DECLAIMER: How to your train dragon no me pertenece los derechos se los dejó a sus respectivos autores, DreamWorks o Crecida Cowell.
AVISO:Este fic participa en el Mini-Reto Especial "Hiccup Haddock" del foro La Academia de Dragones.
PALABRAS: 482 (poquito)
Se me ocurrió hacer un pequeño, muy pequeño oneshort de ellos, claro después de estar escuchando la canción "Where no one goes" mil veces, tenía que homenajearlo y que mejor que por el cumple de mi Hiccup, *ejem*, digo para Hiccup Horrendo Abadejo III.
Y si vamos donde nadie va
"Volar es libertad"
"Volar es alegría"
"Volar es adrenalina"
"Volar es paz"
En las afueras de Berk, en uno de los últimos riscos que en sus aventuras encontraron, dos par de almas se preparaban para vivir una de las experiencias más increíbles, que juntos tuvieron la fortuna de conocer.
El sonido de los tambores revoloteando en sus corazones preparados para lo que están seguros los harán muy felices, un jinete pelirrojo y un dragón chimuelo, se preparan para dar el salto al vacío.
-¿Estás listo amigo? - pregunto el jinete, ajustándose el casco, a su compañero de vuelo.
El dragón con la mirada acusadora y la cara contorneada todavía en duda no estaba de acuerdo con las ocurrencias de su jinete, aunque en su interior este gritando de emoción, siempre está el lado protector y la seguridad de su jinete se convirtió en lo más importante.
-Chimuelo, no pasara nada – solo eso era necesario para que aceptara, jamás podría negarse.
Un humano con traje de dragón en un acantilado en la nada y un dragón real.
-¡Bien!, ¡Listo!, ¡Salta!...
En caída libre se lanzaron los dos amigos, el miedo se convirtió en su amigo con el tiempo que estuvieron, el viento fue su compañera y en sus corazones en el límite de la garganta deseando liberar todas la emociones que amenazaban con convertirse en gritos de júbilo.
*
-¡Chimuelo!
Una sonrisa chimuelada con la lengua afuera y unos ojos verdes, la compañía perfecta. El réptil se preparó para la señal de su jinete y este tiro de las correas de sus alas retractiles.
Dos figuras majestuosas se presenciaban en el cielo. El jinete presiono un botón que desplegaba una cresta que era utilizada para cortar el viento y dar más precisión, el réptil entendió la señal y disparo bolas de plasma en la dirección del jinete, manteniendo una distancia para no lastimarlo y que sirviera de impulso para mantenerlo en el aire.
-¡Esto es increíble!
*
La libertad se volvió en vida y esa vida no lo podrían comparar con nada, en el cielo no había prejuicios, problemas o guerras, solo armonía. Los dioses los unieron por muchos propósitos: Liberar a los dragones, enseñar a los humanos, dar paz en el mundo, pero sobre todo ser amigos.
Podrían viajar por todo el archipiélago y más allá sin importar cuanto tomara si se los permitiera irían donde nadie va…
*
- Ahora no es tan increíble.
-¡CHIMUELO!
Un ligero cambio de planes perjudico su vuelo, una montaña se encontró justo en medio de su camino y ellos aún no perfeccionando la técnica de aterrizar cayeron bruscamente en la tierra.
-¡SI!, viste amigo esta vez no rompí el traje, estamos progresando.
El dragón solo lo vio con cara de pocos amigos para después golpearlo con la cola en la cara. Sin duda volar seria siempre su mejor aventura, a pesar de los contratiempos. No todo es perfecto.
Estuvo bonito a que no. *-*
No se olviden darse un paseíto por el foro esta muy chido.
