¡Kagome resiste ¡

"Kagome es víctima de una terrible enfermedad, pero no quiere preocupar a sus amigos, por lo que no dice nada al respecto. Continuando con la lucha contra naraku. Pero pese a sus esfuerzos inuyasha se empieza a dar cuenta que algo va mal, ¿lograra salvar a la persona que ama?"

Le dedico este fic especialmente a peachilein, quien ha sido una inspiración para mí.

Capitulo 1 -síntomas-

Era una tarde fría en el sengoku, se acercaba cada vez más el invierno y con ello las tormentas de nieve. Los aldeanos corrían para refugiarse en sus hogares, y no muy lejos de allí, en la cabaña de la anciana kaede, nuestro hanyo favorito estaba alrededor de la fogata con su ahora familia.

Kaede estaba cocinando un estofado, Kagome y Shippou estaban temblando de frio acurrucados tratando de entrar en calor, Inuyasha estaba recargado a la pared con su típica pose, Sango entraba a la cabaña, cuando Miroku- que hasta ahora estaba entrando detrás de Sango- toco los "encantos "de la misma provocando que recibiera un gran golpe de la exterminadora, y que una gota al estilo anime resbalara por las cabezas de los allí presentes.

—¡Hasta cuando aprenderá, monje libidinoso¡-Grito Sango con furia.

— Pero mi Sanguito... — trato de defenderse el monje, que ahora tenía un reluciente chichón en su cabeza.

—¡pero nada¡ — Gruño la exterminadora con una venita saliendo de su cabeza —.¡siempre es lo mismo con usted¡

El monje trato de poner su expresión más inocente y explico— Pero mi querida Sanguito, es culpa de esta mano maldita que…— pero fue interrumpida por una Sango que echaba fuego por los ojos.

— ¡cual mano maldita, aquí lo único maldito es usted¡ — Exploto Sango

— Lo sé Sango— dijo con una expresión seria. Suspiro—. Sabes eres una persona muy especial para mí por eso te pido una disculpa, — le tomo las manos—¿crees que me podrías perdonar? — Pregunto con una cara tan seria que más de alguno se asusto, y es que ver eso en una persona como Miroku… hasta el mismo diablo se abría asustado.

Sango, que ahora estaba más roja que un tomate, solo atino a decir un torpe — Está bien, lo perdono— para sonreírle sonrojada, ese era el cuadro que siempre soñó, claro que hubiera seguido soñando de no ser porque una mano ,toco – nuevamente- sus "encantos", haciendo que más de la mitad de los presentes tuviera una caída al estilo anime, y que Miroku fuera recibido por la furia de Sango, quien después de gritar — "estúpido monje pervertido" — Había golpeado al monje hasta el cansancio, haciendo que ahora- teniendo al menos 10 chichones encima- estuviera tirado gimiendo de dolor.

Sango se sentó en su lugar echa una furia, y se hiso un silencio sepulcral, pero afortunadamente fue interrumpido por el aviso de que la cena estaba servida. Todos se sentaron y comieron animadamente en un cómodo silencio, que fue interrumpido solo por estornudos de Kagome, que en ratos parecían ir mas fuerte haciendo que más de alguno volteara a verla con preocupación. Y es que la joven sacerdotisa no tenía muy buen aspecto.

— Kagome, ¿te encuentras bien?- pregunto luego de otro estornudo Shippou-no te vez muy bien que digamos…— todos volvieron a verla con preocupación.

— No te preocupes Shippou—Respondió con ternura- Solo es un pequeño resfriado, ya se me pasara.

—¿Segura? — pregunto Inuyasha. La verdad no se veía muy bien…

— Sip— Respondió con una sonrisa, tranquilizando un poco a los presentes. Así paso la cena, todos se preparaban para dormir cuando una toz muy fuerte sonó, siguiéndole algunos estornudos.

—¿De verdad te sientes bien Kagome-chan? — Pregunto Sango, y es que de verdad no se veía bien, estaba pálida y parecía sonrojada, seguramente tendría fiebre, además parecía estar temblando…

— s..Si, no te preocupes Sango, tal vez me resfrié p..Por la tormenta— Trato de convencerla, aunque para ser verdad se sentía fatal, estaba casi segura de que en cualquier momento se desmayaría, pero no quería preocupar a nadie, así que con toda su energía camino como si nada hacia su fluton.

— Kagome ¿de verdad estas bien? — pregunto esta vez Miroku.

Kagome no alcanzo a contestar cuando sin poder mas sintió como perdió el equilibrio, alcanzo a oír los gritos de sus amigos; vio el piso y cerró los ojos esperando el golpe que nunca llego, solo atino a sentir como unos fuertes brazos la agarraban protectoramente.

De lo último que fue consciente fue del rostro preocupado de Inuyasha y de los gritos alarmados de sus amigos, después de eso todo se volvió oscuro.

Continuara…

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Hola, bueno aquí les traigo mi primer fic.

Soy muy nueva en esto, así que si tienen algún comentario, o sugerencia no duden en decírmelo -claro con el debido respeto-.

¿Sería mucho pedir un Review?

Espero les haya gustado, ¡besos!

Karen.