Este fic participa en el reto "¡Feliz cumpleaños, Lily!" del foro Amor de Tercera Generación.
Los personajes pertenecen a J. K. Rowling
Lily está en quinto año y ha pasado menos de un mes desde que terminaran las vacaciones. Es treinta y uno de enero y es su cumpleaños.
Pero nada es lo que Lily espera que sea su cumpleaños. Y cuando se dice nada, es nada, nada. Severus anda bastante extraño con ella, y aquel día parece más hostil que de costumbre. Parece que ni siquiera se ha acordado de su cumpleaños.
En clase le han mandado más tarea de la habitual, y para un periodo corto de tiempo que Lily sabía que le obligaría a pasar un largo periodo en la biblioteca. Aquello era inversamente proporcional.
Una breve alegría fue cuando Mary McDonald le dio su regalo de cumpleaños, una hermosa pluma de color roja que tenía un trazo bastante fino, aunque la chica no pudo pasar bastante tiempo con ella por estar castigada a ayudar en la biblioteca por quedarse dormida en clase de Astronomía.
No fue el único regalo que recibió aquel día, mientras estaba en los terrenos realizando los deberes de Herbología que versaban sobre clasificar plantas, Remus Lupin le dejó caer en su regazo un paquete envuelto que resultó ser una Antología de cuentos de autores de la época victoriana que dejó con la boca abierta a la pelirroja y siendo incapaz de reaccionar de otra manera, más que dándole un abrazo al chico
Tras la cena, la cumpleañera fue una de las primeras personas en subir a la Sala Común de Gryffindor, topándose frente a la chimenea con James Potter. No sabía dónde se había metido, pero no le había visto en todo el día. Y nunca se separaba de Black.
-¡Eh, Lily!-Bajaba de su habitación y detuvo a la pelirroja que estaba a punto de subir a la suya.
-¿Qué quieres, Potter?
-Me he enterado que es tu cumpleaños-Más bien tenía que haber dicho "le he sonsacado a Remus que es tu cumpleaños", pero no dijo nada-Ésto es para ti-Del bolsillo del pantalón sacó una cajita negra que Lily cogió con ciertas dudas.
Al abrirla se encontró con un colgante de plata en forma de snitch dorada. Las alas estaban extendidas. Una sencilla nota lo acompañaba todo. "Eres la snitch que guía mi vuelo, sal conmigo, pelirroja"
Y aquel fue el modo en el que James Potter tuvo de decirle a Lily Evans que estaba enamorado de ella.
Quizás lo único que quiero explicar el es comportamiento de Snape. Estamos hablando del quinto año, durante los TIMOS la llamó Sangre sucia, que fue cuando se pelearon. Siempre he pensado que podría guardar eso durante todo el curso, aunque como sentimiento engañoso. Es algo raro.