Hola chicas! Aquí estoy con una nueva idea loca... tranquilas que aun que suba nueva historía, no sígnifica que descuide la otra...Solo es que leyendo unos fics por ahí de Naruto, se me ocurrió la idea de escribir uno donde cuente sus años de soledad. Evidentemente no tiene casi nada que ver con el manga, ya que de esos años, solo han sacado pequeños fragmentos. Aun así, espero que os guste mi idea loca. Nos leemos pronto. Kiss Desam.
Historia registada en Safe Creative. No al plagio.
Sin ti: Sus ojos azules observaban a la gente. Una vez más estaba solo. Una vez más aquel columpio era su único compañero ¿Que había hecho para estar en aquella situación? Naruto jamás entendería el porque. Sin embargo, nunca perdería su sonrisa.
Disclaymer: La historia original de este fic es mio. Los personajes pertenecen a Masashi Kishimoto, el gran creador del manga de Naruto. Otros personajes son de invención mía, así como lugares, armas y otras cosas.
El aire azotaba sus cabellos. El pequeño bebé llacía dormido sobre los brazos de un hombre mayor. El anciano miraba al niño con tristeza. Aquello no debería de haber pasado. No en aquellas circunstancias y de aquella forma. Sarutobi " El tercer Hokage de la villa de Konoha" tendió al niño durante un instante en la cuna donde el cuarto Hokage lo había depositado unos minutos antes.
"Esto no debía haber ocurrido" Pensaba el hombre una vez más.
Giró el rostro al ver al niño dormido. El pequeño bebé dormía sin saber lo que acababa de ocurrir a su alrededor. Una pequeña sonrisa se dibujó en los labios de aquel hombre.
"¿Que has hecho Minato?" Se preguntaba mientras en su retina se grababa aquella imagen debastadora.
El cuarto Hokage de Konoha llacía muerto junto a su esposa. Los dos habían dado su vida por la villa. Sarutobi se acercó a los cuerpos y las lágrimas empezaron a rodar por su rostro. Minato y Kushina estaban unidos. Los dos estaban tumbados a escasos centimetros de la cuna. Los dos llacían en el suelo ensangrentados y con una sonrisa en su rostro.
-¿Sandaime?- Preguntó un ninja acercandose al lugar de los hechos.-¿Que ha ocurrido?
-Estamos de luto.- Dijo el Sondaime sin mirar al ninja.- Hoy a muerto el mejor Hokage de esta villa junto a su esposa. Recoger los cuerpos.
Tras aquellas palabras, el Sandaime, cogió al bebé entre sus brazos y salió de aquella horrible escena. Desde ese mismo intante, tenía una pequeña vida entre sus brazos. Un pequeño trocito del cuarto Hokage. Él debía ser un heroe, así lo quiso su padre. Sarutobi se encerró en la torre de los Hokages. Desde ese día, volvería a asumir el cargo de Sandaime..
El hombre dejó al niño en un pequeño sofá. Tras sentarse a su lado, las lágrimas volvieron a brotar de sus ojos ¿Por qué? Aquella pregunta nunca se borraría de su mente y el cuarto Hokage nunca se borraría de su corazón.
El hombre abrió los ojos alarmado por el llanto de un niño. Se había dormido ¿Cuando? Observó al pequeño y vió sus pequeñas marcas en el rostro. Parecían pequeños bigotes, si, pequeños bigotes de zorro. Lo estrechó entre sus brazos y salió de aquel frío y lugubre despacho. Debía encontrar a alguien que se hiciera cargo del pequeño Naruto.
Una hora más tarde, el tercer Hokage encontró a la persona perfecta. Aquella mujer no sabía nada sobre lo ocurrido aquella noche, sería la idonea para darle un simple biberon a aquel pequeño rubio con bigotes de zorro.
-Necesito que te encargues de este niño.- Le dijo a una sirvienta de su casa.- Volveré a por él al finalizar el día.
-Señor.- La mujer llamó su atención.- ¿Es cierto que anoche murió el Yondaime?- En sus ojos solo había tristeza.
-Solo ocupate de lo que te he dicho.- Contestó Sarutobi sin ánimos.
Tras salir de su casa, fue directo al hospital de la villa. Sabía que allí lo esperaban Minato y Kushina antes de ser enterrados.
