Capitulo No. 1: "Pensamientos confusos"
Disclaimer: Digimon y sus personajes no me pertenecen este es solo un fanfic para divertir sin ningún fin de lucro.
Era Viernes en la tarde, para ser exactos las 6:00 de la tarde hora en que Taichi Yagami de primer grado de la Universidad terminaba su entrenamiento de fútbol, cuando termino el partido de practica volteo hacia las gradas, y efectivamente ahí se encontraba Yamato Ishida o mejor conocido como Matt, su mejor amigo, que aunque Tai deseara que fuera algo más, desgraciadamente para él "su" Matt, ya tenía a Sora. Sora su mejor amiga, en un tiempo fueron novios, pero no funciono, y la razón fue el que estaba sentado en las gradas y no era precisamente que a Sora le gustara Matt, si no que Tai no podía dejar de pensar en él; para su desgracia al mes de su rompimiento con Sora, Matt le informo que la invitaría a salir.
¤¤ Inicio del Flash Back ¤¤
- Oye Tai, yo me preguntaba si... tú... pues... si... tú ¿te molestarías si invito a salir a Sora? – dijo Matt un poco nervioso por la respuesta de su mejor amigo.
- ¿He? Claro que no Matt; ¿cómo crees? Después de todo Sora y yo terminamos hace tiempo – dijo Tai aparentando despreocupación ~ y tú fuiste mi única razón para dejarla ~ pensó para sí mismo.
- ¡Muchas gracias amigo! – grito el rubio mientras corría hacia donde él sabía que se encontraba Sora en ese momento - ¡iré ahora mismo a invitarla! – se despedía con un gesto de su mano derecha en el aire diciendo adiós.
- Claro no hay problema – dijo Tai en voz baja para sí mismo – todo para que seas feliz – Tai tenía la mirada baja y sentía ganas de llorar.
¤¤ Fin del Flash Back ¤¤
Tal sonrió al ver a la causa de esos sentimientos sentado en las gradas, sonriendo y viendo como practicaba; y corrió hasta llegar a un lado de él y sentarse.
- Hola Matt – sonrió al decir esto - ¿Qué haces tan tarde en la escuela? – dijo con un poco de preocupación, pues Matt nunca se quedaba tan tarde en la escuela
- ¿A caso no lo recuerdas? - dijo viendo fijamente a Tai, quien tenia una cara de 'no no recuerdo nada' – veo que no, te estoy esperando para ir a mi departamento a empezar la tarea de literatura en equipo - Matt al decir esto último puso una cara de falsa molestia.
- Mm... - Tai dirigió su mirada al piso tratando de recordar - ¡a si! La que teníamos que ver una película basada en algún libro, y también leer el libro en equipo y hacer un escrito con las diferencias, igualdades y todo eso ¿no?.
- Así es - Matt movió su cabeza en forma de afirmación.
- Claro, ya se me había olvidado - Tai puso una sonrisa tonta, en forma de agradecimiento a Matt por habérselo recordado.
- Me lo suponía por eso vine por ti - sonrió Matt - tu nunca faltarías a un entrenamiento, el fútbol es tu pasión - Matt seguía viendo la cancha en la que hace un rato Tai había estado jugando.
- Algún día deberías intentarlo - le dijo a Matt como adivinando sus pensamientos - si gustas yo te puedo enseñar a jugar – sonrió.
- No lo sé - dijo volviendo la mirada a la cara de Tai - no soy muy buen deportista – sonrió.
- ¿Y cuando tengas algún hijo quien le va a enseñar a jugar? - dijo sarcásticamente.
- Pues claro que tu - dijo sonriendo el rubio.
- ¿Perdón? - dijo el de pelo castaño levantando una ceja - y ¿Qué te hace pensar que todavía estaré en Japón? Yo tengo grandes planes de irme a jugar a por todo el mundo - dijo con una sonrisa
- No sé - dijo viendo al cielo con una mirada perdida - algo me dice que tu destino es que te quedes en Japón con... - se detuvo al pensar en la terminación de la oración - migo - Matt no pudo más que sonrojarse ~ ¿qué estoy pensando?, ¡bah! No debe ser nada, lo más probable es que no piense bien por el hambre ~ pensó Matt tratando de convencerse el mismo.
- ¿Con? ¿Con que? O ¿Con quién? No te entiendo - dijo Tai tratando de que su mejor amigo completara la frase, al ver que se quedó callado.
- Con nosotros, con tus amigos y tu familia - dijo el rubio riendo nerviosamente y levantándose rápidamente de donde estaba sentado - vamos que tenemos que rentar la película, el libro está en mi departamento ya, y quisiera pasar por algo de comer en el camino al videoclub ¿te parece bien? - dijo el rubio tratando de desviar el tema.
- Claro, por mí no hay problema - dijo Tai dándole una hermosa sonrisa a su acompañante, se levantó poco a poco.
Los dos ya parados empezaron a caminar hacia la salida de la escuela; la plática más que Matt la generaba Tai, Matt estaba distraído pensando en por que había pensado en porque su amigo moreno tenía que quedarse con él, así estuvieron casi todo el camino hacia la plaza comercial. Pero llegando ahí.
- Oyes Matt, has estado muy callado desde que salimos de la escuela, ¿te pasa algo? - al decir esto el moreno, su amigo rubio subió la vista para encontrarse con la de él.
- No es solo que estaba pensando, vamos, son cosas sin importancia, será mejor que nos demos prisa, o no alcanzaremos a hacer todo lo que vinimos a hacer. Rápido... - aunque la verdad era que Matt estaba muy nervioso y sin alguna razón aparente
Los dos entraron a la plaza, y se dirigieron inmediatamente hacia el videoclub, ya MUY bien conocido por los dos, debido a que iban seguido a rentar algunas películas para verlas en casa de alguno de los dos. Al llegar la encargada les sonrió como de costumbre.
- Hola muchachos, ¿hoy que película llevaran? - dijo muy alegre la encargada al ver a los dos llegar al mostrador
- Hola Alana, recuerdas que hable por teléfono para pedirte una película en especial - dijo el muchacho rubio sonriendo - "Cementerio de Mascotas" ese es el nombre...
- ¿"Cementerio de Mascotas"? - pregunto Tai muy curioso - pero si esa película es viejísima...
- Así es, es muy vieja - dijo la encargada algo sorprendida - ustedes siempre han llevado estrenos - sonríe - si hace más de tres años que vienen mínimo una vez a la semana para rentar una película y siempre se han llevado estrenos, ¿Qué paso? - pregunto la empleada curiosa
- Lo que pasa es que es una tarea de la escuela, por eso - dijo el muchacho rubio - y como fue por sorteo la película que nos tocaría... pues que remedio - dijo encogiéndose de hombros
La encargada iba a decir algo pero Tai le gano…
- ¿Por sorteo? ¿Cuándo? - pregunto con gran asombro el moreno.
- Pues en la clase de ahora, pero obvio que no viste, si estabas más dormido que un oso hibernando - dijo divertido Matt dándole un pequeño coscorrón a Tai.
- Que bonita pareja hacen, siempre lo he dicho - los ojos de los dos se agrandaron al escuchar esto - se llevan muy bien y aparte de todo están en el mismo salón, que bonito - Tai y Matt voltearon a verse en ese momento y los dos estaban como tomates - yo en cambio con mi novio... - fue interrumpida por un moreno que estaba totalmente sonrojado.
- Disculpa Alana, no somos - Tai trago saliva - novios - y bajo la mirada al piso totalmente sonrojado.
- ¡OH! Disculpen, yo no sabía - ahora la sonrojada era Alana
- No hay problema - dijo un más calmado Matt, y se podía notar que estaba más calmado porque ya había recuperado su color normal - de hecho - sonrió - si tuviera un novio, definitivamente seria como Tai - el rubio sonríe y voltea a ver a Tai, quien para estas horas estaba más rojo que la lava en plena erupción.
- ¡O disculpen! - Alana reacciono a que tenía que entregar cierta película a sus amigos - la película, déjenme ir por ella está en el almacén
- Claro no hay problema - dijo Matt.
Al irse Alana; quedaron Tai y Matt solos en la tienda; el silencio punzaba en el pecho de los dos, solo que había una pequeña diferencia Tai si sabía por qué se sentía así, en cambio su amigo rubio no.
- ¿Qué te pasa Tai? - dijo viendo a su amigo aun totalmente colorado de la cara.
- N.. Na... Nada - dijo viendo aun al piso
- ¿Estarás enfermo? - dijo poniéndole la mano derecha en la frente de Tai - no, estas perfectamente - dijo viéndolo a la cara.
En ese momento llega Alana, quien después de entrar a la bodega sale con una cara de enojo.
- ¿Qué pasa Alana? - dijo Tai rápidamente tratando de desviar la atención de Matt hacia él.
- Ustedes disculpen pero a mi compañero de trabajo - pone cara de fastidio - se le ocurrió pasar todas las cintas viejas a DVDs, y en este momento se encuentra pasando esa cinta por que la vio fuera de su lugar de almacenamiento...
- ¿Entonces eso quiere decir que no nos podrás rentar la película hoy? - Pregunto un Matt totalmente desconcertado.
- Pues sí, pero, hay un pequeño problema, estará listo a las 9:00 en punto el DVD, si gustan regresar, con mucho gusto les rentare el DVD para que lo estrenen - sonríe muy amablemente la muchacha.
Matt y Tai se veían mutuamente como buscando una respuesta en el rostro del otro, cuando Taichi volteo a ver a Alana.
- ¡Claro, vendremos a esa hora! - dijo sonriente - solo que... ¿podrías decirnos que horas son?.
- Con mucho gusto - se fijó en la hora de la computadora - son las 7:00 en punto.
- De acuerdo nos veremos en dos horas Alana - se escuchó la voz del muchacho rubio.
Los dos se despidieron de Alana, y salieron del videoclub y empezaron a analizar la situación; ¿que podrían hacer durante dos horas?.
- Que te parece si aprovechamos y vamos por los víveres, tengo que comprar de perdida para sobrevivir esta semana, mi padre no estará en la casa... - dijo el rubio volteando a buscar el almacén.
- De acuerdo, por mí no hay problema - dijo encaminándose hacia el almacén.
Entraron al almacén y empezaron a buscar lo que Matt necesitaba para sobrevivir esta semana: leche, carne, verduras, frituras, nieve, refresco, comida para microondas, etc.
Al salir del almacén ya habían terminado con las compras de Matt y cada uno llevaba dos bolsas en cada mano; Tai volteo a ver el reloj que se encontraba dentro del almacén.
- Valla aún nos falta una hora para ir por la película - dijo viendo hacia donde se encontraba el videoclub.
- Bien, pues me sobro algo de dinero de las compras - dijo viendo su cartera - ¿qué te parece si vamos por unos helados?
- ¡De acuerdo! - a Tai se le ilumino la cara y puso su mejor sonrisa.
- Sabría que te gustaría - sonrió Matt.
Así los dos empezaron a caminar hacia el último piso donde se encontraban los restauran y los puestos de comida. Al llegar ahí Tai rápidamente y milagrosamente localizo una mesa desocupada cerca de la tienda de nieves y aun lado de una ventana; Tai dejo en uno de los cuatro asientos las bolsas que traía; Matt lo siguió, pero como gente normal, o sea caminando; al llegar se sentó en frente de Tai, y deja a un lado las bolsas.
- Pareces niño - dijo Matt sonriente
- Es que no puedo evitar emocionarme - baja la mirada a la mesa totalmente apenado.
- No te preocupes me gusta tu forma de ser - se sonroja un poco ante las palabras dichas.
- ¿En serio? - Tai le da una de sus mejores sonrisas a Matt.
- Claro - este a su vez le devuelve la sonrisa - Que hermosa sonrisa tiene mi Tai - ente tal pensamiento levanta una ceja - ¡UN MOMENTO! ¿Desde cuanto Tai es mío? - a su vez Matt se ponía rojo, para despistar se levanta rápidamente y se dirige hacia la ventanilla de las nieves - vamos antes de que se haga tarde.
- ¡Claro! Por mí no hay problema, mientras allá nieve de por medio - sonríe ampliamente
Los dos llegaron al mismo tiempo a la ventanilla y voltearon de un lado a otro buscando al mesero; cuando de una puerta que estaba aún lado de la ventanilla sale un joven de cabello rubio, tez un poco morena, ojos color café claro, muy muy buen cuerpo.
- Buenas Tardes ¿en que los que los puedo servir? - dijo el joven recién llegado, analizando a los, y poniendo especial atención a Tai.
- Un helado doble de napolitano con chocolate derretido - dijeron Tai y Matt al mismo tiempo; se voltearon a ver, sonrieron un poco y se sonrojaron al mismo tiempo.
- ¿Estás seguro que solo quieres eso? Yo te invito un helado mejor que ese - dijo viendo a Tai y guiñándole un ojo.
Matt al oír esto sintió que la sangre le hervía por dentro, quiso agarrar al tal tipo a golpes ahí mismo sin importarle nada.
~ ¿Qué me está pasando? No lo entiendo, se supone que no me debería importar si alguien le coquetea pero... ~ pensó Matt al mismo tiempo que apretaba sus puños.
- No gracias, solo queremos lo que pedimos... - dijo Tai sonriendo después del intento de coqueteo del chico.
Al oír esto los adentros de Matt se calmaron, pero su confusión no, no entendía por qué esos sentimientos empezaban a aparecer en él. Cuando menos lo noto Matt, el mesero ya les estaba preparando los helados.
- Aquí están sus helados - dijo extendiéndoles las dos mini copas - por cierto mi nombre es Axel, y estoy para servirles cuando quieran - esto último lo dijo viendo a Tai con especial determinación.
- ¡Oyes tu que no puedes dejar que coquetear con el! - grito Matt furioso, haciendo que gran parte los que estaban ahí se fijaran en ellos.
- ¿Y quién eres tú para decir eso? - dijo con una mirada retadora Axel - ¿Su novio acaso?.
- ¡¿Y si lo soy que harás?! - esto último lo grito sin pensarlo - ¿Qué demonios dije? ¡No puedo creerlo! Dije que Tai era mi novio.
- Pues tomar el reto de bajártelo - sonrió picadamente Axel.
- Inténtalo - dijo Matt poniendo el dinero en la barra y tomando las dos mini copas que estaban en ellas; haciendo esto empezó a caminar hacia sus asientos.
- Matt ¿Qué pasa? - pensaba Tai mientras daba vuelta y seguía a Matt entre las mesas para llegar a la de ellos... mientras caminaba podía oír los cuchicheos de la gente y entre ellos pudo escuchar a un grupo de jovencitas que decían "ya viste es Taichi, el capital del equipo de fútbol del primer semestre" y otra comentaba "si y se encuentra con Matt, el cantante, poco a poco se ha hecho fama" y una tercera amiga decía "si y al parecer son novios, ¿no creen que pudo haber solo para hacerle publicidad a Matt?" y la segunda voz que escucho dijo "no, no lo creo, el no haría eso" y la primera finiquito los comentarios "entonces si deben ser pareja, es una lástima los dos tan guapos"... después de oír estos comentarios Tai se dirigió con su supuesta pareja a sentarse.
Los cuchicheos poco a poco se calmaron hasta que todo volvió a la normalidad en las mesas; en este tiempo, solo hubo silencio en la mesa.
- Yo, perdón no debí de haber hecho eso - dijo Matt con la cabeza agachada por su actitud.
- No hay problema - dijo con una sonrisa, pero Matt lo interrumpió.
- A lo mejor tu querías salir con él, y yo te negué la oportunidad - dijo volteando a ver a Tai.
- No lo creo - dijo analizando al tipo de la barra que atendía a una niña en estos momentos - no es mi tipo - esto calmo a Matt - además yo ya amo a alguien - dijo Tai con una sonrisa.
Al último comentario y la sonrisa que puso Tai al pensar en su amor; hizo que a Matt le doliera en lo más profundo de su ser sin saber por qué.
- Y... y... y... ¿puedo saber quién es? - dijo Matt sintiéndose nervioso aunque no sabía por que.
- Pues creo... creo... que si - dijo Tai agachando la cabeza y pensando si en decírselo o no - Pues la persona que amo e...
- ¡Hola Matt! - se oyó un grito que se acercaba; al darse vuelta Tai y Matt se dieron cuenta que la que grito era Sora y venia acompañada de Mimí, y traían bolsas, muchas bolsas, al parecer habían venido de compras.
Al reconocer quien era quien lo llamaba, Matt solo bufo; Tai al darse cuenta de esto se le hizo raro, pero decidió preguntar después.
- Hola mi amor - dijo Matt tratando de fingir felicidad, pero Tai lo conocía bastante bien para que lo engañara - Hola Mimí - saludo a la otra recién llegada.
- Hola Tai - dijo Sora dirigiéndole una sonrisa.
- Hola Tai - dijo también Mimí quien lo saludo con un abrazo, no cabe decir que le gusto nadita a Matt.
- Hola Sora, Hola Mimí - dijo Tai tratando de zafarse del abrazo de Mimí.
Después del corto saludo, dejaron las bolsas abajo del piso, y sus bolsas en la mesa.
- Muchachos en un momento venimos, vamos a ir al tocador, cuiden nuestras cosas por favor - dijo Mimí dando una orden y alejándose con Sora.
Las dos desaparecieron de la vista de Tai y Matt; Matt se quedó viendo en la dirección en donde fueron.
- ¿Qué pasa Matt? - dijo viéndolo un poco preocupado.
- ¿Por qué dejaste a Sora? - dijo volteando a ver la bolsa que estaba en frente del - ¿Perdón? - dijo Taichi extrañado de la pregunta.
- Si... lo que oíste ¿Por qué dejaste a Sora? - dijo volviendo a ver a Tai a los ojos.
- Pues es sencillo, no la amaba, y cuando descubrí quien era mi verdadero amor, decidí, que no la estaría engañando - dijo con una sonrisa melancólica al recordar esos tiempos.
- Pues al parecer yo también la dejare - dijo Matt al tiempo que cruzaba sus brazos y volteaba su vista por donde llegarían Sora y Mimí.
- ¿Cuándo? - Tai estaba preocupado por la decisión de su amigo, antes se veía tan feliz con Sora.
- En estos momentos - dijo suspirando Matt.
- Valla, será un gran impacto para ella -dijo viendo al piso - y para mí también - pensó al deducir que Matt se había enamorado de alguien más.
En esos momentos venían las dos chavas en camino, en ese momento Matt se paró súbitamente y empezó a caminar hacia Sora.
Bueno primeramente ¡hola a toda la comunidad fanfictionera! Hace mucho tiempo empece a subir este fic, nunca lo termine pero dado situaciones actuales de mi vida tengo mucho tiempo y ahora quisiera terminarlo, los primeros cuatro capítulos ya están hechos pero los baje con la finalidad de poder realizar algunos cambios (por ortografia y gramática), también cambiare alguna que otra cosa que no me gusta. Se aceptaran sugerencias para los otros capítulos.
En esta semana estaré publicando los capítulos viejos y tratare de que cada sábado halla un capitulo nuevo. Muchas gracias por dedicar un poco de su tiempo a leer este humilde fic.
