Eh... hola lector, se supone que esta historia solamente seria publicado en Wattpad, pero por petición de una amiga también sera publicada aquí :3, solo denle una oportunidad shii...

Disclaimer: solo decir que los personajes no son míos y esta historia salio por medio de una apuesta :)


¡Qué ironía, después de un adiós no lloramos por los malos recuerdos, sino por los buenos! —

Y henos aquí, parados como dos par de idiotas en lo más alto de la torre de Tokio, tú apuntándome con un arma y yo a solo un paso de caer de la torre. Detrás de ti, a solo unos cuantos metros se encuentra el culpable de nuestro sufrimiento, el demonio que te separo de tus hermanos, tu familia, amigos…. De mí.

-¡Termina de una puta vez, ya, mira que no tenemos toda la noche, o es que acaso o escuchas las sirenas!

Lo miras dudoso como si en el fondo supieras que todo esto está mal, tu mano que sostiene el arma comienza a temblar, puedo ver como unas pequeñas lágrimas comienzan a salir de tus ojos, pero aun así no dejas de apuntarme. -¡¿Qué mierda esperas?!te grito.

Por más que temieses a que me dispararas comencé a acercarme a ti, dando pequeños pasos. Por cada paso que daba tú retrocedías uno; juraría que estabas temblando como la vez que te me declaraste, pero esta vez era diferente, no eran los nervios que te carcomían como aquella vez, era el miedo y la confusión del momento, de no saber quién eras realmente, de que si lo que haces está bien, o está mal, si la figura detrás de ti es quien dice ser, si la figura delante de ti es realmente tu hermano y no un farsante como te hizo creer él.

Logre acercarme lo suficiente como tomar tu rostro y obligándote a mirarme. ¡Ya reacciona de una vez por todas Karamatsu!, no sé qué mierda te dijo el imbécil de Tougo, pero nada es verdad.te grite como si mi vida dependiera de ello, en parte en sí pero eso no es lo importante ahora. todos están preocupados mamá, papá, Choromatsu, Jyushimatsu, Totty e incluso frio de Ichimatsu está preocupado, por favor vuelve con nosotros... vuelve conmigo. —sentencie con lágrimas en los ojos, rogando que algún nombre te fuera familiar, pero solo hiciste una mueca extraña.

SUELTAME!, es mentira, todo lo que dices… todo lo que dices ¡ES UNA PUTA MENTIRA!-, me gritaste una vez librado mis manos de tu rostro, pude ver como una sonrisa se forma en los labios de ese maldito e indicándome con su mirada de que ya había ganado, que Karamatsu le pertenecía, ni nada ni nadie, ni siquiera yo podía hacer algo. -ellos nunca se preocuparon por esta basura, dices que ese tal Ichimatsu está preocupado. ¡¿Por mí?! No me hagas reír, sabes perfectamente que es el más feliz por mi desaparición-.Suspiraste, -Sabes tenía la intención de dejarte con vida, porque dabas pena, pero creo que ya no podrá ser así, aunque me regrese contigo no soy más que escoria, un desperdicio de la sociedad además de un despreciable asesino. decías con una sonrisa que hizo que un escalofrió recorriera mi espalda.

Y sin titubeo alguno disparaste, solo atine a cerrar mis ojos con fuerza una vez escuchado sonido del arma, esperando la bala, la cual nunca llego. Con miedo y lento empecé a abrir los ojos para observar una escena que nunca creí ser testigo, dándome la espalda estabas apuntándome en la dirección del disparo, tu respiración era agitada, parecía que tus ojos se saldrían de tu cara por tan abiertos que los tenías, atine a mirar al frente y observe como el imbécil se arrodillaba sujetándose con ambas manos al abdomen, el cual salía demasiada sangre, m-mal…dito… tr-traidor!-, susurro antes de desplomarse por completo.

-¿Ka-Karamatsu?no sabía si sentir alegría, miedo, confusión, mas no pude seguir pensando cuando sentí unos brazos rodeándome, me quede tan tieso como una estatua, "¡¿Que mierda acaba de pasar?, acaso la persona frente mío no había dicho que me mataría, y ahora me abraza, es que acaso es lunático con doble personalidad!", mas no pude seguir con mi dilema interno ya que pude sentir como mi hombro comenzaba a humedecer, talvez por la lagrimas apena visibles que derramaba. - eh… Karamatsu… que suce…-, trate de hablarte.

- que me hiciste…. Que mierda… ¡FUE LO QUE ME HICISTE!—grito a todo pulmón, extendiendo sus brazos, cada uno sujetando mi hombro - por más ganas tenga de matarte y largarme de esta estúpida cuidad, apareces en mi cabeza… ¿qué eres?, no ¿quién eres?, apareces de la nada, frustrando un robo que nos tome casi un mes planificar, y me dices que soy tu hermano y agregando además de que somos amantes… ¿acaso sabes lo que estás diciendo, nada tiene sentido?...¡NADA!—

- ¡¿cómo que nada tiene sentido, es que acaso no me ves!?… SOMOS IGUALES!... y si somos hermanos porque somos sextillizos, nacidos de la misma madre, pero a pesar de eso… a pesar de que lo que estábamos haciendo… está mal, no nos importó, s-si… si esta… si estábamos j-juntos, nada nos importaba…-, dije casi en un susurro, dolía, dolía demasiado el que no recordara las promesas que nos hicimos, los abrazos, los besos que intercambiamos cuando estábamos solos en casa, la vez que nos entregamos mutuamente demostrándonos todo el amor que sentíamos el uno por el otro.

Cuando levante la vista pude observar cómo me mirabas con cara de WTF, ya no importaba, nada me importaba ya, solo quería irme de ese lugar, dolía ver que el Karamatsu del cual me enamore ya no estaba, pero… quizás lo que más me dolía era que a pesar de recordará a cada uno de los miembro de la familia, yo era un completo desconocido para el… por alguna razón yo era al único que no recordaba y eso era lo que más me dolía.

Me di la vuelta para largarme del lugar, si quería marcharse bien, si quería matarme bien también, ya nada me importaba solo quería irme del lugar; mas no pude cuando sentí que jalaban de mi brazo para darme vuelta haciéndome perder el equilibrio y estampándome en el frio suelo , haciendo salir un leve gemido de dolor. - ¡pero que mier…! – mas no pude reclamar cuando sentí algo apoderarse de mi boca. Pude sentir como su lengua comenzaba abrirse paso, más en vez de apartarlo solo trate de intensificar el contacto rodeando su cuello por mis brazos… por dios dirán "que fácil, que puta". Pero ya llevaba casi seis meses que no sentía su calor, su olor, su cuerpo, la sensación de sentirme protegido por sus brazos, si en dos días se cumplirían seis meses desde la supuesta muerte de Karamatsu, mas no pude seguir de nuevo con mis dudas ya que mis pulmones exigían aire, así que golpeando un poco su espalda se separó de mí, juntándonos solo un hilito de saliva, mi cara estaba roja, creo que como un tomate y el solo me dedicaba una mirada seria. ¿Por qué lo hiciste… acaso no dijiste que esto… no tenía sentido?-, pregunte con la duda en la garganta.

-Mi instinto me dice que debo confiar en ti, nunca me he equivocado y espero que esta no sea la primera… además verte triste a punto de romper en llanto, no sé, se me hizo tan adorable que quise comerte jajajaja -, diciéndolo como si fuera lo más normal del mundo.

Estaba a punto de reclamarle cuando siento que soy empujado a un lado además de un disparo, solo logro observar como Tougo se encuentra de pie, casi tambaleante, apuntando donde nos encontrábamos. Giro mi cabeza para ver a Karamatsu, el cual se encontraba tirado en el suelo… "levántate…. Que haces tirado ahí…. Vamos no juegues conmigo….levantate….por favor", - ¡POR LA PUTA MIERDA KARAMATSU LEVANTATE, MIRA QUE NO ES GRACIOSO! -, dije ahogando mis lágrimas…. No quiero…. No quiero perderte de nuevo, no ahora, no que por fin te pude encontrarte, no ahora que comenzabas aceptarme de nuevo. Mas solo pude moverme a su lado y estrecharlo entre mis brazos susurrando que no me dejara de nuevo. Sin saber que el maldito se acercaba a paso lento para dar el golpe final, - ¡HASTA AQUÍ LLEGAS KUSOMATSU!-

-Neh!... Karamatsu dime… ¿acaso crees en la segunda oportunidad?-.


N/A: de antemano pido disculpas por la redacción y ortografía... acepto tomatazos xD