Disclaimer: Los personajes dr Rurouni Kenshin no me pertenecen, más bien son propiedad de Nobuhiro Watsuki.
El trompo.
Aquel día, Kaoru había salido temprano a comprar algunos viveres para su despensa, ya que las provisiones en el dojo comenzaban a disminuir. Naturalmente, Kenshin junto a Kenji se había ofrecido a acompañarla, pero Kaoru insistió en ir sola ya que luego se encontraría con Tae, y realmente pensaba pasar una tarde de chicas con ella.
ㅡAsí ustedes tendrán una tarde de hombres.ㅡ Había dicho Kaoru con una enorme sonrisa mientras colocaba a Kenji en los brazos de su marido.
ㅡ¿Oro?ㅡ Fue todo lo que el ex hitokiri pudo decir en su defensa.
ㅡBueno, me voy ya. Nos vemos más tarde.ㅡ Dijo Kaoru antes de besar a Kenshin en los labios y dar un dulce beso en la frente a Kenji. Luego de eso se dirigió a la salida del dojo y una vez cruzando la puerta se perdió de la vista de Kenshin.
Tardaron unos segundos mirándose confundidos porque todo aquellos había sucedido muy rápido. Kenji fue el primero en reaccionar y comenzó a jalar de un mechón de cabello de su padre como si con ello tratara de decir que había sido su culpa que su madre los haya dejado solos.
ㅡYa voy, ya voy.ㅡ Le respondió Kenshin entre risas mientras lo soltaba y lo dejaba correr y jugar libre por el patio. Mientras tanto Kenshin fue a sentarse en el pasillo exterior mientras disfrutaba la agradable vista de su hijo ir por aquí y por allá corriendo y riendo. En definitiva el haría que su hijo disfrutara de una infancia tranquila y sin apuro, no como tuvo que ser la suya. No, él solo quería la felicidad para su pequeño hijo y su bellísima esposa.
De repente tuvo una idea y de manera rápida fue a su habitación para extraer un pequeño regalo de ahí. Luego de unos cuatos minutos regresó y sonrió al mirar a su hijo intentando atrapar una mariposa. Se dirigió hacía el y lo atrapó en un abrazo. El niño se revolvió mientras reía de las cosquillas que le atacaban gracias a las cuidadosas manos de su padre.
ㅡ¿Me quieres?ㅡCuestionó el mayor una vez el ataque de cosquillas hubiera cesado. En aquellos momentos lo sostenía apaciblemente entre sus brazos.
El pequeño rió traviesamente y negó con la cabeza. Kenshin parpadeó un poco y sonrió.
ㅡLo bueno es que tu mamá si me quiere.ㅡ Expresó.
ㅡNo es cierto.ㅡ Opusó el pequeño con una sonrisa.
ㅡ¿Por qué no?
ㅡPorque ella es mía no tuya.
Kenshin rió ante las ocurrencias del pequeño. Haciéndose el indignado lo bajó con cuidado y dijo:ㅡBueno, me voy. Ya que tú y tu mamá no me quieren, me iré a otro lado donde si me quieran.
Dicho esto salió del dojo quedándose a un lado de la puerta. No pasaron muchos segundos antes de que los pasitos de Kenji se hicieran audibles denotando que planeaba seguirlo para detenerlo. Apenas el pequeño cruzó la puerta Kenshin lo atrapó en un abrazo. El pequeño rió de la sorpresa y se abrazó al cuello de su padre.
ㅡPensé que no me querías.ㅡExpresó Kenshin cargándo al pequeño. El niño rió.
ㅡSí te quiero.
Kenshin sonrió ante esto y besó al pequeño en la frente. Se introdujeron de nuevo en el dojo y dejando a Kenji en el suelo, extrajo de sus ropas un pequeño trompo.
ㅡToma, es tuyo.
ㅡ¿Oro?ㅡ Preguntó el pequeño al notar el regalo. Kenshin lo miró sorprendido pero luego sonrió.ㅡ¡Un trompo! ¡Gracias!
Emocionado tomó el juguete y comenzó a usarlo. Kenshin se quedó contemplándolo y sonrió. Al final la vida había dado giro a un camino lleno de felicidad.
NDA: Estoy escribiendo esto desde mi clase de lingüística. Las exposiciones axabaron una hora y media antes y el maestro ya ni sabe de que hablar. Como sea, tuve ganas de escribir algo tierno sobre la familia Himura. Pido disculpas si los personajes son algo ooc, solo me sabe en las reacciones de los niños y los padres cuando juegan xD
Por lo demás es mi primer fic de RK, escrito en mi imperiosa necesidad de no quedarme dormida. Espero les haya gustado!
