Por fin!!! Mi primer Mimato!!!. Digimon no me pertenece a mi sino a sus respectivos creadores, quienes por cierto desperdiciaron a una gran pareja XD.


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Inesperado

Era una suerte que el día llegara a su fin, al menos para Matt. El concierto que esa noche ofreció su banda había sido un total éxito, pero no por eso la fatiga iba a disculpar a su cuerpo. Después de lidiar un par de segundos con la llave habría la puerta de su departamento, un bostezo salía de su boca y sentía como un peso se acumulaba en sus ojos, una buena noche de descanso era lo que su cuerpo le exigía a gritos.

Esta vez trato de no dejar su guitarra tirada por ahí como lo hacía cada noche de trabajo, así que la acomodo en la sala en una esquina segura, al menos así no tropezaría con ella otra vez. Ese lindo instrumento que le regalo su hermano la última navidad había sido el mejor presente de la noche, después de cierta chaqueta negra, la cual por cierto también llevaba puesta. Un baño caliente antes de dormir parecía una buena opción, así podría dormir relajado y de pasó quitarse ese olor a cerveza. Mientras colocaba su preciada chaqueta en la cama con delicadeza, adentro del baño las demás prendas no corrieron con tanta suerte ya que eran arrojadas al piso con indiferencia, no importaba que se arruinara esa camisa costosa o esos pantalones de marca, después de todo cuando tu grupo esta adquiriendo cada vez mas popularidad y las ofertas de trabajo cada vez son mas frecuentes, el dinero te cae del cielo, eso sin mencionar a las fans. Así conoció a su chica actual, llegó un día gritándole que era su fan numero uno y esa misma noche termino compartiendo la cama con ella, después de todo, desde que era famoso, no era la primera vez que una admiradora lo acompañaba hasta el dormitorio de su residencia. Aunque por fin había decidido sentar cabeza y tener una novia fija, los pensamientos para su primer amor cada vez eran mas frecuentes, sobre todo en esas fechas de otoño, cuando un aniversario más hubiera sido festejado. El sonido polifónico de su celular interrumpió sus pensamientos, tratando de quitarse el shampoo que quedaba en su cabello salió de la ducha envolviéndose en una toalla en la cintura, dejando un camino de gotas de agua. En la pantalla de su móvil estaba escrita la frase"1 llamada perdida", echo un vistazo al registro de llamadas y nunca se hubiera imaginado que sería ella quien lo llamaría. Mientras intentaba devolverle la llamada lo más rápidamente que sus dedos le permitían, un par de golpes en su puerta robaron su atención, por ahora la respuesta a la llamada debía esperar, además tenía que calmarse un poco antes de hablarle. ¿Quién podría tocar su puerta a esta hora?... Era obvio, de seguro era uno de los muchachos del grupo pidiéndole posada porque estaba cayéndose de ebrio y de seguro olvido como llegar a su casa, tenían la maldita costumbre de ser inoportunos en momentos importantes como este, les encantaba festejar en grande, pero Matt se consideraba el un poco más serio que ellos…a veces. Sin importarle demasiado la idea de que una toalla fuera lo único que cubriera su cuerpo, con pereza en su caminar, fue a descubrir a su inesperado invitado, quien cada vez tocaba con mayor intensidad el portón.

—Mira hermano ya se a lo que vienes y desde ahora te digo que no tengo ganas de recibir a un borracho en… — Levanto la cabeza para y se dio cuenta se su error. — Pero si eres tú…Mimi.

— Matt…- El rubio sintió como las mariposas invadían su estómago, su ex novia parada ahí frente a él, pronunciando dulcemente su nombre era demasiado bueno para ser cierto, aunque notaba algo peculiar en el aspecto de la chica. Empezó a inspeccionarla con la mirada más discreta posible, pudo notar su cuerpo empapado,

( recordó haber visto el pronostico en la mañana que predecía una fuerte lluvia) su cabello algo desarreglado, como si hubiera estado en una pelea de gatas y quisieran habérselo arrancado a jalones, cosa rara considerando lo vanidosa que era y lo poco que le gustaban las peleas, además su piernas estaban llenas de tierra sin poder evitar notar las recientes costras que se le estaban formando en las rodillas, aún mas impactante que todo lo anterior era el aspecto maltratado de su cara y la expresión de miedo que reflejaban sus humedecidos ojos castaños.

—Creo que llegue en un mal momento, lo siento- Dijo con un hijo de voz mientras miraba la falta de ropa del muchacho con un ligero carmín acumulándose en las mejillas, comenzó a dar un par de pasos hacia atrás para retirarse de tan vergonzosa situación pero el chico no iba a permitir que se fuera así de rápido menos viendo el estado en que se encontraba, apenado al nota como lo había visto Mimi pero con determinación tomo a la chica de los hombros con su mano libre impidiendo que retrocediera un solo paso más.

—No, no te vayas, dime ¿Te pasó algo¿Estás bien? — La castaña notablemente incomoda por la ausencia de prendas en el rubio, insistía en irse, pero Matt era aún más insistente, finalmente Mimi accedió a entrar. El tono de preocupación que transmita su ronca voz, había sido el motivo de confianza para aceptar.

— De verdad¿No llego en un mal momento? — Pregunto de nuevo mientras tomaba asiento en el sillón principal de la sala.

—Ya te dije que no te preocuparas, solo estaba terminando de bañarme, esperame un minuto, voy por algo de ropa, vuelvo enseguida...

— Si, claro, gracias Matt. — Le regalo una pequeña pero dulce sonrisa, inmediatamente el rubio se la devolvió.

— Mimi…Tienes que contarme que te pasó de acuerdo, así que no se te vaya a ocurrir escaparte ¿Eh? — Le dijo con tono juguetón en su voz, pero eso no quería decir que no hablaba en serio, solo quiso torpemente animarla a lo que la castaña dijo sí moviendo su cabeza.

Mientas Matt se vestía rápidamente, Mimi echaba un vistazo al hogar se su anfitrión, un toque moderno caracterizaba el lugar, — "pero como se nota que aquí vive un chico"—pensó para si misma, voltea hacia su izquierda y pudo notar una hermosa guitarra roja la cual resultaba muy familiar, los recuerdos de una perfecta noche de navidad cruzaron por su mente. — ¿Matt también se acordaría? —Después de todo, estaban cerca de lo que hubiera sido un aniversario más de relaciónUna vez mas se regaño a si misma por estar ahí, en la casa de su ex novio, tal vez debería ignorar la advertencia de él, para empezar jamás debió pensar en esa tonta idea de que Matt la protegería como lo hacía antes, en esos momentos, en silencia se coloco de pie cuando una voz varonil le decía: — Ni lo intentes, parece que te conozco demasiado bien. — El rubio traía consigo unos jeans oscuros y una playera negra, que lo hacían lucir con un aire misterioso resaltando su atractivo.

La fuerte mano del muchacho se poso sobre su hombro y saco a Mimi de sus pensamientos, una vez vestido el chico se sentó a su lado y el interrogatorio esperado por fin dio inicio.

— Dime Mimi… ¿Qué fue exactamente lo que te pasó? — Su tono de preocupación era bastante serio. La chica tomó un profundo respiro.

— Es que me asaltaron…se llevaron mi bolso y ahí tenia todo; mis llaves, mi celular, tarjetas de crédito y dinero en efectivo. —Contesto temblorosa.

¿Lo dices enserio¡Pero eso es terrible!.. — Matt se sobresalto, la idea de que alguien pudiera lastimarla lo espantó, inconscientemente ya le estaba deseando el infierno a los malditos criminales.

"…"— Mimi solo permanecía en callada ante la angustia de su ex.

¿Cómo fue?

"…"— Silencio incomodo.

¿Dónde ocurrió?

"…"— Otro silencio incomodo reinando el lugar.

¿Cuantos eran?

"…"— Con esa niña era imposible razonar.

Mimi por favor dime algo. — Suplico el chico.

"…"—

Dime— Se atrevió a hacer una pregunta muy delicada— ¿Acaso ellos te hicieron algo…?— Mimi lo vio asustada, supo inmediatamente a que clase de pregunta se refería, le negó con la cabeza — Solo me tenían agarrada del cabello y me amenazaban con una navaja, también me empujaban, pero no me hicieron nada mas, pude escaparme en un descuido. —

Visiblemente incomoda la chica agachaba su cabeza intentando escapar de la preocupación del rubio, ya no quería ni acordarse ni platicar el tema, poco le importo al muchacho y siguió con sus preguntas, no se trataba de falta de sensibilidad sino de verdadera preocupación por el estado de su "amiga".

Ya fuiste a la policía ¿Cierto?

Emmm…no— Respondió aun mas apenada.

¿Cómo que no? Sino vas a contarme nada a mí esta bien, pero al menos debes ir la policía a denunciarlos…— Decidió guardar silencio al ver como los ojos de Mimi

se humedecían aún más y empezaba a temblar más su cuerpo. Paso su brazo a través de sus hombros y la atrajo así el, al principio esa acción la tomo por sorpresa pero unos instantes después coloco su cabeza en el pecho del muchacho, el olor de aquella piel la hacia sentir tan segura que por un momento olvido su horrible experiencia. Ya recuperándose y siendo consiente del comprometedor momento del que estaba siendo protagonista, apoyó sus pequeñas manos en los hombros del oji azul, levantó la cabeza para terminar cruzando su mirada con la de él por un breve segundo, el enrojecimiento en las mejillas de ambos no se hizo esperar, intentando terminar con la "incomoda" escena Mimi rompió el silencio— Disculpa ¿Me permites tu tocador? —dijo tímidamente.

—Si, claro, pero el baño esta en mi habitación (Recordó el desordenado que se encontraba su baño, así que le pidió un minuto de espera para arreglar el desorden.)

Dos minutos después Matt estaba terminando por fin de recoger toda la ropa tirada del baño, entre ellos algunos pares de bóxers los cuales probablemente tendrían días en el piso, uno por cada aventura nocturna, el baño del rubio podía considerarse como un lugar de aseo, pero no un lugar aseado, cosa que prefería mantener en secreto para la castaña, así que decidió limpiar el baño lo mejor posible para ella. Sin notar el ligero camino de gotitas que anteriormente habia derramado cuando salio del baño, resbalo de espaldas causando un escandaloso ruido sin mencionar el pequeño grito que se le escapo de su boca, Mimi sin necesidad de permiso, entro a la habitación del muchacho deteniéndose a unos cuantos pasos del baño, asomándose delicadamente por la puerta entre abierta.

— ¿Está todo bien Matt? — Preguntó confusa viendo la divertida escena, sin mencionar que los bóxers volvieron a quedar tirados por todos lados, tal parece que el esfuerzo del muchazo había sido en vano, la vergüenza invadía su rostro con ese color rojo delatador. Un par de instantes después el tocador fue desocupado y Mimi entró en el para quitarse la suciedad de su cuerpo.

Si se te ofrece algo no dudes en decirme, estaré por aquí— Le mencionó amablemente, pero Mimi no respondió.

No te preocupes, no voy a espiarte — Dijo tratando de sonar confiable para ella,

asumía que la seriedad de la chica se debía a que le incomodaba la idea de que alguien violara su intimidad.

Gracias, pero no necesitabas decirme eso… confió en ti Matt— Este reciente

Comentario lo hizo sonrojarse aún más. Tratando de tranquilizarse tomo asiento en la esquina de su cama, necesitaba aclarar su mente, demasiadas cosas habían pasado esa noche.

Después de entre diez y quince minutos la dulce voz de la chica volvió a escucharse: — Oye Matt¿Me prestas una camisa? —

Si claro, espera un minuto…permíteme buscar una…

El color que sea estará bien— Completo la chica pensando que Matt buscaría

alguna camisa con cierto color femenino para ella. Matt le paso una de sus camisas favoritas por el pequeño espacio abierto de la puerta del baño, era blanca con botones plateados, bastante costosa, pero si ella se la ponía y su olor quedaba impregnado, para él el precio por lo menos debía duplicarse. Se acerco de nuevo a su cama a la espera de la invitada pero esta vez se sentó en el piso apoyando su espalda en el costado de la cama. Mimi salió después, vistiendo la camisa del chico pero con su misma mini-falda negra, al parecer solo se había lavado el cabello y limpiado las partes de su cuerpo que habían estado llenas de lodo y tierra. Al principio Matt había estado embobado cuando la vio salir, parecía una de sus fantasías, evadió la mirada de la chica, sonrió tiernamente y la invito a sentarse a su lado con un movimiento de su mano, Mimi siguió sus indicaciones. La castaña apoyo su cabeza de nuevo en él, pero esta vez en su hombro, Matt sintiéndose mas confiado paso su brazo a través del cuello de la joven y la volvió a atraer hacia él.

—Matt…de verdad gracias por todo lo que has hecho, no tengo suficientes palabras para agradecerte— La castaña se apegaba más a él.

—No te preocupes por eso…descuida. Además tu siempre podrás contar conmigo sin importa lo que pase.

— ¿Sin importar lo que pase?...

—Sin importar lo que pase— le reafirmo el rubio.

¿Sin importar…¿Que hayamos terminado? — Mimi se reprocho a si misma en ese momento por haber preguntado tal cosa. Matt la miro sorprendido y luego pego su frente a la suya y la susurro: — Por ultima vez, Sin importar lo que sea, yo siempre estaré aquí para ti…princesa—Se aparto un poco de ella para no comprometer tanto la situación y pudo notar cierto temblar en ella, a lo cual Matt supuso que tendría frió, se volteo hacia la cama y tomó la chaqueta que estaba encima que había dejado ahí anteriormente, la pasó por los hombros de la chica para que se la pusiera, pero ella inmediatamente reconoció la prenda.

¡Pero si esta es la chaqueta que te regale en navidad ¡ No puedo creer que aún la uses¡

Hehe Pero Mimi ¿Por qué no habría de usarla? Después de todo fue un gran regalo. — Matt Sonreía tiernamente.

¿Recuerdas esa navidad? Estábamos en la cabaña, tus padres habían invitado a mi familia y a mí a festejar esa noche con ustedes, fue genial, tan especial, es raro que los padres de un chico inviten a la familia de su novia a pasar las vacaciones con ellos. — Mimi tomaba la chaqueta y la apretaba mas hacia si misma, la melancolía se apoderaba de ella.

¿Te parece? Bueno es un poco curioso, de verdad que nos tuvieron mucha confianza, mira que dejarnos estar los dos solos frente a la chimenea del la sala durante horas. También recuerdo las bromas que nos hacía T.K. —

Yo también lo recuerdo¡Nos puso muerdazos por todo el lugar con el propósito de que…!— Otro reproche para si misma ¿Acaso no podía pensar antes de hablar?

Con el propósito de que nos besáramos— Completo Matt con una sonrisa seductora en sus labios —haha como si esa noche hubiéramos necesitado un propósito para hacerlo. — Le dedico una mirada penetrante y picara a la joven, quien se mantenía muda ante tales actos y sentía el calor en sus mejillas.

Mimi…— La chica levanto la mirada solo para sentir el calido aliento de Matt acercándose lentamente a ella.


Muchas gracias por leer mi fic.

Su opinion en muy importante POR FAVOR DEJEN REVIEWS

Nos vemos en el siguiente capitulo, se cuidan bye bye