~o.O Capitulo 1 O.o~

Conozcamos a las chicas y a los chicos


Nota de la sensual Autora FloorVioleetta: "Hola lectores, este es el primer capítulo de esta historia de amor y suspenso, espero sea de su agrado, trabajamos mucho por este proyecto con, a la que considero, mi hermana y una de mis mejores amigas Nini Godoy. Esperamos de verdad sea de su agrado, dejennos su opinion en un review. Disfruten"

Capitulo creado y escrito por FloorVioleetta.


En una casa de Townsville, se podía apreciar como un científico caminaba de un lado a otro. El silencio nocturno reinaba en esa ciudad, y sobre todo en esa morada.
–No puedo entenderlo aún –susurraba –No puedo hallar el motivo de sus cualidades.
El Profesor Utonium se sentó en su escritorio lleno de papeles por doquier, con muchas hipótesis, fórmulas y unos que otros garabatos.
–Es raro… No es normal.
No vivía solo. La casa la compartía con sus tres hijas, que realmente son adoptivas. Si bien, las tres tienen la misma edad, no son como suele esperarse que sean las chicas normales de dieciséis años. No, no lo son. Ni siquiera son humanas, solamente tienen la apariencia.
– ¿Profesor? –llamó una chica rubia de ojos azules vestida con un camisón celeste, despeinada y con los ojos cansados – ¿No es muy tarde para que siga despierto?
–Tranquila Bubbles –sonrió –Ya me iré a dormir, no te preocupes. Sube a tu habitación con tus hermanas.
Asintió con la cabeza y subió las escaleras hasta ingresar a la habitación.
–Creo que deberé iniciar nuevamente la investigación.
Bubbles, Blossom y Buttercup son alumnas de la preparatoria de Townsville, tienen quince años y solamente dos amigos en toda la escuela, llamados Robin y Mitch.
Todas las mañanas, después del desayuno, Robin, una chica de cabello castaño y ojos azules, toca la puerta de la residencia Utonium para irse junto a las chicas y pasar a buscar a Mitch, un chico de cabello castaño y ojos miel.
–Y bueno Robin –decía Blossom mientras caminaban a la escuela –Cuéntanos, ¿Qué cosa fue lo que te dijo esa chica Princesa ayer?
–Bueno, lo de siempre, ya sabes –dijo Robin encogiéndose de hombros –Dijo que si no le hacíamos su tarea Mitch y yo, su padre pagaría para que nos expulsaran de la escuela.
–Es una estúpida –dijo Buttercup –Me sorprende que aun con sus malas calificaciones siga en la preparatoria.
–Que no te sorprenda –dijo Mitch –Es normal en ella, tiene un poder que pocos tienen… ¡El poder del dinero!
Rieron ante el comentario de Mitch, al llegar a la escuela fueron directamente a su salón, Blossom y Bubbles se sentaban juntas, Buttercup y Robin y Mitch estaba en el puesto frente a la maestra porque era de los chicos que provocaban desorden.
–Mira quiénes vienen ahí –dijo Bubbles a Blossom señalando a Princesa, Bell y Bunny.
Esas tres chicas, eran, por así decirlo, las enemigas de las hermanas Utonium, aunque Princesa se dedicaba a torturar más a Robin y a Mitch, ella odiaba profundamente a Blossom, por el hecho de que la pelirroja no quiso hacerle la tarea, un motivo muy infantil, pero viniendo de esa chica no es extraño. Bell, en cambio, odiaba a Buttercup porque la azabache no la aludió un día que ella fue a la escuela con un vestido lleno de destellos, y Bunny odiaba a Bubbles porque resultó ser más dulce. Son escusas patéticas, pero esas tres chicas están completamente locas, porque las hermanas Utonium no son las chicas más llamativas de la escuela, pero ese trío de malvadas las sentían como una amenaza.
–Plagas –musitó Blossom –Que asco, nos pegarán los gérmenes si no nos alejamos.
Robin rió suave ante el comentario de su amiga pelirroja, por lo que decidieron ignorar a tales chicas.
Se fueron a la clase, las hermanas Utonium iban en la misma clase, pero Robin y Mitch iban en otra, por lo que se juntarían en el descanso.
–Estuvo muy interesante la clase –comentó Bubbles.
–Sí –dijo Buttercup –La Primera Guerra mundial es siempre interesante.
– ¡Chicas! Ahí están –dijo Robin.
– ¿Qué pasa, Robin? –preguntó Blossom.
– ¿Alguna de ustedes me puede acompañar a la tienda de bicicletas?
–Yo puedo –dijo Bubbles –Justo tenía que ir, la campana de mi bicicleta está fallando y necesito una nueva.
–Genial –dijo Robin.
En una casa, ubicada en la lejanía de la ciudad, vivía un señor muy barbón y ojeroso llamado Mojo Jojo, que tenía tres hijos, llamados Brick, Butch y Boomer. La madre de estos chicos murió en el parto, es que tener trillizos le jugó una mala pasada.
Los chicos tenían diecinueve años, cada uno con una carrera iniciada en la universidad, sin embargo tenían trabajos de medio tiempo. Digamos que no lograron ingresar a la Universidad más prestigiada de Townsville por sus increíbles notas. No, en realidad era por un pequeño poder que tenía su padre, el dinero.
Brick, el mayor, trabajaba como carnicero de lunes a viernes desde las cuatro hasta las ocho de la noche, pero en ese lapsus también acudía al lugar de las provisiones para pasar un buen rato con alguna de sus compañeras. Butch siempre le recordaba que llegaba con olor a carne.
Butch, el del medio, trabajaba como mecánico, pero también ocupaba ese mismo garaje como un lugar para poder acostarse con alguna chica. A diferencia de su hermano, si bien trabajaba de lunes a viernes, salía una hora antes que Brick.
Boomer, el menor, daba clases de karate desde las cinco hasta las siete, pero siempre salía del lugar del entrenamiento una hora más tarde, no hay que explicar los motivos, el chico no era completamente un santo.
Cada vez que llegaban a casa luego de sus trabajos, llegaban a dormir, no solían convivir con su padre porque él también era un hombre de negocios muy ocupado.
El primero en llegar a casa era siempre Butch, pero ese día tuvo que ir a dejar un encargo al otro extremo de la ciudad, por lo que tuvo que pasar por muchos lugares, uno de ellos, la escuela en donde solía estudiar. No le molestaba el hecho de haber estudiado ahí, lo que le molestaba era el hecho de que tenía que pasar por la casa de Bell, una chica que vivía por las cercanías de la escuela, y esa chica era una completa acosadora.
Luego de haber dejado el paquete en la oficina de su padre, se dispuso de camino a casa. Su día estaba muy agotado.
Caminaba con las manos en los bolsillos de su polerón, tenía una mirada perdida, estaba a menos de medio metro del semáforo cuando ve que una chica rubia estaba cruzando la calle con muchas bolsas en sus manos, su mirada se dirige rápidamente hacia la calle, un auto venía a toda velocidad y la chica cruzaba sin percatarse.
–No va parar –dijo Butch mirando al auto.
Apretó los labios y corrió hasta donde estaba la chica, la tomó en sus brazos y afortunadamente cruzó hasta el otro lado de la acera, si la hubiera dejado sola, la chica estaría muerta.
La respiración de ambos estaba agitada, Butch seguía mirando la calle asustado, luego miró a la rubia que tenía en sus brazos para dejarla suavemente en el piso.
–Gracias –dijo la rubia con dificultad.
–No fue molestia –dijo Butch con su eventual tono de seriedad.
–Mi nombre es Bubbles –lo miró alegre.
–Soy Butch.-


: Espero que les haya gustado el capitulo, en serio. Este es un proyecto mio y de mi adorada y sensual hermana mayor, FloorVioleetta. Aclaro algo. Esta es una historia de romance entre contrapartes. Nos parecio que lo mejor era aclararlo ya que en e incidente de Bubbles y Butch, se podia confundir las cosas. Jajaja Gracias por darse tiempo y leer esta historia, les aseguro, no se arrepentiran.

Se despide sus servidoras. Nini y FloorVioleetta.

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