Todo los derechos de Naruto le pertenecen a su respectivo creador Masashi Kishimoto todo lo escrito fue hecho con el fin de entretener
Capitulo: 1 Levantado cimientos.
Konoha: barrios bajos
Una multitud de iracunda de aproximadamente de veintidós aldeanos comunes armados con palo, piedras y tridentes iban de un lado a otro registrando los callejones y cualquier posible escondite. En sus rostros se podía ver la ira y frustración de no hallar aquello que con tanto empeño buscaban, al rededor los poco Chunin que estaban en los tejados solo observaban con miradas frías en sus rostros y leves sonrisas esperaban atentamente como si fueran hienas a que los aldeanos dieran inicio a lo que para sus mentes era toda una función.
- Donde rayos esta?! - dijo uno de los aldeanos.
- Debemos acabar lo que el cuarto empezó -
- Ese demonio va pagar caro! -
- Calmense! - ordeno el que parecía ser el líder del grupo. Un hombre de no mas de veintisiete o treinta años de edad de estatura media de cabello negro, cuerpo fornido, junto a una mirada seria y molesta, lo mas llamativo eran las cicatrices en su rostro comenzando en el medio de su frente recorriendo toda la parte derecha de su cara, bajando hasta donde dejara ver su ropa la cual consta de un un modesto yukata de color azul, pantalones negro y sandalias Ninja -No pudo haber ido lejos separense, si uno lo encuentra llame a los demás, por ningún motivo lo dejen escapar! -
Todos los presentes acataron dichas ordenes, luego de no mas de quince minuto uno de los perseguidores llegaba corriendo hacia su líder llamando su atención al gritar su nombre.
- Kaizo!... Kaizo lo encontramos... nosotros... lo encontramos - dijo entre jadeos, sudor y una herida en su ceja izquierda paro en seco delante del recién identificado líder y los demás.
- Donde esta? - dijo Kaizo examinado al recién llegado notando la herida y el Hilo de sangre caer por su ojo - Que fue lo que paso? -
- Lo encontramos a dos cuadras de aquí, cuando lo tenia me lanzo una piedra - hablo en tono de molestia - El que estaba conmigo se quedo para atraparlo -
- Bien guianos - hablo mientras alzaba en alto su arma- Hay que acabar con el demonio, todos vamos!- los demás hicieron los mismo en señal de aprobación -"Pronto me vengare por lo que me hiciste a mi y mis compañeros maldito Kyubi." -
No muy lejos de allí se podía escuchar el rápido andar de una persona mas especifico de un niño de no mas de siete o seis años de edad de cabello dorado, con ojos tan azules como el mar y curiosas marcas en sus mejillas, vestía una camiseta de color blanco un pantalón que llegaba hasta las rodillas y unas sandalias azules ya gastadas, toda su ropa estaba algo rasgada, sucia y manchada por la sangre proveniente de los cortes y raspones de sus brazos y piernas.
En su rostro se notaban tres cosas las lágrimas de miedo de lo podría suceder si lo hallaban, el cansancio y sobre todo la tristeza en su mirada. Mientras corria solo tenia un pensamiento en su mente- "Porque me odian tanto?" - iba lo mas que podía pero ya no aguantaba mas.
Ya escuchaba los pasos de uno de los que lo habían encontrado a duras penas se escapo del agarre del que lo atrapo, sabia muy bien que pasaría si lo encontraban lo había aprendido de las ocasiones anteriores y aparentemente esta vez no vendría nadie para rescatarlo, ya sin opciones decide esconder se entre los botes de basura cubriéndose con las bolsas que estaban a su alrededor en un intento por salvarse. El olor era fétido sumado a la sustancia verdosa que secretaban las bolsas eran realmente asqueroso pero si eso hacia falta para salvarlo lo aceptaría.
El eludido finalmente llego al comienzo del callejón su andar era lento, mientras chocaba el otro extremo de su arma un baston contra la pared provocando un sonido que se acercaba lento pero seguro mas y mas cerca, esto realmente atormentaba al pobre niño. Cuando hizo contacto con el primer bote de basura se tenso, al tocar el segundo comenzó a temblar y sudar a cantaros, al tercero su ya acelerado corazón dejo de latir y no era para mas ya que de los tres botes justo detrás de ese se ocultaba.
Justo empezado a registrar las bolsa de basura ocurrió, un sonido de algo rompiendose sonó al otro extremo del callejón.
- Voy por ti monstruo! - exclamo casi gritan y dibujando una sonrisa digna de un desquiciado mental.
Naruto agradeció mentalmente al causante de dicho ruido por haberlo salvado. Pasaron veinte segundos cuando empezó a concentrarse para sentir los alrededores de la zona, el no entendía como es que tenia este don pero estaba agradecido por tenerlo, gracias a esa habilidad podía sentir las emociones de los a su alcance, el cual era de diez metros a su alrededor, después de unos momentos pudo darse cuenta que solo el y esa persona, estaban allí mas especificamente a unos siete metros arriba del tellado se encontraba aquel Anbu de cabellos plateados y con mascara de perro el que supuestamente debía cuidarlo, no lo veía pero si lo sentía. El era distinto a los demás la tristeza, la nostalgia y el remordimiento de algo dolorosa estos sentimientos eran dominantes en el aun así el desprecio que le tenia era el suficiente para dejarlo a su suerte, pero no era como los demás aldeanos que sentían solo puro odio e ira en su contra.
Al no sentir a nadie mas decide salir de su escondite y correr lo mas que podía en dirección contraria a la de anterior perseguidor, casi llegando al final de ese callejón justo en la parte en donde se divide en cuatro direcciones sintió algo que le heló la sangre, doblando la esquina estaba la multitud de aldeanos que lo perseguía, peor aun estaba la persona que le causaba pesadillas y no le dejaba tener tranquilidad por miedo a que fuera a aparecer.
- K-Kai... Kaizo - susurro con mucho miedo y no era para mas de todos el era el que se esmeraba mas en hacelo sufrir.
No dudo ni un segundo en dar media vuelta para salir corriendo a toda prisa, justo cuando estaba a a medio camino un grito llamo su atención.
- Puedes correr pero no esconderte demonio! -Grito kaizo
Naruto lleno de temor gira un poco su cabeza para ver con el rabillo de su ojo derecho a la multitud y sobre todo a Kaizo quien mostraba una sonrisa siniestra mientras lanzaba un shuriken que logro hacerle un corte en el hombro derecho. El dolor era fuerte lo distraía un poco pero no podía o mejor dicho no debía detenerse siguió corriendo hasta llegar a la esquina para doblar a la izquierda y intentar perderlos o al menos ese era su plan hasta que sintió como se escapaba todo el aire de su pulmones seguido de un fuerte dolor en su estomago, llevo su vista a la causa notando como un bastón de madera se hundía en medio de su abdomen y el responsable era nada menos que el de hace unos momentos.
- Te encontré - logro escuchar antes de caer al piso intentando recobrar el aire perdido. No necesitaba verlos acercar podía escuchar los pasos de aquellos que lo odiaban y lo querían muerto sin razón aparente, dejo de la sus pensamientos cuando el hablo.
- Bien hecho recuerden me invitarles un trago a ti y al otro por encontrarlo- dijo felicitándolos por sus actos - Ahora terminemos con esto de una vez por todas- se acerca al supuesto 'demonio' tomando del cuello y alzándolo como si fuera un trofeo de caza para que los demás lo victorearan cosa que ocurrió -"Este es tu fin Kyubi" - pensó el muy mal nacido.
-yo,yo no hice nada... por favor par..- dijo con dificultad el pequeño que no logro terminar debido a que oyó una voz
-(Paren, detenganse de un vez!)- no estaba seguro pero creyó oírla en su cabeza fue regresado a la realidad cuando Kaizo lo apretó mas fuerte.
- Que no hiciste nada !QUE NO HICISTE NADA! - contrajo mas su mano -Tu eres el responsable de todas esas muertes de nuestros compañeros, de nuestros amigos, de nuestras familiares!.. todo es tu culpa - lo ultimo lo dijo en un tono siniestro que no avecinaba nada bueno al pobre niño, moviendo su mano libre hacia su bolsillo trasero sacando un kunai.
Naruto con la poca fuerza que le quedaba intentaba desesperadamente liberarse sin éxito alguno, fue cuando Kaizo empezó a acercar el kunai en dirección a su pecho que ya no pudo mas y comenzó a gritar a los cuatro vientos pidiendo auxilio a quien sea para que lo salvara sus lágrimas ya mojaba la mano de su agresor. Miro a la multitud que clamaba sangre, a los Chunin que se deleitaban con el espectáculo, a Kaizo que gozaba al verlo en ese estado y por ultimo observo donde sentía a ese Anbu. Todo se estaba volviendo oscuro en el momento en que iva a perder la conciencia escucho de nuevo esa voz, solo que mas clara.
- (Dejen lo en paz, ¡PAREN MALDITOS!) - la voz se oía profunda y molesta, esto logro mantener a Naruto conciente y al vez animarlo a seguir, había alguien que no quería que esto siguiera, alguien en ese lugar que no lo quería muerto.
-Basta, ya basta- dijo el pequeño lo cual solo causo la risa de su agresor. El ambiente se tornaba frío, comenzo sentirse su ira y a todo pulmón grito- ¡PAREEEEEEEEN!-.
El grito causo una onda expansiva de viento junto a un instinto asesino que no sentían desde hace mas de 7 años choco contra la multitud dejándo a todos paralizados y con terror.
NOTA:
Bueno hasta aquí por ahora, por favor dejen su opinión, comentarios o sugerencia y perdón por la mala ortografía es mi primera historia.
Sin mas que decir Drascter se despide.
Hasta luego.
