Esa chica, le amó tanto que decidió engañar al mundo y al tiempo solo por su bien.

Se lo merecía ¿Cierto?

Aun así, esas palabras seguían resonando en su cabeza...

"Mirai...

Pero no podía pensar en eso, él no sabía sobre lo que ella debía hacer, eso restaba valor a sus palabras.

...No estarás sola"

Y después de todo, era mentira, pero nunca le creyó... O eso le gustaría pensar. Fue su culpa, todo esto era su culpa, solo suya. Si él no hubiera mencionado nada, esto no pasaría.

Pero, de cierta manera estaba agradecida, encontrarlo, verlo, conocerlo, quererlo, amarlo. No quería cambiar eso, incluso si en eso venía implícito que este sería el final.

Porque ella vivía para él, Él tenía el derecho de destrozarla y repararla cuando quisiera, porque él le dio sentido a su vivir.

Su vida, antes de él no se podía llamar así, sonreír era un lujo que se veía muy lejano, pero él iluminó su mundo. La persona más especial para ella, por la cual podría morir, y lo haría.

...Gracias...