Disclaimer: Naruto no es mío.

Disclaimer de la Traductora: El fic tampoco es mío, sino de Paige O.o

Fue tan linda que me dejó traducir su nuevo fic al español. El link a su profile pueden encontrarlo en mi profile. Espero que les guste.

Rated T: En caso de lenguaje y violencia que quizás aparezcan.

Summary: Las verdades no son fáciles de aceptar, pero con la vida de Naruto pendiendo de un hilo Sasuke tiene que hacer una decisión rápida –Llevar a Itachi de nuevo a Konoha o matarlo. Mientras tanto Sakura está haciendo todo lo posible para proteger las personas especiales para ella.

Pairing: Sasuke x Sakura. Otros también, pero no estoy decidida todavía.

Advertencia: Spoilers.


Halcyon Redux

Capítulo 1: La resolución de Sakura - ¿¡Naruto ha sido capturado!?


Parada en el exhuberante borde de un denso bosque, Sakura movió su equipaje médico y reajustó la gruesa tira de su mochila. Estaba impaciente y entusiasmada por empezar a viajar en las sombras delante de ella.

El País de la Tierra era conocido por sus grandes extensiones de terreno rocoso e intenso calor, pero Sakura no había esperado que el viaje fuese tan agotador. ¿Quizás se había acostumbrado al clima moderado de Konohagakure? ¿O quizás simplemente era así de caluroso? No podía estar realmente segura, mientras empezaba a encontrar difícil formar pensamientos coherentes mientras sudor se deslizaba por su ceja.

Estirando su cuello y levantando su hombro incómodamente, la pelirrosa se las arregló para limpiarse la frente con la gruesa tira de su camiseta roja.

El latente sol iba lentamente nublando su mente y su instinto médico gritaba '¡GOLPE DE CALOR!'

Ciegamente, Sakura alcanzó la la botella de agua que descansaba en el lateral de su mochila y tomó un rápido sorbo del agua tibia por el sol, deseando que alivie un poco de su creciente incomodidad –sin mencionar sus pensamientos.

Cuando un chorrito de agua decidió deslizarse por su mejilla, la pelirrosa pasó su pulgar por la esquina de su boca. Podría jurar que vio el líquido efervescer y evaporarse frente a sus ojos.

Frunciendo el ceño ante el hecho de que simplemente no podía escapar a la abrasadora temperatura, orbes de un deslucido verde, nublados por el calor derivaron en Pakkun, en esperanzas de que el perrito haya finalmente encontrado el rastro de su objetivo.

Una nariz negra, partida y muy seca –casi como el terreno rocoso que el par había estado recorriendo por los pasados días-, fue alzada en el aire mientras buscaba y así, sus fosas nasales se movieron antes de que moviese su cabeza en otra dirección.

Cada vez que se concentraba en algún punto Sakura encontraría sus esperanzas creciendo, sus pulsaciones incrementando, una sonrisa formándose lentamente con cada segundo que pasaba, sólo para ser decepcionada mientras se movía para investigar otra área.

Era algo agotador.

Harta de la situación, la médica dejó escapar por su garganta un gruñido, para la gran diversión de Pakkun.

-Y yo creí que yo era el- Comenzó a murmurar, pero sus palabras murieron en su garganta sólo para ser reemplazados con el sonido del olfateo.

Sakura se animó con el repentino interés de Pakkun en el gran roble. El perro caminó alrededor del árbol un par de veces, su nariz flameando más rápidamente que antes. Ojos perezosos se entrecerraron mientras que volteaba su cabeza lo mejor que pudo para encontrarse con los orbes verde manzana de Sakura.

-Dame otra bocanada de la escencia de los chicos.

Asintiendo con notable entusiasmo, Sakura dejó el agua de nuevo en su lugar antes de que su mano se aventurara en su mochila médica.

Enredándose en la pequeña bolsa por un momento, dedos finalmente encontraron el frío metal de un hitai-ate. Por supuesto que todavía estaría frío –justo como él, pensó Sakura un poco nostálgica.

Tomándolo, la kunoichi se arrodilló un poco para que Pakkun pudiese tener un buen alcance. No era accidente que lo sostuviese con la placa de metal boca abajo. No necesitaba, ni quería, ver la prueba de la ida de Sasuke de Konoha.

Pakkun levantó su nariz hacia la tela azul marino; un murmullo curioso pasó por su mandíbula canina mientras tomaba otra olida del aire rodeando el gran roble sólo para estar seguros.

-Lo encontré.

Volteándose de la chica, caminó hasta el árbol y puso su pequeña garra en la fría corteza (aunque cómo se las arreglaba para permanecer a semejante temperatura no lo sabía).

-Y el rastro es todavía denso en el aire. Puede que esté cerca.

La pequeña forma de Pakkun se levantó hasta la gruesa rama del árbol con una facilidad innatural, su nariz guiándolo por el denso bosque y hacia Uchiha Sasuke.

Sakura devolvió el hitai-ate a su mochila y la ajustó una vez más. Cerrando los ojos respiró profundamente el húmedo aire que la rodeaba.

Naruto… Sasuke-kun…

La kunoichi abrió sus –ahora enfocados- ojos, y concentró chakra en sus pies. La brisa que sintió cuando saltó hacia el claro cielo azul no fue tan apreciada como lo hubiese sido momentos antes.

Esta vez prometo…

Comprensión de lo que le esperaba en el bosque finalmente se asentó en su mente. Había estado viajando con Pakkun por casi cuatro días ahora, y sabía que su búsqueda eventualmente terminaría, pero no se había permitido pensar en ello –no podía permitirse pensar en ello. Esta misión era demasiado importante como para permitir pequeñeces como los nervios meterse en el camino. Demasiado estaba en juego –todo estaba en juego.

Su pie impactó la rama justo detrás de Pakkun con un golpe seco antes de que empujase hacia delante –indecisión en sus movimientos- hacia Sasuke.

¡Protegeré lo importante!

Saltando detrás de Pakkun, Sakura apretó sus dientes y envió más chakra a sus pies. Se estaba haciendo incómodamente consciente del poco tiempo que le quedaba –que a Naruto le quedaba.

Lágrimas rápidamente se acumularon en sus párpados, pero la kunoichi apretó sus ojos cerrados y meneó la cabeza. Necesitaba seguir concentrada. Apretando sus manos en ajustados puños, Sakura forzó a salir cada pizca de duda e indecisión –era más fuerte que esto.

-¡Espera, Naruto!

Cuatro días y medio antes-

-Atrapado en genjutsu… Akatsuki… Aburame… País de la tierra… Váyanse inmediatamente… mueran.

Sakura estaba parada, su corazón latiendo en un profundo ba-dum, ba-dum contra sus costillas y sonando en sus oídos.

Ojos verde manzana, nublados y sin vida, estaban fijados en alguna terraza indistinta justo arriba del hombro de Tsunade mientras la kunoichi estaba parada rígidamente ante su superior. Podía oír el sonido de su respiración hacerse más alto y alto, pero el ruido alrededor de ella, las palabras de Tsunade, todo se le estaba escapando hasta que sintió como si se estuviese sofocando –el aire alrededor suyo haciéndose grueso y abrumador mientras que pensaba que habría de estar expandiéndose desde dentro, como si estuviese a punto de explotar en una horrible mezvla de sangre y carne.

-No, -finalmente murmuró, ajena a los otros en la habitación. Simplemente estaba hablándose, reasegurándose, mintiéndose-. No.

-¿Sakura? –cuestionó Tsunade, mientras se inclinaba hacia delante, sus ojos entrecerrándose en la rígida forma de su aprendiz-.

Los codos de la Godaime descansaron en su escritorio, sus dedos juntándose para esconder un preocupado ceño fruncido. Orbes del color de la miel fueron hacia Kakashi, que estaba vagamente parado detrás de la chica en pánico.

Huraño en su comportamiento, el único ojo de Kakashi hablaba a montones mientras miraba a los de Tsunade, antes de desviarse hacia abajo para visualizar al carmín cabello a su derecha; los labios de la chica estaban temblando y aferrándose a la histeria –al mantra de 'No. No. ¡No!'

Con un gentil entendimiento, el jounin puso una firme mano en el hombro de su ex estudiante.

Moviéndose al tacto, la cabeza de Sakura giro rápidamente sólo para que sus ojos se concentrasen en el perfil de Kakashi. Su mente colisionó de nuevo con la realidad con un inaudible jadeo mientras su cabeza azotó de nuevo hacia su mentor.

Tsunade captó sus ojos sólo por un momento; sus ojos miel retratando simpatía.

Los otros seis shinobi parados ante el escritorio de la Hokage no reconocieron ni una sola vez el dolor de Sakura. Sin respeto ni entendimiento, la situación fue efectivamente hecha a un lado mientras la voz comandante de Tsunade llenó el cuarto una vez más.

-Como dije, somos afortunados en que un Aburame haya interceptado a los miembros de Akatsuki. Se las arregló para poner un escarabajo en los atacantes antes de que fuese demasiado tarde. Me han asegurado que su compañera, -Tsunade asintió levemente hacia un pequeño contenedor en la esquina de su escritorio, donde el buzz-buzz de las alas del escarabajo macho podía ser oído-, los llevará directamente hacia donde sea que hayan llevado a Naruto.

Tomando un pergamino de misión clase S, Tsunade se lo lanzó a Kakashi.

-Enviaré refuerzos cuando pueda reunirlos. ¿Entendido?

Un simultáneo, '¡Hai!' hizo eco en la habitación antes de que Tsunade asintiese levemente.

-Se irán desde las puertas en una hora. Prepárense, esto no va a ser fácil.

Mientras el Equipo Gai y el Equipo Kakashi –consistiendo en Kakashi, Yamato, Sai y Sakura- se giraron para salir de la oficina, la voz de Tsunade una vez más se dirigió a ellos.

-Kakashi, Sakura –tengo algo más que deseo decirles.

El par se volteó de nuevo; una similar vista de confusión y curiosidad en su rostro. El resto se fue a preparar para la batalla que se avecinaba. Una vez que la puerta fue cerrada, los ojos de Tsunade se hicieron sombríos, -He... Hallado información concerniente a Uchiha Sasuke.

Sakura se enderezó ante la mención del nombre de su ex compañero de equipo, sus ojos ensanchándose antes de nublarse. Su boca estaba partida levemente, pero todas las palabras parecían haber sido robadas de sus labios.

La reacción de Kakashi fue la opuesta. El único ojo del ninja copia se entrecerró, su frente arrugándose en escrutinio. Sólo podía suponer al razonamiento detrás de esta nueva información, y se vio forzado a decir su pregunta en voz alta.

-¿Por qué nos dirías esto ahora?

La Godaime se hizo hacia atrás en su silla, sus hombros cayendo y su rostro tornándose cansado. El agotamiento escondiéndose en la experta shinobi estaba gritando desde los oscuros círculos bajo sus ojos y de alguna manera Sakura y Kakashi sabían que no eran meramente cansancio físico.

-Yo- Luego de enterarme de que Sasuke había vencido a Orochimaru, sabía que era sólo cuestión de tiempo antes de que las cosas comenzaran a moverse. Con la posibilidad inicial de que pudiese ser traído de nuevo a Konoha, decidí que era tiempo de chequear un poco las cosas. Como Hokage, tenía que estar segura de que no estaba poniendo la aldea en peligro –el rostro de Sakura se tornó oscuro y sus ojos acusadores mientras abría la boca para protestar, pero Tsunade devolvió la mirada con una mirada feroz y continuó.

-Tenía que hacerlo. Si te hace sentir mejor, no encontré nada que me llevase a creer que tiene alguna mala voluntad contra Konoha, pero, -la Godaime pausó, apretó sus labios y tomó cuidado extra al elegir palabras-. Sabía vagamente de la Masacre Uchiha, porque pasó mientras no estaba, y mientras estaba mirando en el pasado de Sasuke no es sorprendente que lo haya encontrado digno de chequear. Es, después de todo, la razón debajo de todas sus acciones.

-Pero aparte del reporte inicial, no había nada que mirar. Esto no me caía del todo bien. Había demasiadas preguntas que aparecieron durante mi investigación. ¿Cómo puede ser que cazadores ninjas no hayan sido enviados luego de que la deserción de Itachi para exterminarlo? ¿Cómo un solo hombre asesinó a todo su clan? Y hasta las más simple de las preguntas: ¿Por qué? Itachi fue un prodigio desde joven, atareado e increíblemente leal a la aldea. Simplemente no puedo imaginarme por qué él de repente- de repente explotaría.

-A este punto, ya había expandido mi búsqueda para incluir a Itachi y algunos de los miembros claves del Clan Uchiha. Fue ahí cuando me tropecé en algo que de repente hacía todo claro como el cristal.

Tsunade abrió uno de sus cajones. Su mano pronto salió a la superficie con un archivo marcado como 'CLASIFICADO'. Dejándolo en su escritorio con un plop, la experta médica habló con una pista de repulsión, -Contiene toda la información sobre una de las misiones de Itachi, la eliminación del Clan Uchiha.

Sakura se sintió enferma.

Había llegado a sus propias conclusiones respecto a lo que Tsunade podría posiblemente tener que decirles sobre Sasuke, pero nunca se habría imaginado que Itachi había asesinado toda su familia bajo órdenes.

Le disgustaba.

Mientras las palabras de Tsunade hacían eco en su mente, los músculos de Sakura parecieron evaporarse. Encontraba difícil continuar parada; y todo el color se escurrió de su rsotro.

La kunoichi meneó su cabeza mientras confundidos ojos verdes encontraron los de su mentor, -Pero Sasuke – Itachi él, él puso a Sasuke en el hospital y él – Konoha no es esa clase de aldea. Shishou por favor, no puede ser-

-Te aseguro de que todo lo que les acabo de contar es verdad. Ahora, es un poco más complicado, pero no tengo tiempo para entrar en detalles. Naruto no tiene tiempo. Aún así, tengo… un plan.

Tsunade observó con ojos calculadores cómo Kakashi y Sakura se animaban, curiosidad asomando por sus rostros.

-Estoy asumiendo un montón de cosas en 'quizás', pero si todo va bien podemos rescatar a Naruto, eliminar Akatsuki, e incluso hasta arreglárnoslas para arrastrar a Uchiha Sasuke de nuevo aquí.

Sin pensarlo mucho Sakura preguntó -¿Cómo?-, impaciencia evidente en su tono.

Una sonrisa arrogante se alzó en los labios de la Hokage, -No sabemos hacia dónde Akatsuki esté llevando a Naruto, pero tenemos un modo de seguirlos. Sólo tienen medio día de ventaja, así que si ustedes y el Equipo Gai parten ahora serán capaces de emboscarlos antes de que puedan remover el nueve colas. Esto se encarga de nuestros primeros dos objetivos; bueno, asumiendo que se las arreglen para vencer a Akatsuki.

-Respecto a Uchiha Sasuke, estoy haciendo una gran apuesta. Espero que se esté acercando a su hermano, lo que significa que tendrá que estar cerca a Akatsuki. Quiero que Pakkun tenga su nariz preparada para sentir la escencia de Sasuke. Si encuentra algo, Sakura se separará con él y le dará a Sasuke esto, -Tsunade la dio un pergamino pequeño a su aprendiz-. Debería persuadirlo para lidiar con Akatsuki y hasta volver a Konoha.

La joven kunoichi era una mezcla de excitación y cansancio.

Mordiéndose un labio, trató de no permitir que sus esperanzas crezcan demasiado mientras tomaba el pergamino que le dio Tsunade, pero algo dentro suyo estaba simplemente eufórico.

Realmente podía estar pasando. Todo por lo que ella y Naruto, e incluso Sasuke habían estado trabajando finalmente podía ser alcanzado, pero aceptando que también sabía que esto podía ser el comienzo del fin. Esto realmente era una gran apuesta, pero una que ella estaba más que deseosa de tomar.

Kakashi dudó un momento antes de decir, -¿Estás segura de que es sabio enviar a Sakura sola…?

Tsunade detuvo al ninja copia con un simple movimiento de su mano, como si estuviese dejando de lado todo el asunto, -Hay un razonamiento detrás de enviar a Sakura. Primero, es mejor que Sasuke reciba este mensaje de un compañero y no puedo enviarte a ti porque tu Sharingan será necesario para lidiar con Itachi hasta que Sasuke llegue. Si es que llega, por supuesto, -pausándose, Tsunade miró a Sakura y habló con firme confianza-, Ella estará bien.

El presente-

El rastro de olor había llevado a Sakura y a Pakkun a una pequeña ciudad localizada justo en el otro lado del bosque. Era un centro de viajeros lleno de comercios, bares, y hoteles.

Un buen lugar para reabastecerse de suministros, reflexionó Sakura, preguntándose qué propósito tendría Sasuke en semejante lugar, o buscar información. Pensando en sus ideas, Sakura murmuró, -Tal vez ambos.

Cualquiera sea su razón, la pelirrosa estaba simplemente contenta de que se estuviesen acercando a su ex compañero, impaciencia e incertidumbre llenando sus venas.

Las orejas marrón oscuro de Pakkun se levantaron ante la voz de la kunoichi. -¿Qué fue eso?

Sakura miró al perro ninja y parpadeó.

-¿Hmm? –murmuró antes de decir-, me preguntaba si habías encontrado algo.

Miró a su alrededor a las varias caras sin nombre, de alguna manera esperando ver a Sasuke ahí parado. Sabía que estaba siendo tonta. Era una chance imposible que ella simplemente se lo encuentre.

Siempre fue bueno en evadir.

El pensamiento movió un poco de nostalgia dentro de la médico.

Los ojos de Pakkun se entrecerraron, su nariz flameando, antes de que empezase a cortar por la multitud.

Sakura, quien no podía demasiado bien arreglárselas para moverse en zigzag con toda la gente que había, tuvo un poco más de dificultades en navegar la muchedumbre.

Apenas se las arregló para oír a Pakkun murmurar, -Lo tengo… se está moviendo.

Ojos verdes se ensancharon mientras adrenalina llenó las venas del médico una vez más.


T/N: ¡Estoy tan contenta de tener esto finalmente terminado! Gracias totales a Paige, que me dejó traducir su genial, genial, genial fic. Me encanta. Y es un placer traducirlo. ¡Las actualizaciones serán los miércoles! (Sí, ya sé que hoy es lunes, pero igual.) Tengo ya varios capítulos listos. Nos vemos la próxima semana, gente linda.