Buenas, primero de todo presentarnos. Somos Earen Y Niebla. Ambas hemos publicado ya algunos trabajos (Earen (bajo el nombre de Arys): Dónde está mi gomina, Yo amo a Harry Potter, El rincón de Umbirdge, entre otros. Niebla: Compromiso inesperado (prometo seguirlo en breve) y otros que no he publicado en esta página.)
Este fic es una versión de lo que les ocurre a ''los malos'' durante el primer libro de Harry Potter, con algunos ligeros cambios en la historia. Esperamos que les guste y que nos dejen su opinión.
Aviso: Todos los personajes (A excepción de Earen, Niebla, Nami y alguno que otro nombre suelto) son propiedad de J.K.rowling.
Los diálogos en cursiva son en francés ¿¿OK??
Otro punto de vista
Libro 1
Capitulo 1
El comienzo
Era una noche lluviosa a finales de agosto. En un pequeño pueblo al norte de Francia reinaba la calma absoluta. La mayoría de vecinos estaba ya en la cama, recuperando fuerzas para afrontar el siguiente día.
De la nada, aparecieron unas quince figuras con capa, que se agruparon frente una de las casas. En el interior se oía ruido. Era evidente que aún estaban despiertos. Las figuras atravesaron el jardín. Una fuerza extraña abrió la puerta. Decidieron entrar, pero mientras se dirigían al salón un hombre les cortó el paso.
-Ríndete Black. No podréis escapar.- dijo una de las figuras.
-Nunca-respondió el hombre. Lucharemos hasta el final.
Un conjunto de luces llenaron el recibidor. Una mujer se unió a la lucha.
Después de media hora tres cuerpos yacían inmóviles en el suelo. Una de las figuras y los dos ocupantes de la casa.
-Maldición, seguro que podían darnos información
-Tranquilízate Vincent... Ya no podemos hacer nada. Habría que buscar a las chicas.
Buscaron durante hora y media hasta encontrar una trampilla de acceso a un viejo túnel. Cinco de ellos siguieron en el túnel, mientras el resto se ocupaba de los cuerpos inertes.
Earen estaba asustada. No entendía porque a pocos días de volver al colegio y en plena noche sus padres la habían obligado a coger a su hermana y recorrer el viejo túnel que partía de debajo de su casa. Cuando llegó al final del túnel se encontraba en mitad del bosque. Lo recorrió durante un tiempo hasta encontrar una pequeña cueva. Se acurrucó en ella abrazando a su hermana y se durmió.
Las voces la despertaron. Abrió los ojos, pero una intensa luz la obligó a cerrarlos de nuevo. La obligaron a levantarse y a salir del refugio. Entonces pudo volver a abrir los ojos. Aún estaba oscuro y aunque no llovía se notaba el frescor de la humedad.
-Eres Earen Black?- Un hombre alto y con capa la apuntaba con una varita que emitía luz.
-Si.
Estaba confusa. Abrazó más fuerte a su hermana, que dormía ajena a lo que ocurría. El mismo hombre volvió a hablar.
-Tendrás que venir con nosotros al Ministerio. Peyrille coge a la pequeña.
-No.-Eren dio un paso atrás negándose a soltar a su hermana.
-Está bien, puedes llevarla tú. Vamos.
Empezaba a amanecer cuando en la sala del ministerio se había tomado una decisión.
-Bueno Earen, como te niegas a separarte de tu hermana, no podrás seguir estudiando en Beauxbatons. Iréis a un orfanato mágico y allí seguirás con tus lecciones.
-¿Y nuestros padres?
-Me temo que no les volveréis a ver. Se opusieron al Ministerio. Puedes dar gracias de que piensen que una chica de catorce años no es un peligro.
BRRRUUUUMM
Un trueno despertó a Earen. Estaba en un compartimiento del tren. Miró el reloj. Debía estar a punto de llegar, en menos de una hora partiría el Expreso de Hogwarts y tenían que cogerlo para llegar al castillo. La chica que tenia enfrente bajó el libro que estaba leyendo y al miró.
-No entiendo porque no podíamos quedarnos en Francia...
-Lo sabes bien. Además de que te llegara la carta a mi me ofrecieron un puesto de profesora. Y... en Francia empezábamos a levantar sospechas.
-Como sea...
-Escucha, -dijo Earen armándose de paciencia- se que prefieres Francia mil veces antes que Londres, yo también, pero no tenemos más remedio que aguantarnos y aceptar esto, como mínimo de momento.
-Es que aquí todo es tan diferente …
-Ya verás como te acostumbras.
Hasta aquí el primer capitulo.
¡Dejen reviwers please!
