Hola!pues aqui hay una nueva historia de los personajes que adoro!aclaro que los personajes son de la propiedad de J.K Rowlling este es un dramione en proceso jejejeje me ha facinado empezar a escribirlo(ya se que la idea de "Los premios anuales es muuy usada pero a la mayoria les encanta!)

En este ff habra amor, celos, pasion y situaciones de risano todo debe ser tragedia o no?

espero les encante como a mi jijiji

please dejen mucho reviews^^

-._*-Corazon de plata-*_.-

Capitulo 1: Hipnosis

La luna brillaba con una intensidad inusual, haciendo que los pasillos de aquel castillo se iluminaran delicadamente…pronto una figura se vislumbro a lo lejos

Era una chica que paseaba a altas horas de la noche deseando no ser vista por Filtch o el escandaloso Pevees.

-Dios santo! si me llegan a encontrar aquí no se que haría…-susurro Hermione.- Siendo la nueva prefecta de griffindor debería de poner un adecuado ejemplo de responsabilidad…-

Doblo la esquina del pasillo y subió las escaleras de forma sigilosa, llego al fin a su destino. Frente a ella se encontraba la estatua de Boris el Desconcertado se acerco tanto como pudo y susurro la contraseña. La puerta se abrió e hizo un ruido bastante fuerte. Tenía tantas ganas de entrar a ese lugar, la idea corrió a su mente desde que abordaron el expresso.

Flash back

-Aquí! miren, esta vacío-dijo hermione a sus amigos. Pronto Harry, Ginny, Luna, Neville, Ron y ella entraron a aquel compartimiento.

-Y...que se siente ser de los nuevos prefectos de Griffindor?-dijo la menor de los Weasley-Mione no te olvides de tus amigas, Por favor!-ella y Luna hicieron un puchero mientras pestañeaban rápidamente. Todos soltaron grandes carcajadas.

-Claro que no-dijo poniendo los ojos en blanco-no es la gran cosa, solo vamos a mantener el orden de los alumnos, verdad ron?

Este la volteo a ver incrédulo…-Ni lo pienses Hermione, yo aprovechare para hacer las cosas que otros no pueden, además castigare unas cuantas serpientes…Ellos tendrán que respetarme y lo que mas me gustara es tomar relajantes duchas en "el Baño de Prefectos"-dijo esto en un tono altanero.

-Como pude olvidarlo, el baño...-dijo Harry dándose un pequeño golpe en la frente-seria bueno que tu también lo conocieras Herm, es grandioso.

La chica asintió levemente,-No seria tan mala idea-pensó.

Así, entre risitas y bromas, siguieron platicando de sus vacaciones e imitando al fanfarrón de Ronald.

End flash back

Se escurrió por la puerta detrás de la estatua y esta se cerro a sus espaldas, quería , en esta su primera noche como prefecta en Hogwarts tomar un delicioso y relajante baño, para olvidarse del pesado viaje y empezar una gran semana.

Las velas que parecía iluminaban la habitación se encontraban apagadas, aunque la poca luz hacia ver el piso de mármol tan parecido al congelado lago negro en invierno, las paredes blanquecinas apenas reflejaban algunos destellos.A pesar de la penumbra aquel lugar era majestuoso ; las pilas de toallas estaban un poco desacomodadas pero la inmensa tina y los cientos de grifos de diferentes colores que se ubicaban al centro, a orillas de esta la sorprendieron aun mas. El cuadro de la sirena refunfuño cuando se percato de su presencia.

Hermione estaba atónita, ya que era nueva prefecta, sabía de este lugar mas desconocía su interior, solo tenia el vago recuerdo que el ojiverde le conto hacia 2 años, en el que le relataba la noche que entro a ese mismo lugar, como era por dentro, el espectáculo que hubo al llenar la tina…la tina.-Harry tenia razón-dijo para si.

-Rayos!...la tina esta llena! pareciese que este lugar estuviera preparado para que viniera-susurro algo desconcertada.

Ignoro ese detalle y camino hacia la tina a la habitación con mucha cautela. Traía un pantalón holgado a rayas y una blusa marrón de tirantes que hacían resaltar su bronceada piel, así, completamente convencida de que nadie la vio entrar, empezó a desvestirse despojándose de aquellas prendas de forma delicada.

La poca luz resalto su esbelta silueta. Nunca nadie había visto algo tan armonioso, excepto aquellos misteriosos ojos que la observaban de lejos. Hermione jamás se percato de ellos, al ir avanzando a la gran tina de color marfil, los rayos de luna que se colaban por el vitral iluminaron su cuerpo.

Su piel era tersa casi irreal, cual fina tela de terciopelo, unas torneadas y bronceadas piernas largas y bastante llamativas, aquel cabello castaño que se sostenían con un liston haciendo algo parecido a un moño enmarañado tan tiernamente que dabas un toque de inocencia, del cual caían algunos rizos presuntuosamente sobre sus hombros,; un par de senos de perfecto tamaño, una escultura bella. Se noto sorpresa en la mirada del joven ante aquella escena pero pronto ésta se torno maliciosa.

Hermione sintió el calor del agua - Rosas y Jazmín...mis favoritos-suspiro, al fin cerró los ojos y se relajo.

-Vaya, Vaya… dijo una voz ronca, aprovechando que la chica yacía dentro de la tina. Ella quedo atónita ante aquellas palabras, sintió como la calidez de su piel se esfumaba y un frio sepulcral recorría todo su cuerpo, volteo a todas partes buscando a alguien pero no vio nada.

-Qui…quien está allí?- pregunto Hermione, jamás había tenido tanta dificultad de articular una simple frase.

-Nunca pensé que una sangre sucia tuviera tan impresionantes…CUALIDADES- esbozo una sonrisa perversa enfatizando esta última palabra.

-Malfoy!- ella sabía que solo una persona le podía hablar tan despectivamente.-Eres un maldito pervertido!- vocifero la chica, sintió como sus mejillas se encendieron.

-Y tu una mojigata…Cálmate Granger!- dijo irónicamente Draco. Ella trataba de cubrir su cuerpo con las manos, aunque el agua y la gruesa espuma impedían ver más allá de su cuello.

-Te exijo que salgas de aquí…ahora!-chillo Hermione. El chico gozaba hacerla sufrir.

-Tendrías que ser tú la que fuera, ya que yo llegue aquí primero...-dijo el en tono de burla. Poco a poco fue acercándose a ella.

-Ni se te ocurra dar un paso más!-dijo en tono desafiante, la castaña sabia que el chico no tendría piedad de ella, sin embargo por un momento él se quedo inmóvil, inerte, al ver más de cerca esos impresionantes ojos que centellaban fuego, haciendo que su cuerpo se estremeciera tan loca y retorcidamente como nunca pensó.

Repentinamente se levanto y camino a paso más apresurado hasta la causante de todas esas sensaciones. Ella retrocedía al ver cada vez mas cerca a aquel ser.

Por una fracción de segundo pudo divisar la torneada y varonil figura de Malfoy. Su cabello blondo, cual hilos platinados de fina seda, algunos desordenadamente caían sobre su frente, pectorales bien definidos, una espalada ancha y fuerte, un abdomen espectacular (por curiosidad bajo su mirada hasta sus caderas, era en verdad un chico delgado, alto pero imponente)…se sonrojo cuando el chico se dio cuenta que lo veía.

Draco quería hacerla sufrir más, así que siguió hasta quedar a milímetros de su cuerpo. Hermione se quedo paralizada ante la proximidad de su más grande enemigo.

Sus gélidos ojos recorrieron su rostro, su cuello e imaginando su cuerpo por debajo del agua, peligrosamente se acerco a ella. Pronto tenía sus labios casi sobre los de la chica, ella soltó un gemido algo reprimido, la vergüenza fue tan grande que solo se llevo las manos a la cara, podía sentir su aroma, un extasiante olor a sándalo, menta y tabaco.

-Tienes razón-susurro a su oído- mejor me voy, ya que no es nada cómodo estar compartiendo la tina con una sangre sucia…-hizo una pausa, decidido se levanto y tomó su ropa, aquel pijama de seda negro que tanto le gusta, se puso pantalón y salió a paso apresurado dejando a una castaña sola y aturdida por aquella peculiar situación.

-Que se a creído este tipo!...-dijo a si misma, mas no pudo dejar de pensar en el, en su cuerpo, en sus labios y en ese extaciante aroma…-Por Merlín! Hermione no puedes pensar así!Es solo un soberbio y ególatra chico que no merece nada…-trato de convencerse a si misma- además no olvides que Draco Malfoy!

No dudo más y decidió regresar a su habitación, todo aquello la había trastornado. No entendía que era lo que sentía...con la vista clavada al techo pensaba en lo sucedido.-Como puede ser posible esto…tal vez es solo la impresión del momento-.


Jamás pensé que Granger se lo tuviera tan escondidito...cerro lo ojos y recordó la escena en la tina, estando tan cerca de ella pudo percibir un delicado aroma, tan sublime, tan tierno, tan…-En que estas pensando!No seas idiota no olvides que es solo una sangre sucia, una impura, hija de muggles-hizo una cara de asco-sin embargo cambio al instante que trató de recordar su aroma…-fresa…o frambuesa? –se pregunto inconscientemente...-tal vez cereza…no, pienso que podría ser...que diablos hago, debo terminar con esto- mas no pudo dejar de pensar toda la noche en ella…En Hermione Granger.


Sentía todavía la tensión de haber estado a su lado, abrió el armario y tomo un sweater delgado color marfil, se lo puso y decidida se fue a dormir, tratando de no pensar en lo sucedido tampoco entendía lo que sentía, al cerrar los ojos recordó su aroma…menta, un poco de san…por Merlín! olía tan bien...


Eran las 7 y hermione estaba ya en la ducha, escucho a alguien y entonces vio entrar a una larga melena tan roja como la sangre, era Ginny.

-Hola Mione…-dijo esta con tanta apatía y somnolencia- has despertado muy temprano...

La chica asintió con energía y le dedico una tierna e inocente sonrisa. Sabía que este día seria especial el profesor Dumbledore haría un aviso importante, que la incluía.

Bajo corriendo las escaleras de hacia la sala común, allí ya estaban Harry no muy entusiasmado y Ron que se encontraba bastante despeinado, seguida de ella bajo Ginny que al ver a Harry se sonrojó y siguió adelante ignorando su presencia. Al ojiverde no le parecía mucho aquella actitud mas no hubo forma de decirlo ya que era secreto lo que el sentía por ella.

Ya en el gran comedor, Ron devoraba un trozo grande de panqueques, miro a su mejor amiga y dijo:

-Horr...maiohg...nu- tenia la boca atestada de comida, ella lo volteo a ver con una cara de desaprobación y dijo- Ronald Billius Weasley no te enseñaron modales en tu casa?

Este se puso tan rojo que su cara hacia un grandioso juego con su rojizo cabello, lo único que resaltaba de aquel jitomate gigante eran ese par de ojos, como dos brillantes y grandes zafiros.

Termino de pasar el bocado y dijo-Lo siento, solo que hoy quería preguntarte por que estabas tan feliz? al parecer hoy has dormido de maravilla!-ella sonrió levemente ante la broma de su amigo.

No es eso Ron…es que, en verdad hoy es un...-giro la cabeza y de repente se topo con esos ojos, un escalofrió recorrió su espalda hasta llegar a sus dedos, el slytherin la miraba desde lejos. Sus ojos parecían dos grandes témpanos de hielo, un par de cuchillos que se le encajaban en la piel haciéndola estremecerse. Como era posible que causara tanto miedo? desvió la mirada mas pudo sentir como este la observo por un largo rato ella trato de seguir pero la voz del director resonó en el gran comedor.

-Queridos alumnos hoy tengo el honor de darles las mejores noticias, como primera instancia ya que la Profesora Sproutt salió de urgencia por cuestiones personales ha venido alguien a suplirla, resivan por favor a su nueva maestra de Herbología, la srita. Diane Borthoolt…Bienvenida!-dedicó una pequeña y bastante cálida mirada a la nueva profesora por arriba de los anteojos de media luna que se posaban en su nariz y volvió a ver a los alumnos que estaban bastante inquietos ya que al ver a la profesora se pudo notar el cambio de actitud de los chicos, ella era una mujer delgada, figura bien definida, cabello rubio ondulado que sujetaba con una coleta alta y un par de ojos grises, las chicas solo cuchicheaban tratando de encontrar algo mal en ella.

-Veo que este año será bastante interesante-carraspeo- bueno regresando al tema…quisiera recordarles que como cada año escogemos al mejor promedio del curso y lo nombramos premio anual, este año sin duda ha sido histórico para la institución ya que no ha habido uno sino dos modelos ejemplares...antes de decirles quienes son les explicare a todos el desempeño y los privilegios que gozarán con dicha mención.

Primero, tendrán que organizar al comité prefectos para que se asignen los horarios de rondas nocturnas además de que tendrán el beneficio de restar o sumar puntos de las casas a los demás alumnos, claro con una razón bastante convincente, aunque esto durara poco-vio como las caras confusas lo observaban.

Segundo los alumnos serán premiados por su gran esfuerzo y dedicación con un gran viaje, bueno...-sonrió y siguió explicando-será meramente educativo y con fines de aprendizaje.

Y tercero, antes de que se vayan de viaje vivirán en una sola torre, compartirán sus vidas.

Todos se emocionaron cuando el director dijo al fin- Los nombres de los premios anuales de este año son...de Griffindor la señorita Hermione Granger-un gran rugido se escucho en la mesa griffindoriana…-y de la casa de Slytherin el Señor Draco Malfoy, después de que terminen la cena por favor los quiero en mi despacho, ahora queridos alumnos sigan disfrutando del delicioso festín y suerte a todos en sus clases-sonrió a ambas mesas y se dio la vuelta, al igual quela mesa de la otra casa las serpientes esbozaron un gran grito de victoria, todos festejaban excepto los honorables Premios Anuales…

Draco se puso tan pálido que parecía muerto en vida e hizo una cara de asco al chocar con la mirada de la castaña, ella tampoco estaba nada bien…enrojeció tanto que sus orejas parecían arder.

Solo estaban los dos, en aquel comedor lleno de gente solo existían ellos.

-Granger...-dijo entre dientes el slytherin, volteo choco su mirada con esta… apretó tanto los puños que perdieron el poco color que tenían.

-Malfoy…-dijo la chica incrédula-por que el! por qué no otra persona!-trataba de contener las lagrimas –mi vida será un infierno!-rodo una lagrima por su mejilla-…por que MALFOY...