Capitulo 1: La Idea.

Tottori es una ciudad que está en la prefectura de Tottori (ahora entiendo de donde viene lo repetitivo xD)en el suroeste de Japón. La distancia entre Tokio y Tottori es de 711 km, algo más de 6 horas en tren.

¿Pero a qué viene todo esto? ¿A quién podría interesarle una información tan irrelevante? Quizás a cierto joven de cabellos alocados podría llegar a interesarle.

-Yagami.

-Yagami,

-Yagami!!.

-Eh…?

-Es tu turno de leer.

-Eh…?.

Desde el asiento de atrás alguien le pico la espalda y le susurró.

-Pagina 23.

-Gracias, te debo una.

-Yagami!!

-Si si, ya voy. La batalla de las termopilas se llevo a cabo en el año 480 a.C, donde una alianza de polis liderada por Esparta y Atenas se unieron para detener el avance del imperio persa de jerjes I.

Riiiing, salvado por la campana.

-No sé que harías sin mí, Yagami.

-Es algo en lo que pienso todos los días, Takenouchi- Las risas no se hicieron esperar, no les importò que fueran el foco de atención y de los chismes de sus compañeros de clase.

-Que. ¿No me digas que este aun sigue distraído?- Sin que ninguno de los dos pudiera verlo venir, Yamato se les acerco.

-Aja, lleva igual dos semanas - Yamato miro a Taichi a los ojos y lo supo todo. Supo que la causa de que su amigo desde los ocho años llevara dos semanas distraído estaba varios kilómetros al suroeste de Tokio, y Taichi al saberse descubierto no le quedo otra que sonrojarse, desviar la mirada y chasquear la lengua.

-Jajaja, deberías verte la cara. – Sora miraba de Yamato a Taichi y viceversa sin entender nada de nada.

-Rayos, olvidaba que venía a decirles que Mimi quiere ir a tomar un helado y quiere que "todos" vayamos.

-Yo voy, ¿Nos acompañas Taichi? Te haría bien salir un rato con nosotros – Como siempre, Sora preocupada por sus amigos.

-No gracias, tengo cosas que hacer. Nos vemos mañana.

-Taichi… este… yo... bueno tu entiendes, si necesitas hablar, sabes dónde encontrarme.- Yamato se veía incomodo, no sabía cómo podría ayudar a su amigo, quizás escucharlo serviría de algo.

-Lo sé Yamato, gracias.

Toc toc, Taichi se había decidido, había una idea que rondaba en su mente, era una locura, aunque a veces las locuras le daban algo de sentido a la vida. Pero necesitaba hablarla con Yamato antes de llevarla a cabo.

-Taichi… pasa- Mientras tomaban asiento Yamato soltó la bomba.

-Dime una cosa, desde cuando te gusta Mochizuki-san? – A Yagami se le subieron los colores al rostro. Como odiaba que Yamato fuera tan directo para algunas cosas.

-QUE!? Y-Yo n-no he dicho eso!!. A mi n-no me gusta Meiko-chan.

-¿Meiko-chan? – La sonrisa picara de Yamato hizo que Taichi tuviera deseos de golpearlo.

-A mi no me gusta ella. Me agrada, eso es todo. – Mantener la mentira hasta el final, siempre.

-¿Y para eso viniste? Para negar lo innegable. No seas idiota. Sé que tienes algo en mente, por algo estas aquí, ¿no? – Taichi suspiro, quizás era el momento de contarle su idea.

-La próxima semana empiezan las vacaciones de verano, ¿cierto? – Yamato lo miro desconcertado ¿Qué rayos tenía que ver Mochizuki-san con las vacaciones de verano? Espera… no, no, es imposible que este idiota haya pensado en…

-Quiero ir a Tottori.