Los personajes de Saint Seiya no me pertenecen son propiedad de Masami Karumada.
Capítulo 1
Lazos de Sangre
-¿Son ellos Seiya? – preguntó la chica a su hermano.
-Si, ya te lo había dicho Seika.
-¡Es me causa curiosidad!, todos en el colegio están hablando de ellos y además el chico es tan guapo – terminó con un suspiro.
-Vaya si que eres chismosa Seika – se burló el rubio del grupo.
-Hyoga, bien dicen que la información es poder – se defendió la chica.
-¡Pues te lo contaré todo! – se escuchó detrás de ellos una voz femenina, era una linda rubia que apareció de la nada para sorprender al grupo.
-¡Esmeralda! Debería darte vergüenza – censuró Hyoga.
-Hermano, no me molestes, si no quieres escuchar pues tápate los oídos y ya.
-Mira, respétame que soy tu hermano mayor.
-Ustedes, dejen de discutir. Mejor cuéntame todo lo que sabes Esmeralda – interrumpió Seika.
Esmeralda, ignorando por completo a su hermano, se sentó al lado de su amiga y empezó a contarles a los presentes todo lo que sabia de los recién llegados al colegio.
-Pues, ellos son los hermanos Suiyama se mudaron de Yokohama por cuestiones de negocios ya que a su padre se le presentó una gran oferta de trabajo aquí. La chica se llama Shunrei tiene quince años y está en mi salón, parece algo reservada pero hoy hicimos un trabajo en grupo y el profesor me asignó con ella, así que tuvimos oportunidad de hablar; el chico se llama Shiryu tiene dieciocho años y esta en el último grado de preparatoria , según me contó su hermana es un chico muy inteligente. Están viviendo en un barrio muy cerca al nuestro y al parecer son bastante acomodados ¿Si han visto el hermoso Mercedes que conduce el chico?.
-Si la chica es bastante reservada, contigo se le olvidó – dijo bromista Jabu – me interesa lo que me puedas contar de ella – prosiguió ante la mirada de asombro de los presentes.
-¿Y eso? ¿A qué viene tanto interés? – preguntó Seika mirándolo de reojo.
-Pues es obvio, la chica está muy linda y me interesa conocerla mejor.
-¡Pues vaya que la tendrás difícil!, su hermano parece bastante sobreprotector con ella – se burló Esmeralda.
-¿Enserio?, pues entonces me ganaré al cuñado primero. Lo invitaré a ser parte del equipo de fútbol y así aprovecharé para ser su amigo.
-Bueno ya esta bien de chismes, mejor dime donde esta tu novio Esmeralda, si no llega pronto tendremos que almorzar sin él.
La chica dio un suspiro – está en la oficina del director.
-¡Otra vez! – exclamaron en coro todos los presentes.
-¿Quién fue su victima hoy? – preguntó divertido Seiya.
-Pues esta vez le tocó a un tal Nachi, un chico de tercer año que estaba molestando a Shun desde hace tiempo. Cuando Ikki se dio cuenta le advirtió que lo dejara en paz, pero este siguió molestando a Shun y hoy fue la gota que colmó la copa así que Ikki le dio una lección. Ustedes saben como es él cuando se trata de su hermanito – concluyó la chica.
-O cuando se trata de ti – agregó Jabu.
Todos rieron ante lo dicho por el castaño, todos conocían muy bien a Ikki y sabían que cuando se trataba de las dos personas a las que amaba era mejor no sacarlo de casillas.
Mientras en otro sitio del colegio
-¿Cómo va tu primer día de clase Shunrei? – interrogó el pelilargo quien se encontraba con su hermana tomando el almuerzo debajo de un gran árbol.
-Pues hasta ahora va muy bien, los chicos de mi salón son muy divertidos. Hoy hicimos un trabajo en grupos y me asignaron a una chica muy amable llamada Esmeralda, charlamos bastante, creo que podemos llegar a ser amigas – dijo la joven pensativa – y, ¿Cómo ha estado tu día?.
-Bastante bien, tuvimos un examen, fue sencillo, aparte uno de los chicos de mi clase se peleó con uno de tercer grado – dijo el pelilargo sin poder disimular una risa en sus labios.
-¿Y eso te parece gracioso?.
-No, bueno si, lo que quiero decir es que ese chico se lo merecía, según tengo entendido es un bravucón que se la pasa intimidando a los chicos mas jóvenes y esta vez se metió con el equivocado, el hermano menor de Ikki.
Shiryu y Shunrei eran los hijos de reconocido abogado Dohko Suiyama, se habían traslado a Tokio debido a que el mejor bufet de abogados del país le había ofrecido un jugoso contrato al padre de ambos. Para el Sr. Suiyama el cambio era algo muy bueno ya que atravesaba una crisis familiar que lo había sumido en la depresión, su esposa lo había abandonado un año atrás, se había ido sin decir nada y sin dejar ningún rastro; esto lógicamente también había afectado a los dos jóvenes Suiyama, así que el cambio resultaría beneficioso para todos. La relación de los hermanos era muy estrecha, siempre estaban juntos, aunque Shiryu era mayor tres años para ella, siempre se mostró muy interesado en los asuntos de su hermana y se mostraba muy sobreprotector, siempre alejando a todos aquellos jóvenes que se quisieran acercar a su pequeña hermana, realmente era celoso y posesivo con ella, cosa que al padre no le parecía malo ya que siempre le decía que una de sus obligaciones principales como hermano mayor era cuidar a Shunrei y no permitir que nadie le hiciera daño alguno. Shunrei por su parte era cariñosa con su hermano, siempre preocupada por todo lo que tenía que ver con él.
Días después
-Chicos, les presento a mi amiga Shunrei – dijo Esmeralda al grupo de jóvenes que estaban reunidos en la cafetería del colegio, los cuales le dieron la bienvenida a la joven – y Shunrei, te presento a mis amigos de los que tanto te he contado.
-Es un placer conocerlos a todos, he escuchado cosas muy buenas de ustedes – saludo Shunrei con algo de timidez.
-Mi amor siéntate a mi lado – le dijo Ikki a su novia.
-Pero Ikki, ahí no hay espacio para que Shunrei se siente junto a mi.
-No te preocupes Esmeralda, siéntate junto a tu novio.
-Mira, aquí hay un lugar para ti – le ofreció Jabu sonriente a la chica de cabellos oscuros.
-Gracias eres muy amable.
-Y cuéntanos Shunrei, ¿Qué tal te ha parecido el colegio? – interrogó Seika cuando la chica se había acomodado.
-Pues es una gran institución y me ha gustado mucho su planta física, me recuerda mucho a mi antigua escuela. El hecho de que podamos hacer la preparatoria aquí mismo me encanta pues puedo estar más cerca de mi hermano.
-Y hablando de tu hermano, ¿Hoy no almorzará contigo? – continúo la castaña, los demás solo la miraron de reojo, era evidente que la chica estaba interesada en el peli negro.
-Bueno, le dije que hoy almorzaría en la cafetería y quedó en venir para encontrarnos aquí – contestó Shunrei mirando a los lados para ver si su hermano se acercaba – y hablando de él, allí viene – dijo la chica con su mirada iluminada.
-Buenas tardes a todos y buen provecho – saludó el joven al llegar a la mesa donde estaba su hermana.
Todos los presentes saludaron al joven, quién les agradeció su cortesía con una sonrisa.
-Shiryu, pensé que estabas adelantando el trabajo de mañana – dijo Ikki levantándose para presentar a su compañero – muchachos él es Shiryu Suiyama. Shiryu, ellos son … - y señalando a cada uno de los presentes empezó a presentarlos – el castaño despeinado es Seiya, la chica junto a él es su hermana Seika – la mencionada le sonrió coqueta – él es mi hermano Shun , el rubio es Hyoga el hermano de mi novia Esmeralda a quien ya conoces y finalmente el chico sentado junto a tu hermana es Jabu – Shiryu se fijó que este último no paraba de mirar a su hermana.
-Es un placer conocerlos a todos.
Desde ese día en adelante la pareja de hermanos empezó a forjar una amistad con los jóvenes que conocieron, eran frecuentes sus encuentros en la cafetería del colegio e incluso hacían planes para salir a los centros comerciales los fines de semana.
Tres meses mas tarde
Shunrei caminaba apresurada hacía el parqueadero del colegio – seguramente Shiryu lleva rato esperándome – pensó la chica, sabía que a su hermano no le gustaba que lo hicieran esperar y que era muy probable que estuviese enojado, así que aceleró el paso para llegar lo más pronto posible. Pero la escena que alcanzó a ver a lo lejos cuando se acercó al parqueadero la dejó helada, su hermano se encontraba acompañado por Seika quien estaba enganchada a su cuello mientras se besaban, no entendía por qué pero al ver la escena sintió que su corazón se oprimía, un nudo en la garganta se formó y sus ojos se empañaron. La pareja, que no se había dado cuenta de su presencia, continuó con su largo beso, cuando se hubieron separado Seika rozó con su mano derecha el rostro del joven quien la regaló una sonrisa. Minutos después Shunrei se acercó fingiendo que no había visto nada.
-Al fin llegas Shunrei – dijo Shiryu al ver que su hermana se acercaba, la chica solo se limitó a saludarlos – hoy llevaré a Seika a su casa, espero que no te moleste.
-Claro que no, como crees.
Los tres subieron al auto, esta vez Shiryu llevó a Seika en la parte de adelante. Shunrei permaneció en silencio durante el trayecto, solo se limitaba a mirar por la ventana tratando de ocultar su tristeza, sin embargo el silencio pronto fue roto por Seika..
-¿No le dirás nada a tu hermana? – preguntó sonriente – bueno entonces le diré yo…. Shunrei, ¡tu hermano y yo somos novios! ¿No es genial? Ahora somos cuñadas.
Aquella confirmación fue como una daga que se incrustó en el pecho de Shunrei, quien sin embargo trató de sonreír – me alegra por ustedes, hacen bonita pareja – logró decir después de unos segundos, Shiryu la miró por el retrovisor y pudo notar que su hermana no estaba del todo feliz con la noticia, pero decidió que hablaría con ella cuando llegaran a casa.
Unos minutos después de dejar a Seika en su casa los hermanos Suiyama ya estaban en la sala de su casa ambos en completo mutismo - que te sucede Shunrei, ¿acaso no te parece lo de Seika? – dijo él, rompiendo el incomodo silencio.
-No es eso, estoy feliz por ustedes. Lo que sucede es que hoy no me he sentido muy bien – mintió la chica.
-¡¿Por qué no me habías dicho?! – se acerco preocupado a ella - ¿Qué sientes?, ¿Te duele algo, tienes fiebre? – dijo posando su mano derecha en la frente de la chica – te llevo ahora mismo al doctor.
-No, no te preocupes solo necesito descansar – dijo alejándose un poco – me daré un baño y me acostaré a dormir, con eso se me pasará.
-¿Estas segura? – preguntó acortando la distancia nuevamente mientras cariñosamente la tomaba por los hombros – sabes que me preocupo mucho por ti, no quiero que te suceda nada malo – agregó para luego inclinarse hacia ella y darle un beso en la frente.
-Puedes estar tranquilo – dijo ella mientras se alejaba hacia las escaleras para subir a su habitación.
Al llegar a su habitación la chica cerró la puerta tras de si y entonces dejó salir toda esa tristeza que la embargaba, se acostó boca abajo en su cama y sintió como las lágrimas empezaron a empapar su rostro y su almohada. No lo entendía, no se explicaba por que se sentía de esa manera, sabía que Seika era una buena chica y que no haría sufrir a su hermano, pero esa no era la razón de su tristeza, ella sentía que había perdido a Shiryu, estaba confundida, desde hacía mucho tiempo estaba confundida respecto a lo que sentía por él, por muchos años se reprochó este hecho, pero ahora que Shiryu empezaba a cortejar a otra chica lo había confirmado en su corazón, se sentía como un monstro ¿Cómo podía verlo con otros ojos?, ¿Cómo sentir por él lo que estaba sintiendo?, ¿Cómo podía amarlo con el corazón de una mujer y no como una hermana? No tenía la menor duda, estaba enamorada de su Shiryu , eso era seguro, pero también estaba segura de que este sentimiento profano debía ser ocultado por siempre.
Los días transcurrieron con aparente normalidad, las visitas de Seika a la casa Suiyama se hicieron frecuentes así como las salidas de la joven pareja a cine o a pasear por el centro de la cuidad. Shiryu se mostraba como un joven muy respetuoso para con su novia, nunca intentaba sobrepasarse en sus muestras de cariño para con ella.
-Vaya Seika, tu si que logras lo que te propones eh – dijo la chica de cabellos violeta.
-¿A que te refieres Saori?
-Pues que lograste ser la novia del chico nuevo, vaya que es un logro ya que tenía a varias chicas tras él.
-Pues Shiryu me gusta mucho y me siento muy contenta de ser su novia, pero, sabes, a veces su comportamiento me desconcierta un poco.
-¿Y eso?, ¿ha pasado algo raro?.
-Pues, veras Saori, es precisamente el hecho de que no haya pasado nada lo que me desconcierta. Ya llevamos cuatro meses saliendo, él es muy atento y amable conmigo, pero me gustaría que fuese más abierto y expresivo, tu entiendes a que me refiero – dijo algo ruborizada.
-¿Te refieres a que …?
-Bueno no digo que a estas alturas él y yo ya debíamos haber estado juntos. Pero es que él es tan parco a la hora de expresarme su amor que a veces siento que yo no le gusto, es como si me viera solo como una amiga – agregó la castaña algo triste.
-Sabes Seika, quizá él es un chico conservador y no desea ir mas allá contigo por que no te ve como una simple conquista, a lo mejor contigo tiene intensiones serias y por ello no quiere apresurar las cosas – dijo la chica para tranquilizar a su amiga.
-Tal vez tienes razón Saori, ojalá sea eso por que yo siento que cada día lo quiero más.
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-Bueno muchachos es un hecho, el fin de semana mis padres no estarán en casa, así que….. ¡El sábado hay fiesta! Y todos están invitados, de hecho medio colegio esta invitado – les decía Jabu a su grupo de amigos.
-¿Estas seguro que tus padres te lo van a permitir? Es que es mucha gente – le pregunto Seika.
-Bueno la verdad tampoco es medio colegio, son apenas unas cincuenta personas y mis padres me dijeron que si podía, pero que tendríamos que tener la supervisión de mi tío el gruñón.
-¡¿Tu tío Tatsumi?! – exclamó Seiya.
-Sip, pero hay una buena noticia para ti, llevará a Saori – dijo moviendo las cejas Jabu.
-Vaya eso si que lo compensa – dijo feliz el castaño.
-Y tu Shunrei, ¿Vas a asistir? – preguntó Jabu en un tono de voz que molestó a Shiryu.
-Pues si Shiryu asiste, yo creo que mi padre no tendrá inconveniente en que yo vaya.
-¡Que bien!, eres quien más me interesa que vaya – soltó sin más haciendo que la chica se ruborizara ya que las miradas de los presentes se concentraron en ella.
Shiryu sentía que hervía de la ira por lo que estaba sucediendo, era evidente que su hermana estaba incomoda con la situación y a él no le gustaba para nada que Jabu intentara acercarse a Shunrei, la manera como ese chico la miraba no le daba nada de confianza ya había escuchado hablar bastante de ese chico, tenía la fama de que le gustaba conquistar a las jovencitas solo con el fin de llevarse las a la cama y él por ningún motivo permitiría que su hermana fuera una más de la colección de ese tipo, la alejaría lo más que pudiera de él.
-Shunrei ya es hora de que entres a clase – dijo Shiryu levantándose de su lugar – vamos te acompaño a tu salón – completo extendiéndole su mano a lo que ella se levantó de inmediato y salió con él de la cafetería.
-Jajajaja! Jabu veo que no la tendrás fácil con Shunrei – se burló Ikki – a leguas se nota que no le caes nada bien a Shiryu – dijo saliendo con su novia del lugar.
-Yo te advertí – se burló esmeralda saliendo de la mano de ikki.
Hyoga y Seiya también abandonaron la cafetería riéndose de la situación del castaño.
-Eso búrlensele, ya dicen que el que ríe de último, ríe mejor – le gritó enojado Jabu mientras se levantaba para irse a su salón.
-¡Espera Jabu! – le llamó Seika a lo que el chico se giró hacia ella – es que quiero pedirte un favor, para el día de la fiesta.
Mientras tanto en las afueras de la cafetería – ¿Estas enojado conmigo Shiryu? – inquirió preocupada Shunrei.
-Claro que no, ¿Por qué habría de estarlo?.
-Es que…
Shunrei no pudo terminar pues fue interrumpida por su hermano – dime Shunrei, si a ti te gustara algún chico, ¿Me lo contarías?.
La pregunta la sorprendió por completo - ¿Por qué me preguntas eso? – contestó algo ruborizada, temía que su hermano se hubiera dado cuenta de lo que sentía por él.
-Es que quiero que sepas que puedes hablarme con toda confianza, yo te quiero mucho y sabes que me preocupo por ti, no quiero que nadie te lastime.
-Lo dices por Jabu ¿Verdad?.
Shiryu detuvo su marcha – lo digo por él y por cualquier otro que intente lastimarte. Si alguien te molesta solo dímelo.
Ella le sonrió – no te preocupes, créeme que lo haré.
Él le devolvió la sonrisa y se inclinó hacia ella para darle un beso en la frente.
La noche del sábado
Los hermanos Suiyama llegaron alrededor de las ocho a la casa de Jabu, el lugar estaba casi lleno de jóvenes quienes bailaban animados en la improvisada pista de baile instalada en el jardín trasero del lugar. Al verlos llegar Jabu los recibió amablemente, en especial a Shunrei, mientras que los demás amigos del grupo se acercaban a saludar, Seika de inmediato tomó a Shiryu de la mano y lo condujo a la pista de baile.
-Me encanta esa canción, Shiryu – dijo mientras apoyaba su rostro en él pecho de este.
-Es muy bonita – musitó pensativo el chico. Sin embargo su mirada se dirigió de inmediato a su hermana quien era conducida a la pista por Jabu.
-Hacen bonita pareja ¿No te parece? – dijo Seika al notar que su novio miraba a su hermana y compañía.
-No lo sé Seika, no me gusta la manera en que él la observa.
-Deja de ser tan sobreprotector con ella – dijo sonriente abrazándose del cuello del novio.
-No es eso, es que no quiero que le hagan ningún daño, mi hermana es una niña pura e inocente y ese Jabu, con tan solo ver la forma en que la mira deduzco que no debe tener intenciones inocentes con ella.
-O, tal vez, Jabu no es un chico lento – agregó Seika con un guiño.
-¿A que te refieres?
-Ya lo sabrás – dijo la chica con mirada traviesa mientras lo tomaba de una mano y empezaba a conducirlo a adentro a la casa.
-Vaya que Seika si que quiere aprovechar la noche – dijo Jabu a Shunrei mientras seguían bailando.
-¿Por qué lo dices? – preguntó confundida.
-Pues mira se dirige con tu hermano a adentro de la casa – dijo señalando a la pareja.
Shunrei dirigió su vista hacia donde señalaba Jabu – no entiendo lo que quieres decir.
-Pues verás, Seika me pidió el favor de que le prestara mi cuarto esta noche y no creo que sea precisamente para irse a dormir, tu entiendes – dijo con un guiño.
Próximo Capítulo….
-¿Qué paso Jabu, qué le hiciste? – pregunto furioso mientras rápidamente levantaba en sus brazos a Shunrei, quien permanecía inconsciente.
Al entrar en la habitación donde estaba Shunrei, Shiryu se acercó a la cama donde estaba recostada la chica – No me vuelvas a preocupar así, pensé lo peor – dijo mientras con ternura tomaba el rostro de ella entre sus manos y la miraba a los ojos.
Cerrando con tristeza sus ojos dejó que sus lagrimas fluyeran por sus mejillas, en esto acarició el rostro de su hermana y no pudo contenerse, inclinó su rostro hacia ella y delicadamente posó sus labios en los suyos dándole un tierno y efímero beso
Espero que les halla gustado y pues recuerden que sus comentarios me hacen feliz ;)