Era un día normal en el instituto de Forks, todo era tranquilo y casi del todo normal ahí. La escuela estaba formada por grupos sociales, estaban los chicos populares, los nerds y hasta el último y el menos importante eran los desadaptados sociales.

Por los pasillos se encontraba un chico de caballera rubia y de ojos azules, su nombre era Jasper whitlock y pertenecía al grupo de los desadaptados sociales, era muy listo y atractivo pero el hecho de que no tenía ningún amigo y su rostro solo se refregaba la tristeza sin mencionar que estaba lleno de cicatrices hizo que muchos de los estudiantes empezaran a divulgar que era un tipo de chico emo.

Todos los chicos hablaban de que habría nuevos alumnos y sobre acerca de una celebración que haría el instituto para darles la bienvenida a los estudiantes de nuevo curso pero a Jasper nada de eso le importaba. El se dirigió rápidamente a su clase de historia que era su clase favorita, tomo asiento en el mismo lugar que siempre esperando que el profesor llegara.

Al llegar el profesor todos tomaron asiento, muchos sin prestar atención a su clase.

Disculpe la tardanza—se escucho una vocecilla tan dulce pero a la vez agitada que resonó en el aula—soy una estudiante nueva, espero ser bien recibida en su clase.

Jasper se quedo absorto al mirar aquella chica de cabellos cortos y de hermosos ojos color miel, era la chica más hermosa que había visto en su corta vida de 18 años.

Por favor pase—le pidió el profesor—sería tan amable de presentarse a la clase.

Encantada—sonrió dulcemente haciendo que el corazón de Jasper palpitara a mil—mi nombre es Mary Alice Cullen pero prefiero que me llamen solamente Alice, tengo 17 años, acabo de mudarme a Forks desde Biloxi junto a mis padres y a mis dos hermanos, me encanta ir de compras, mi color favorito es el morado, amo bailar ballet y hacer nuevos amigos, un gusto en conocerlos espero podernos llevarnos de maravilla.

Gracias por aquella breve presentación, por favor tome asiento—le pidió el profesor y con un ágil andar de bailarina ella se dirigió a un asiento que para la mala suerte de Jasper se encontraba alado suyo.

Hola—Alice le sonrió al notar que él la miraba pero Jasper no le contesto y rápidamente dirigió su mirada a otra parte.

En toda la clase Jasper evitaba mirarla pero se le hacía sumamente difícil, durante la clase el descubrió que era lista por lo que descarto que posiblemente se tratara de otra chica sin cerebro. Al finalizar la clases el tomo sus cosas para dirigirse a su clase mas odiada: Educación física.

Disculpa—lo llamo aquella dulce chica que hacía que su corazón latiese acelerado y no entendía muy bien la razón por la que se sentía así, jamás había experimentado aquella sensación antes—podrías decirme donde queda el gimnasio, se supone que a esta hora me toca educación física.

Claro—Jasper le contesto algo cortante tratando de no mirarla pues de seguro se quedaría embobado a tal belleza—justo ahora me dirijo a ella.

¿Te molestaría si te acompaño? Me pierdo con facilidad—ella rio levemente.

No me molestaría para nada—Jasper comenzó a caminar dejando por un momento a Alice atrás.

Me llamo Alice y ¿tu?—ella trato de entablar una conversación para asa deshacerse del incomodo silencio.

Ya se tu nombre, nos lo dijiste a toda la clase ¿acaso se te olvido?—Jasper se insulto mentalmente, no quería decirle eso pero a lado suyo se sentía nervioso.

Tienes razón—Alice soltó una pequeña risa lo que hizo que Jasper se sorprendiera ¿se estaba riendo después de lo que le dijo? Jasper la miro extrañado.

¿No estás molesta?—le pregunto Jasper deteniéndose,

¿Por qué estaría molesta?—ella le sonrió ampliamente mostrando sus blancos y relucientes dientes.

Por nada…olvídalo—Jasper siguió su camino con ella a su lado hasta que por fin llegaron al gimnasio.

Alice tuvo que ponerse el uniforme que era una playera blanca y un short azul marino. El profesor los hizo correr 5 vueltas seguidas por la culpa de un compañero de clases pero después de eso el peor temor de Jasper era que el profesor formo parejas de dos para que compitieran en una carrera y Jasper estuvo a punto de gritar al darse cuenta de que el profesor le había puesto como pareja a Alice Cullen.

Hola de nuevo—lo saludo Alice con una resplandeciente sonrisa quien estaba a su lado mientras calentaba para pronto comenzar a correr.

Al parecer el mundo me odia—se dijo sí mismo Jasper para sí mismo pero lo lamentablemente Alice lo escucho por lo que lo miro dejando de calentar estuvo a punto de decir algo pero fue interrumpida por el sonido del silbato.

Jasper corrió lo más rápido posible dejando a Alice atrás quien apenas empezaba a correr, pero después de varios minutos después Alice pudo alcanzarlo adelantándose hacia la meta, Jasper se detuvo para verla correr, se veía tan linda.

Buena carrera—Alice le ofreció la mano como un saludo amistoso mientras que su respiración era agitada.

Lo mismo digo, felicidades—Jasper no tomo su mano y se dispuso a marcharse de ahí.

¿Eres acaso uno de eso chicos emos o algo por el estilo?—le pregunto Alice haciendo que Jasper se detuviera.

¿Parezco uno?—le devolvió la pregunta Jasper frunciendo el ceño.

No lo sé—rio levemente Alice—no pareces uno. Eres lindo ¿Cuál es tu nombre?

Jasper no pudo evitar sonrojarse ante las palabras de Alice, ella creía que él era lindo y eso de un modo u otro lo hacía feliz.

Jasper—le contesto el bajando la mirada tímidamente—Jasper Whitlock.

Qué bonito nombre, un gusto en conocerte Jasper Whitlock espero que seamos grandes amigos—Alice tomo sus manos poniéndose de puntitas para depositar un beso en su mejilla—espero verte en la hora del almuerzo.

Jasper se quedo paralizado mientras veía a Alice marcharse, su corazón no dejaba de palpitar rápidamente y sin poder evitarlo llevo una de sus manos a su mejilla donde la tersa mejilla de Alice y sus labios habían tocado su rostro.

Definitivamente esa chica era especial, esperando ansiosamente la hora del almuerzo para verla de nuevo y así escuchar de nuevo su dulce voz.