Autor comment: Holas. Esta historia comienza con el final final del anime.

Este fanfic está repleto de drama, acción, porno, Gary stues que se vuelven locos, cyniclones pervertidos, gatitos muertos (ok eso último no xD) etc etc etc… si pueden dejar un comentario de si les gustó o no será bienvenido (además que desearía saber si alguien leyó esto, aunque principalmente lo escribí para mí, como fan de esta pareja ^^). Carpe diem.

Capítulo editado: 29/6/2011

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Capítulo I: Una Despedida Imposible y El Tesoro de Taruto.

Se olvidaría de ella en algún momento. Pues nunca estuvieron destinados el uno al otro. Esto fue lo que el joven cyniclon pensó mientras esbozaba una sonrisa. Falsa. Mientras observaba con estupor como el planeta azul donde ella vivía empequeñecía en el espacio hasta desaparecer. Sus ojos, brillantes y dorados, ahora estaban apagados e inexpresivos.

Él se veía vacío… Aún así, una pequeña sonrisa se dibujaba en la comisura de sus labios, ella era feliz... y para él eso era suficiente.

Pai y Taruto permanecieron en silencio, ante la negativa de Kisshu por regresar en el futuro cercano, no había palabras qué agregar. Así que el primero sólo se dedicó a resolver el teclado de la nave y coordinar la dirección de regreso a su planeta, su nuevo planeta, el cuál sería salvado ahora que poseían la esfera azul con Mew Aqua.

-"Bien, todo ha salido mejor de lo que esperábamos ¿Cierto? ¡No tuvimos que destruir a nadie!"- chistó el pequeño Taruto sonriendo, intentando alegrar el ambiente.
Pai asintió con la mirada fija en la formación de estrellas que estaba delante de ellos -"Sí. Supongo que no podría haber salido mejor"- miró de costado a Kisshu, demasiado callado para ser el mismo Kish que conocía.
-"Volveremos pronto de visitas, si esto funciona… hay que agradecerles"- comentó Pai, en tono calmado y tranquilizador. Aunque no obtuvo reacciones del peliverde.
-"¿Eh?"- curioseó Taruto acercándose por la espalda a Kisshu –"¡Kisshu está llorando por una chica!"- exclamó divertido.
-"¿QUÉ? ¡No es cierto!"- respondió apresurado y con alteración. Saliendo de su trance.
-"¡Bien! Pero las ganas no te faltan, tonto. No entiendo por qué te preocupan esas cosas."- comenzó a decir el pelirrojo –"De seguro cuando regresemos ella se alegrará de verte"-

Kisshu permaneció pensativo un momento –"Tal vez tu tengas motivos para regresar, Taruto, pero yo no."- sonrió tristemente y retomó el trabajo que estaba haciendo. Esto era distinto. Y sabía que era una locura seguir intentando, su corazón y cuerpo habían sido destrozados demasiadas veces en muy poco tiempo. Nunca creyó que escuchar las palabras te amo unido al nombre de otra persona y proviniendo de los labios de su amada sería tan doloroso. En aquel momento no quiso demostrarlo, la escena era demasiado perfecta para que él la arruinara. Ella estaba viva, e iba a vivir su vida feliz, era lo único que lo confortaba, tal vez él no tuviera tanta suerte. Después de todo, la suerte jamás estuvo de su lado. Pero así era suficiente, el dolor iba a pasar en algún momento…

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Algunos meses después… (3 ó 4 meses xD)

-"¿Qué traes en esa caja, Tart?"- preguntó con picardía, arrebatando la pequeña caja de sus brazos.

-"¡DEVUÉLVEMELA! ¡Kisshu!"- gritó enrojecido aunque fuese inútil pedirla ´amablemente`

-"¡No! Sólo quiero ver qué te traes…"- respondió con una sonrisa burlona antes de abrir la caja y que el joven Taruto se lanzase a él como una bala para evitarlo.

Sus ojos se abrieron ampliamente de la sorpresa al observar el interior

-"¿Un… caramelo?"- regresa de su asombro al chocar el joven cyniclon con el mayor –"¡Regrésamelo, Kish!"- pero este escapa del agarre con la experiencia que un hermano mayor tiene en las peleas con su hermano menor.

-"¡Eres un enano egoísta! ¡Nos estabas ocultando los dulces!"- bromea y le entrega la caja, no sin antes tomar el caramelo de su interior. Taruto toma la caja que tanto atesoraba, había evitado innumerables veces la tentación de comerse ese último caramelo, por ser único y especial (sin mencionar que en su planeta no existían).
-"¿Y bien…? ¿Por qué es tan especial?"- río y se inclinó frente a él para quedar bastante más a su altura. –"¡POR NADA! ¡No tiene nada de especial!"- gruñó de colores Taruto.
Kisshu volvió a reír, esta vez más socarronamente –"¡Bien! Entonces supongo que puedo quedármelo."-
Taruto se apresuró en abrir la caja sólo para descubrir lo que se temía… su tesoro ya no se encontraba en su lugar y, entonces… volteó confuso hacía Kisshu, su expresión de felicidad y su mejilla ligeramente más hinchada que la otra le hizo comprender todo… su caramelo, aquel que había protegido tantos meses…

El pequeño cyniclon permanece atónito unos segundos hasta dar por confirmado todo, sus mejillas enrojecen de cólera y sus ojos brillaron desbastados–"¡Kish, eres un idiota, te odio…"- fueron las últimas palabras que pudo pronunciar antes de desaparecer y romper en llanto lejos de él.
Kisshu permaneció inmóvil un momento, pasmado por la reacción y esas palabras… más bien, el tono fue lo que lo perturbó. Bajó la mirada, y decidió por ir tras él.

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-"Lo siento…"- se disculpó con un hilo de voz al pequeño que estaba sentado contra un árbol seco con la cabeza escondida entre sus rodillas y lloriqueando amargamente.
-"Si no quieres que te de una bofetada será mejor que te vayas…"- dijo en tono amenazante. Pero a Kisshu no le importó y se sentó a su lado.
-"Bien… puedo esquivarte todas las veces que sean necesarias" respondió despreocupado –"Ese caramelo… ¿te lo había dado alguien especial entonces? ¡Tonto, debiste decirlo!"-
Taruto se aferró con más fuerza a sus rodillas al escucharlo. –"Ya no hay.. más… no tengo más recuerdos, tampoco de mamá y papá."- Kisshu escuchaba atento los sollozos del pequeño. Recordaba que para él también había sido muy duro perder a sus padres y luego ser reclutado para la misión. Se daba cuenta del gran error que cometió. Era normal fastidiarse mutuamente, pero nunca quiso herirlo. Después de todo, Pai y Taruto eran los únicos que siempre habían estado con él. Rodeó con su brazo a Taruto, despeinando un poco sus cabellos rojizos y volvió a disculparse -"Lo siento, Taru… Lo siento."-
-"Pero… de todas formas. No podías conservar ese caramelo por siempre"- dijo finalmente en tono risueño. –"No se puede vivir de los recuerdos"- continuó… -"Así que, eso significa que hay que volver a La Tierra por más caramelos!"- El joven de cabello rojizo levantó ligeramente las orejas creyendo no haber escuchado bien ¿Kisshu queriendo regresar? ¡Era imposible! Con una ceja inquisitiva miró a su amigo –"¿Tenía algo malo ese caramelo, Kisshu?"-
-"¿Hm?"-
-"¡Tú eras el que no quería regresar!"-
-"Lo sé… pero este planeta es aburrido… supongo que podemos tomarnos unas vacaciones"-
-"Necesitamos a Pai, tú no sabes manejar solo la nave"-
-"A él tampoco se lo ve muy interesado por estar aquí. Mañana saldremos"-

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Fin del primer capítulo…

No me gusta comenzar historias XD perdonen si resultó algo aburrido, prometo que el siguiente será mejor.
Si te gusta el Kisshu/Ichigo visita mi página de DeviantArt o SmackJeeves para ver mis doujinshis :) ¡Gracias por leer!