¿De donde ha salido esto?No tengo la menor idea(probablemente,de un dolor de cabeza insoportable tras horas aguantando gritos de mis primas).¿Por que no lo h clasificado en parejas como siempre?Leed y lo entenderéis.Lo de siempre:los personajes pertenecen a JKRowling,pero no todos.Disfrutad de la lectura y reíros un rato con mis locuras!!!
-¡¡¡BLACK¡Vas a morir!
El joven Black se giró, ocultando su terror tras una sonrisa arrogante y seductora. Hacia él venía una bella chica de su edad, que lo miraba a través de unos ojos verdes que brillaban con furia descontrolada.
-¡Oliva, querida¿Que te trae por aquí¿Vienes a buscar este magnífico cuerpo? Tranquila, te haré un favor.
Lo ojos de la Gryffindor, literalmente, podrían haber pasado por fuegos verdes, de esos legendarios que hacían los magos poderosos en la antigüedad. Odiaba a ese chico. Siempre se había sentido muy orgullosa de su capacidad para mantener la calma, y sus ojos verdes eran, según su padre, la cosa más hermosa del mundo, y algo de lo que sentirse muy orgullosa. Sin embargo, ese niñato unineuronal tenía la enervante habilidad de hacerla perder la clama. Siempre que la veía, en vez de llamarla por su nombre o su apellido (algo estúpido, pero en fin), la llamaba Oliva, para hacerla rabiar. En primer lugar, porque dejaba en ridículo sus adorados ojos verdes y, en segundo, porque sabía que odiaba con toda su alma las aceitunas.
Lo iba a matar. Lenta, tortuosa y dolorosamente. Luego ya hablaría con quien fuera para no ir a Azkaban (nunca la había visto, pero le habían comentado que era horrible)
-No sé cómo tu familia te aguanta. Eres el ser mas horrible y despreciable que hay sobre la tierra. ¡¿¡¿Cómo has podido hacerle eso a mi gato, idiota?!?!
-¿Esa mata de pelo?-el joven de ojos claros hizo un gesto despectivo, sólo para aumentar más aún la ira de la chica.-Seguro que se recuperará. Es igualito que su dueña. ¿No has oído ese refrán muggle? "Mala hierba nunca muere".
Sonrió. Esa vez no había sido intencionado, pero estaba seguro de que ese comentario inconsciente ayudaría a que la joven se enfadase más. Su amigo Potter tenía razón: cuando se enfadaba era mucho mejor.
-Black. Te juro que te vas a arrepentir, y no va a haber profesor, familia o amigos que te salven. Eres Black a la carbonara.
Antes de que el joven pudiera responder, dos hombres bastante altos y guapos se acercaron a la pareja, mirándolos con curiosidad.
-¿Qué ocurre?
-Nada, no te preocupes.
La joven, contra todo pronóstico (tras el espectáculo que acababa de dar), habló con extrema dulzura y tranquilidad a uno de los hombres, que babeaba con la muchacha.
-Por favor, chicos, no quiero problemas. Portaos bien¿vale?
-Vale.
Obviamente, la entonación de ambos adolescentes era totalmente distinta. Al verse satisfecho, el hombre dio un beso a la chica y ambos se alejaron, en dirección al despacho del director. Cuando el adulto se distrajo un segundo, la joven se dio la vuelta y, pasándose el dedo pulgar por le cuello en señal de amenaza, vocalizó algo que podría entenderse como "Black, si te pillo, juro que los boggarts se convertirán en mi cuando te vean".
Atrás, quedaban el otro adulto y el joven Black, que sonreía satisfecho bajo la mirada interrogante del hombre. Finalmente, se decidió a preguntar.
-Leo, hijo¿que es lo que le has hecho a la pequeña Rose? No quiero problemas con Harry y James.
-Nada, papá. Es sólo que es muy divertido ver la cara de furia de la pequeñaja Potter cuando le gasto alguna inocente broma.
Sirius Black suspiró resignado, mientras veía a su hijo irse silbando en dirección a buscar a su amigo Harry.
A Minerva y a Lily les podía dar algo cuando se enterasen de que Black y Potter iban a terminar unidos, más literalmente que nunca.
Eso quería verlo él en primera fila.