Prólogo.- Un dilema.
Ha pasado casi un año desde el incidente en la aldea de Halloween. Por ahora todo se encuentra en calma, excepto en la casa de los Skellington, donde Jack y sus amigos se han estado reuniendo para buscar una escuela donde sus hijos puedan mejorar sus habilidades.
- Ya tienen una idea? - Preguntó un fastidiado Jack Skellington.
- No. - Respondieron sus amigos.
Nuestros héroes llevan más de dos meses sin hallar un sólo instituto que les guste, lo cuál ha preocupado a sus familias, en especial a los Mini-Héroes, quienes les han dicho que no importa realmente dónde estudien, mientras estén juntos en la secundaria, ellos estarán bien y contentos.
Por otro lado, los Mini-Héroes ahora están jugando soccer en el cementerio, lo cual tienen prohibido pero nunca hacen caso.
- Creen que ya deberíamos preocuparnos por nuestros padres? - Preguntó Laura, quien estaba de portera.
- Nah, yo digo que mejor te concentres en evitar que este balón entre en tu portería, Laurita. - Respondió Jiraiya mientras corría a intentar anotar un gol.
- ¡Ja! No me hagas reír Jir, tú no podrías anotarle ni a Luis Michel. - Dijo Laura en un tono de burla.
- ¿Y quién demontres es ese? - Preguntó James mientras cubría a Jiraiya, para evitar que éste pasara.
- El portero de un equipo mexicano malísimo llamado las "Chivas de Guadalajara".
Jiraiya pateó el balón con gran fuerza, pero no con la suficiente para que Laura no pudiera pararlo.
- ¡Ja! Pueden llamarme "Laura Campos" - Soltó Laura en un tono de socarronería.
- ¿Por qué haríamos eso? - Preguntó Albus.
- Porque así se llama el mejor portero en la historia de México, su nombre es Jorge Campos.
- Podrías dejar de usar como ejemplo a personas que no conocemos? - Pidió Jack Jr.
Laura le lanzó una fría mirada mientras sostenía el balón en sus manos.
De pronto, James chasqueó sus dedos y dijo:
- ¡Lo tengo! Todos podemos ir a Hogwarts!
- ¿Qué es eso? - Preguntó Cameron.
- Es el mejor colegio de magia del mundo. Ahí van todos los magos de Inglaterra a estudiar.
- Un pequeño problema con tu teoría, Jimmy... ¡TODOS NOSOTROS NO VIVIMOS EN INGLATERRA! - Espetó Jiraiya.
- Hum... Quizás nuestros padres puedan ayudar con eso. - Supuso Cameron.
- Ok, vamos. - Dijo Jack Jr.
Los niños corrieron hasta la casa de Jack, donde éste estaba tomando algo de hidromiel con sus amigos, sólo para calmarse un poco.
Cuando los niños entraron sus padres se les quedaron viendo con algo de sorpresa por la velocidad con la que habían entrado.
- ¿Qué pasa? ¿Por qué corren? - Preguntó John.
- Tenemos una idea para ustedes. - Respondió James.
- Y cuál es? - Preguntó Jack.
- Hogwarts. - Respondió James de nuevo.
Harry lo pensó un momento; luego sus ojos se iluminaron en revelación y dijo:
- ¡Es verdad! Podemos convencer a la directora de que les permita, no sólo a ellos, sino también a todos los ni os en el mundo que tengan súper habilidades, ¿no lo creen?
- Es buena idea, Harry, de vez en cuando tienes tus momentos. - Soltó Sly.
Los niños sonrieron, puesto que ahora ellos iban a ir juntos a la escuela, e iban a conocer a otros chicos con poderes y/o habilidades súperhumanas, sin saber que ahora las cosas en Hogwarts iban a cambiar radicalmente, dándoles la oportunidad de tener nueva grandes aventuras que las que ya habían vivido.