Disclaimer: Little Witch Academia le pertenece a Trigger y a Yoh Yoshinari.

Summary: Akko es la chica eternamente enamorada de la magia.

Pareja: Sucy Manbavaran/Atsuko "Akko" Kagari.

Advertencia: Posible OoC. Situado en algún lugar de la línea temporal del anime


Every little thing she does is magic


Es más o menos así:

Akko es la chica eternamente enamorada de la magia que trae sus sentimientos a flor de piel y su entusiasmo pintado en la sonrisa multicolor. Ella que ve al mundo con ojos brillantes, optimista incurable, y que no se rinde ni ante las burlas de Hannah y Barbara o los comentarios de Diana. Incluso cuando su propia magia no le basta para volar ella encuentra la forma de seguir adelante en su búsqueda por cumplir sus sueños, aquellos influenciados por la figura enigmática de una bruja de su infancia que le cambiaría la vida tal vez sin saberlo. Akko tan cálida, tan escandalosa, tan infantil; es una de esas personas que es imposible que lleguen a pasar desapercibidas al ojo ajeno, siempre llamando la atención y dejando un impacto en otros, ya fuera positivo o negativo. Akko que arrastra, a veces egoístamente, a los demás en aventuras insospechadas; todo porque es demasiado impaciente. Akko que, pese a sus palabras a veces mordaces y a las veces en que la usa descaradamente como conejillo de indias, sigue considerándola su amiga, sigue estando dispuesta a pasar por la situación más disparatada de su vida para traerla de vuelta de un sueño que parecía eterno, sigue sonriéndole y aceptándola y queriéndola.

Es que Sucy se refugia entre sus hongos y tiene veneno corriéndole por las venas, ella a veces un poco demasiado sombría y sardónica— científica loca en el cuerpo de una bruja adolescente. Y si se encuentra de repente observando a la castaña de reojo con demasiada frecuencia entonces trata de tragarse esos sentimientos tan molestos, más resulta que hacerlo no es tan sencillo. Que todo es culpa de Akko que tiene que ser tan malditamente vistosa y hacer todo a su alrededor tan divertido, se le vuelve imposible incluso impedir que su corazón se salte un latido de vez en cuando ante ella, por más que lo enmascare en una mueca neutral. Ella y su sonrisa veraniega y su cabello de otoño y el recuerdo de un beso que no fue y de aquel cariño en pleno desarrollo traducido en la forma de una ella más pequeña y dulce, más inocente, entregándole flores con una timidez que casi antinatural en su persona.

Akko no se percata de nada, vaya novedad. Sin embargo— si en cambio es Sucy quien la nota observarla con, oh, tanto cariño pintado en las pupilas —uno distinto al que dedica al resto de sus amigas e incluso a Lotte—; entonces ella sólo alza una ceja y permite que sus labios pálidos se curven apenas en el fantasma de una sonrisa, que se ensancha sólo un poquito y de forma ligeramente burlona al ver las mejillas de Akko colorearse como con acuarelas, en un rojo tan vivo y sobresaltante como todo su ser. Casi hasta podría reírse, burlarse (cariñosamente) de ella otro poco; que Akko siempre es tan lanzada a actuar antes de pensar y pese a eso— Ahora es ella que la mira con el corazón entre las manos y las palabras dulzonas atoradas entre sus labios de durazno que (en el fondo) nacieron para pronunciar hechizos ancestrales.

Resulta que Akko es la chica de sonrisa multicolor, eternamente enamorada de la magia— pero su corazón también tiene espacio para otras cosas, incluso si sigue siendo tan torpe e intrépida, incluso si le queda tanto por aprender de la vida. Empero, al final no importante demasiado porque es exactamente eso lo que la vuelve tan divertida (lo que la ha hecho caer por ella en más de un sentido, incluso si no lo dice en voz alta.)

Y es cuando sus manos se rozan, silenciosas y afables, que no tarda en darse cuenta también—

(Akko es la magia misma.)