Serie de drabbles : IZombie
Tematica: Romance/Tragedia/Leve AU
DeBeers
Si no hubiese sido por el desastroso problema del lago, estaba seguro que pudo haberse disculpado con ella. Si aquello no hubiese sucedido, estaba completamente seguro que no la hubiese rasguñado, ni siquiera tenia en mente el hecho de que aquella pequeña mujer rubia seria su calvario. Porque si. DeBeers se había enamorado. ¿Como mierda debía explicarse el hecho de todo aquello? Estaba jodido hasta donde podia ver. Solto un suspiro en cuanto termino de extraer los organos de aquel hombre frente a el, en aquella mesilla de estudio fria y metalica en el sótano de su actual funeraria.
Por un momento vacilo entre guardar aquel cerebro, o comerlo.
—Ya sera después. — Murmuro en cuanto lo guardo en la hielera.
La perdida de memoria habia sido temporal. Y un alivio para su estado mental, pero ahora que lo recordaba y estando tan cerca de la muerte sin la cura exacta. Su mente, su cuerpo, todo trabajaba a mil para controlar aquellos impulsos agresivos. ¿El romance con Peyton? Oh, que va, era una perfecta distracción hasta que su mente volvia a la chica paliducha que solia joderle la existencia.
Blaine no era un hombre de sentimentalismos, el simplemente queria y tomaba. pero no ella, no podia con Liv.
Y ¿Porque carajos no podia simplemente eliminarla? Facil. Sus impulsos humanos permanecian ahi. Vivos y deseando a una mujer que lo detestaba con lo mas puro de su ¿Corazón? En fin. El caso era que se sentia frustrado.
La organización de zombies habia ido a verlo despues de comprar Max Rager. El era punto clave al ser de los primeros zombies, junto a liv. Claro. Y estaba seguro que habian ido a buscarla tambien ¿Estaria ella dispuesta? Seguro que si, si se trataba de salvar al estúpido de su ex-prometido. ¿Cual era su nombre? ¿Menoor? ¿Major? Era alguna clase de nombre estúpido. ¿Quien demonios llama a su hijo como una entonación? Eso era realmente... Bueno. Su nombre quizá tampoco era muy bueno que digamos.
Blaine levanto la cabeza tras estar admirando profundamente el suelo perdido en la belleza de sus pensamientos. Irónicamente hablando, claro. Para prestar atención al sonido del primer piso. Alguien había entrado. Y reconocia perfectamente esas pequeñas pisadas enfundadas en botas militares.
Los nervios le abrumaron. Y ¡Dios! Casi podia sentir que sudaba. Si no fuese porque estaba medio muerto.
Su actitud soberbia y casanova tomo espacio en su cabeza. Puesto que era lo que siempre habia hecho cuando estaba, ya saben. Pasando por cualquier tipo de emocion que no pudiese controlar. Aunque mas bien. Eso era casi siempre. ¿Que esperaban? Habia sido vendedor de drogas. Y las consumía también, por cierto. Demonios, su etapa de rebeldía le habia jodido la cabeza. Todo su cuerpo, su vida, si queremos especificar.
Era un maldito zombie, que contagiaba el virus a través del sexo, rasguños. ¡Mierda!, no podía vivir sin tener aquello en la cabeza.
No era un animal. Si descartamos las muertes de los chicos de la calle,los refugios, el astronauta...
Sacudió su cabeza una vez estando en la primera planta.
Bien, era un jodido animal desquiciado. pero uno muy guapo. Era cociente de ello.
Y otra vez. ¿Porque a Liv Moore no le afectaba?. ¡La unica maldita mujer que le habia atraído de verdad! Y lo odiaba.
Bien Blaine, Muy bien. Eres el puto amo. Se dijo mentalmente.
Liv lo observo tangente desde la entrada de la puerta de la funeraria, con los brazos cruzados y una mueca que rozaba lo sombrio. Su expresión hacia Blaine era igual a la de siempre. Asco, puro y definitivo asco del bueno. Oh Blaine, estas jodido por esta mujer. Se dijo mientras sonreia de aquella manera tan coqueta y caracteristica de siempre. Esa que hacia cuando estaba por soltar un comentario gracioso, o esa misma que usaba para obtener algo de alguna mujer.
— ¿Y bien? ¿Ahora que hice? —
