Disclaimer: Obviamente los personajes son propiedad de Meyer, mía solo es la historia.
Simplemente RidículoCuando al principio pense que esto era demasiado tenia razón. Todos podían verlo, no había otra palabra para describirlo…
Esto era ridículo.
Deje escapar un leve gruñido desde mi pecho, que solo él, sentado a mi lado, escucharía, era absurdo estar aquí, la sola proposición me había escandalizado, no se como me deje convencer de venir ¿Por qué simplemente no le dije que no?
Pero precisamente ese era el problema.
No podía negarle nada a él.
O quizás simplemente ¿no quería?
Hice un leve gesto negativo con mi cabeza mientras me movía incomoda por enésima vez en mi asiento, los aplausos resonaron en el salón lleno de gente.
Me di cuenta que el interminable discurso de turno había acabado; lo cual no era bueno, algo dentro de mí lo grito al instante, él también aplaudió algo mas que con normal entusiasmo y pude ver por la expresión de su rostro que estaba disfrutando demasiado estar aquí, cruce mis brazos sobre mi pecho otra vez en actitud molesta, no debí venir, no debí apostar, no debí perder, no debí dejar que me influyera de este modo, se suponía que yo era la imagen de la fuerza, la independencia en persona, nada ni nadie podía conmigo…
Excepto él.
Tomo con una de sus manos la mía, a pesar de mis intentos de evitarlo, entrelazo sus dedos y la llevo a sus labios, un escalofrío me recorrió de pies a cabeza, haciendo que me estremeciera como cada vez que nos tocábamos, haciendo que no pudiera pensar con mucha claridad.
Cerré los ojos y traté de concentrarme; estabamos rodeados de personas y además estaba molesta, besó el dorso de mi mano con sus fríos labios, me recordé como respirar…
Se suponía que estaba molesta, si molesta con él por la estúpida apuesta que había perdido; se entretuvo allí, solo respirando sobre mi piel y entonces ya no pude recordar el hilo de mis pensamientos, lo único que podía pensar era en él y en como la corriente eléctrica fluía a través de mí…
-¿Lista?
Suspire recuperando el dominio perdido, bufé, más tarde, cuando estuviéramos solos pagaría por esto…
Me levante, todas las miradas se concentraron en mí expectantes, tomé aire…
- Buenas noches, mi nombre es Rosalie Cullen y soy adicta al sexo…
Silencio.
Lo miré, como dije antes, me encargaría de borrar la sonrisa de Emmet mas tarde y seria algo que no disfrutaría demasiado…
¿O sí?
Nota:
Un one shot que nacio de una mañana de ocio, espero haberlos hecho sonreir…
Atenea14/05/09
