Nota: Esta es una traducción del primer fanfic de The First Derivative of K y mi primera traducción, así que por favor no sean malos
Disclaimer: Ni a The First Derivative of K ni a mi nos pertenece Prince of Tennis, ¡Sin importar cuanto lo deseemos!
Summary:Sakuno se encuentra con el corazón quebrado luego de la repentina partida de su amor. ¿Quién podrá reparar los daños?
Una joven peli-castaña estaba corriendo por las calles cuando tropezó con un hombre con "cabello de algas", quien iba en la dirección opuesta, haciéndole caer hacia atrás. Ella se paró rápidamente, sacudió su ropa y se disculpo.
"A-anou,… Lo l-lamento. Y-yo…" Hizo una leve reverencia, ocultando su rostro y tartamudeando al hablar, y entonces oyó reír al hombre con quien chocó. Levantó el rostro y vio a alguien bastante conocido vistiendo el uniforme de Rikkai.
"¡Oi, deberías mirar por donde vas, sabes!" Contestó con una tenebrosa, maligna mirada.
"¡Kirihara-san! Lo lamento, no q-quería h-hacerlo…" Hizo nuevamente una reverencia. Estaba asustada creyendo que él podría golpearla o algo parecido.
"¿Cuál es tu nombre?" se inclinó para ver el rostro de la joven, quien se irguió para que Kirihara pudiera identificarla. "Te he visto en algún lado…" entonces él se irguió también, intentando recordar vagamente el nombre de la chica.
"Etto… Mi nombre es Ryuuzaki Sakuno. Yo estaba-" estuvo a punto de decirle en donde se conocieron, pero fue detenida.
"¡Oh! Ya recuerdo". Paró un momento, lo cual le hizo pensar a Sakuno que debería estar corriendo por su vida en ese preciso instante. Entonces él continuó "¡Pero eso no significa que no debas ser cuidadosa!" habló con su mejor cara de póker, cambiando poco a poco a una más maliciosa.
'¡Oh, Kami-sama! ¡Por favor, sálvame! ¡No quiero morir tan joven!' Sakuno, obviamente, estaba rogando mentalmente. Después de todo, es Kirihara Akaya de quien estamos hablando. Estaba tan asustada que cerró sus ojos, pero algo extraño pasó. Una mano se posó en su cabeza y la acarició. Abrió sus ojos y vio a un sonriente chico con brillante cabello rojo.
"¿Eh?" Preguntó confusa. Si, era nadie más que Marui Bunta quien acariciaba su cabeza. Pronto, los demás titulares de Rikkai entraron a escena.
"Eres muy hermosa ¿no lo crees?" Marui la abrazó como si fueran amigos cercanos (ahora ellos estaban cerca considerando el echo de que Marui la estaba abrazando, pero ¿Quién se fija, no?...). Sakuno se estaba quedando sin aire por el abrazo de oso cuando algo o mejor dicho alguien, empujó a Marui lejos de ella.
"¡No deberías hacer eso Marui-sempai! ¡Ni siquiera la conoces!" Kirihara gritó a su sempai quien estaba siendo sostenido como un gato por su fuku-buchou. Intentó huir de la mano que lo aprisionaba, pero nada pasó. Marui entonces oyó un sonido leve que no pudo comprender claramente puesto que se hallaban en una calle poblada de gente. Forzó sus orejas y pudo oír a Sanada decir: "50 vueltas a las canchas en el entrenamiento de mañana y 50 lagartijas". Sintió un escalofrío recorrer su espalda; miró a sus compañeros y lo único que recibió fueron unas maliciosas sonrisas. Asintió y se disculpó con Sakuno.
"Bien, pues, perdón por su comportamiento. Ya debemos irnos": Ella sintió la mano de Sanada en su hombro levemente, ambos se conocían del campamento de entrenamiento. Ella se quedó mirándolos mientras se marchaban. Kirihara fue el último en dejarla.
"Mejor anda a tu casa también. No sabes que pueda pasarte" Akaya le sonrió y dio la vuelta para alcanzar a sus sempais. Sakuno se despidió y se marchó ella también, volviendo a sus propios pensamientos – sus tristes pensamientos.
Al día siguiente
Sakuno caminaba de regreso a su casa y el sol ya casi se había ocultado. Ella estaba sola; quería estarlo. 'Ryoma-kun… ¿Por qué?' Se preguntaba en sus pensamientos mientras caminaba, cuando fue rodeada repentinamente por tres hombres. "¿Q-qué es lo q-qué quieren?" dijo con miedo, y uno de ellos tomó su brazo.
(Esto va a ser tan predecible… n_n)
"¿Por qué no venís con nosotros? ¡Tendremos un montón de diversión!" Sakuno temblaba al tiempo que el hombre aumentaba la intensidad del agarre. Estaba esperando por una oportunidad para huir, pero todavía estaba lejos de su hogar. Un auto pasó y paró justo frente a ellos. El conductor se asomó por la ventanilla y preguntó por una dirección. Ella tomó la oportunidad, sacudió bruscamente su mano y se dispuso a escapar.
"¡Atrápenla!" los tres hombres la siguieron y uno de ellos gritó "¡Ella pudo escapar por que ustedes bajaron la guardia!" (No, ese no es Tezuka-buchou. Yeap, estamos muy seguras.)
Ella corrió y corrió y ¡se perdió! (¿qué esperaban de nuestra amada Sakuno?) El miedo invadió su mente '¡Oh no! ¡Me perdí de nuevo! ¡Kami-sama, por favor sálvame!' aún estaba corriendo cuando llegó a un punto sin salida.
Los hombres que la estaban siguiendo, rieron a unísono mientras la acorralaban. Ella cerró sus ojos, esperando la terrible Dios-sabe-que-cosa que le fuera a suceder, sucediera. Para su sorpresa, un chico se paró detrás de sus atacantes.
"No deberían amenazar la felicidad de una chica". Sakuno reconoció esa voz. Era Kirihara quien encontró su camino hasta ella. Estaba agradecida de que al menos alguien intentara salvarla. Los hombres voltearon y atacaron a Kirihara, pero ninguno de ellos salió exitoso.
Todos fueron derribados al piso. Kirihara se apresuró, tomó a Sakuno por la muñeca y corrió a un lugar más seguro donde había algunas personas.
"Estoy feliz de que no te hayan lastimado ni nada" El dijo, dándole la espalda a Sakuno quien aún estaba jadeando. Ella comenzó a llorar, diciendo cosas entre sollozos. Kirihara dio la vuelta rápido para parar su llanto, la sostuvo por los hombros y dijo "¡Deja de llorar! ¡Hay un montón de gente mirando!" El oyó a las personas diciendo '¿es una pelea amorosa?' y otras cosas más, y muy fuerte. El se sonrojó al oír los comentarios de la gente.
"Es sólo q-que… sniff… Yo…" aún estaba llorando. El le acarició la cabeza y suspiró.
"Te acompañaré hasta tu casa para asegurarme que nada malo te pase de nuevo". Ignoró a las personas que estaban diciendo esto y aquello de ellos. '¡Hey! ¡Si sólo estos imbéciles supieran lo que pasó!' pensó. Ahora él realmente quería darles a todos una parte de su mente, PERO, no podía. Así que caminó junto a ella, siguiendo su ritmo. Al llegar a la casa de Sakuno, él se despidió y se iba a marchar pero la puerta de entrada se abrió repentinamente y apareció la vieja arrug- Quiero decir, la abuela de Sakuno, Sumire.
"¡Sakuno! ¡Pareces débil!" Se volteó hacia Kirihara "¡Tú! ¿¡Qué le hiciste!? Habló Sumire con tono acusador. Kirihara respondió levantando una ceja. "¿¡Por qué tú!?" ella estaba a punto de herirlo en grande cuando Sakuno la detuvo.
"¡Baa-san, detente! ¡El me salvó!" ella se paró en frente de Kirihara, cubriéndolo de lo que fuera que Sumire estuviera a punto de hacerle.
"¡Si, eso es cierto vieja! Si yo fuera el que intentó violarla, ¿por qué estoy parado en la entrada de tu casa?" dijo mientras se cruzaba de brazos.
Sumire se dio cuenta de que estaba equivocada e inclinó levemente su cabeza. Se disculpó por haber dejado que la furia la dominara. "Gracias por ayudar a mi nieta". Ella paró mientras el temor podía sentirse en su voz "Yo sólo… no sabría que hacer si algo malo le pasase". Ella dijo todo esto, aún inclinándose.
"Está bien. Ya me voy a mi casa" El miró a Sakuno y dijo, "La próxima vez, no vuelvas a tu casa sin nadie acompañándote, ¿okay?" ella asintió y lo vio caminar hacia las calles. Ella entró a su casa con la mano de su abuela abrazándola, dándole consuelo.
La noche pasó fríamente, y ella aún estaba un poco sacudida por lo que le había pasado temprano ese día. Recordó en que pensaba en aquel momento, mirando hacia ninguna cosa en particular.
'Ryoma-kun… ¿Porqué te tuviste que ir?' ella se acostó boca abajo y se cubrió con las sábanas, mientras lágrimas caían de sus ojos.
Aclaración: Acá los chicos de Rikkai, a excepción de Akaya, son estudiantes de primer año de la secundaria superior, y ustedes ya saben lo que eso implica. Akaya está en tercer año de la secundaria inferior y Sakuno en el segundo año. Por favor, sean buenos con los reviews si es que llega a haber alguno… sniff
