era. Se alababa a sí mismo, se amaba a sí mismo.
Pero ahora
¿Qué quedaba?
-Solo un mediocre joven que no le quita los ojos de encima a un príncipe que ni siquiera tiene buenos gustos– Se contestó él mismo - ¿Qué tiene ella que yo no tenga? – Se preguntó al mirar su reflejo en el agua – Yo soy más lindo, tengo labios rosados, pestañas largas, cabello sedoso, carisma, un cuerpo enmarcado y moldeado por las más hermosas manos…Sin embargo ni siquiera sabe que existo.
Manoteo el agua enojado y se enderezo, hasta poder extender sus hermosas alas de marfil y bajar en picada a la abasta tierra.
Se escabullo como una sombra por los árboles y al encontrar lo que buscaba se tocó el pecho y subió a ese roble de nuevo en donde podía contemplar todo.
….
Contemplar…Como su amado besaba a esa mujer, como el jardín parecía más oscuro de lo era a estas horas de la tarde, como su corazón pesaba como un yunque, el amargo sabor de la verdad le era probada en la punta de la lengua.
Su joven amado, se había enamorado de la chica hermosa y gentil que hacia collares, y ahora le estaba robando un beso, un candente beso, que le rompía el alma, le hacía pedazos.
Lentamente se deslizo por el tronco y cayo.
Cayo pero todavía sentía el paladar salado, tenía el rostro húmedo, lagrimas que recorrían sus mejillas rojas, cual flores silvestres, pero que lentamente se marchitaban.
Y ahí estaba miserable como siempre, con un amor no correspondido.
Eros busco en el cielo y se abrazó a sí mismo en el momento justo cuando el sol bajo y lo cubrió todo.
Las luciérnagas salieron a jugar, la oscuridad empapo el lugar cubriendo a Eros en un manto de amargura que se perdía en un abismal hueco.
Sin embargo… en esos momentos se sintió más ágape que Eros.
Cuando de su cabeza surgió la idea de que era mejor así, Porque su amado nunca había sido así de feliz y ahora que lo veía no se le ocurría que hacer. Ni tampoco sabía cómo actuar
Era ilógico…
Mire la ventana de nuevo y volvió a surgir el mismo escenario, después me escabullí hasta debajo del balcón
He imagine que los brazos que la cubrían a ella y que los besos que impregnaban su rostro eran para mí, Sentí las manos de Viktor secar mis lágrimas y susurrar un encantador
"Cásate conmigo"
Como si de verdad fueran dirigidas hasta mi miserable presencia.
NA: No saben lo feliz que me hacer sufrir a algún personaje y más si se trata de Yuuri, nuestro amado chico indeciso y que necesita amor. pero aspiro que la segunda parte sea lo más…no daré spoilers xD
Quería aclarar que trate de juntar la mitología romana y griega, ya que en la primera Eros se considera cupido y sabiendo eso podemos decir que el al igual que en la mitología Griega estuvo con una tal Psique, diosa, mortal, lo que sea.
La versión que dice que Eros aviva la pasión de hombres entre hombres, fue la que tomo ejemplo en esta parte.
También que Eros estuvo muy indeciso sobre sí mismo, no lo vean como un error de gramática si no como es, en verdad se estaba contradiciendo mucho. Por cierto
¡¿Quedo muy OCC?!
Lo siento así :C Perdonen si fue el caso.
Espero pueda sacar la parte dos pronto y poder entregárselas a tiempo.
Si le gusto, pueden dejar un review, anima un montón.
Gracias por leer.
Gateway To Infinite~