Punto de vista de Bella.
Lunes, 10:30 am.
Estábamos Edward, Alice, Rose y yo sentados en las escaleras del instituto, durante el cambio de clase, ya que ese día hacía muy buen tiempo, el sol relucía en el cielo despejado. De repente, vimos a Jasper acercarse a nosotros. Nos saludó y besó a Alice, ya que eran novios. Después nos dijo:
-Chicos, quería deciros que el viernes que viene celebro mi cumpleaños, y os invitaré a una fiesta en mi casa de campo.
"guay, una fiesta!" pensé. Me encantaba ir a fiestas con mis amigos.
Pero rechacé ese pensamiento cuando Jasper prosiguió:
-ah, tendreis que llevar pareja.
-guay! Una fiesta!-dijo Rose mientras sonreía ampliamente.
Claro, yo ya lo sabía, estaba segura que se lo pediría a Emmett, el chico nuevo de nuestra clase, que por cierto, no estaba mal…
De repente, me odié en mi fuero interno por no ser más atrevida.
-Seguro que nos lo pasaremos genial…-dije al fin, escabulléndome de mis pensamientos.
-Seguro que sí!- dijo Edward sonriente.
De repente, sonó el timbre. Jasper se despidió de nosotras y se fue con Edward a clase de biología. Alice, Rose y yo nos dirigíamos a la clase de
matemáticas.
Mientras ibamos por el pasillo, empezamos a hablar sobre la fiesta.
-¿Y a quién se lo vas a pedir, Rose?- preguntó Alice, aunque yo ya sabía la respuesta.
-pues había pensado en pedírselo a Emmett.-dijo, muy pagada de sí misma. Seguro que lo conseguiría…
-¿Y tu Alice? ¿Irás con Jasper, no?-le preguntó, guiñándole un ojo.
-¡Eso ni se pregunta! ¡Jaja!-rió Alice mientras se sonrojaba.
Después me miró y me preguntó lo último que quería oír esa mañana:
-Y tú a quien se lo vas a pedir, Bella?-
En ese momento me derrumbé por segunda vez en la mañana.
-Bueno… es que… aún no lo sé…-dije mientras entraba a la clase.
Ellas se quedaron en el umbral, extrañadas. Yo las miré confundida. ¿por qué se extrañaban? No tenía novio, y tampoco tenía a quién pedírselo...
al contrario que ellas...
-¿Que aún no lo sabes?- preguntó Rose.
-Con la cantidad de chicos que andan detrás de ti…-dijo Alice.
Enarqué las cejas. Estaba todavía más extrañada que antes...
-a ver, decidme alguno, porque yo no sé de nadie...
No me consideraba muy guapa que digamos, mi aspecto era de lo más común... A diferencia de mis amigas.
-Pues ese… James, el que te pidió para salir el otro día…-me respondió.
Yo suspiré resignada. Todavía recordaba a aquel muchacho la semana pasada, cuando me pidió salir con él. No era muy agraciado, la verdad, y además estaba 2 cursos por debajo del mío.
Le rechacé, y días después me alegré, ya que su petición formaba parte de alguna apuesta estúpida entre sus amigos.
La verdad no soportaba a muchos tíos del instituto, eran todos unos salidos…
-Por favor Rose, no me lo recuerdes… no voy a volver a hablar con ese tipo, no vaya a creérselo…-dije.
Lo último que quería era una "pareja" como ese para la fiesta.
-Es verdad… admitió Rose.
Pobrecita, de verdad quería ayudarme, pero no conseguía nada… el profesor entró a la clase, y Rose se fue con Jessica, su compañera, a su sitio, mientras que Alice y yo nos fuimos a nuestra mesa.
La clase comenzó, y mientras el profesor empezaba a explicarnos la lección, que por cierto, era demasiado aburrida, Alice y yo comenzamos a hablar de mis posibilidades…
