Digion ni sus personajes me pertenecen.

Dedicado a La Embajadora Mimato y a su séquito fantastico del foro Proyecto 1-8; topic Mimato.

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Marcándole el ritmo.

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Lo noté un día en la playa. Vaya si me cabreé cuando pensé que coqueteaba con otros. Normalmente no soy un chico celoso y menos posesivo con mis novias. Bah, no "novias", novia. Mimi. No puedo ser celoso con ella, pero a veces es imposible. Mimi es una mujer hermosa y sumamente extrovertida. Lo que para ella es un simple coqueteo («porque las mujeres deben ser coquetas siempre») para mí significa momentos de inseguridad. Me repito: no soy celoso, tampoco inseguro... con Mimi... No soy como acostumbro a ser.

No hablaré de cómo soy (o no soy) al lado de Mimi, sino del descubrimiento que presencié ese día en la playa. Mi-rin lucía su traje de baño de dos piezas, el bikini más provocativo del mundo una vez cubrió partes de su cuerpo: Todo lo hace lucir. Tampoco hablaré de lo sexy que es mi chica, eso es algo que solo el tonto de Taichi haría: presumir de su novia, como si no hubiesen chicos pendientes de Sora. Mimi caminaba por la arena pálida, un par de gafas de sol, la pamela de ala gigante y sus curvas de mujer siendo lo mejor de la vista. Se acerba a mí después de haber ido por un helado. Varios chicos no apartaron sus ojos de ella. La espera me mataba. ¡Por qué rayos la miraban! El lobo salvaje dentro de mí quería salir y devorarlos de una mordida.

Pero alguien encendió el reproductor de su auto y lo puso a todo volumen. Blame se escuchaba a través de los altavoces y las caderas de Mimi ganaban mayor movimiento, mucho más marcado del acostumbrado. Todo su cuerpo reaccionando, como si caminara sobre una pasarela y no por la arena caliente de la playa: de espalda recta, el cabello siendo mecido por su propio caminar y sus curvas marcándose con casa paso firme que daba. Seguía el ritmo de la canción. Solo le faltó girar sobre sus propios pies y seguir caminando con su sonrisa despampanante.

Tragué pesado. ¿Estaba coqueteandole a los babosos que la miraban? ¡¿Por qué se exhibía tanto?

Tan pronto llegó debajo de la sombrilla besó mis labios y pude calmarme, solo que seguía sin comprender por qué les modelaba a esos chicos encuerados.

Sin embargo, el hallazgo llegó cuando caminamos por el centro de la ciudad. Mimi miraba los anaqueles del algunas tiendas, tomaba de mi brazo y actuaba normal con su notable entusiasmo extrovertido.

Todo iba bien durante la tan soleada tarde, hasta que me pidió un poco de dinero para comprar una botella de agua. Camino a la tienda, de nuevo la música a todo volumen. Mimi moviendo la alargada cabellera, taconeando sus altos zapatos de aguja, meneando las nalgas al ritmo de la melodía de la canción.

Tyra Banks se quedaría loca con el movimiento de sus caderas —ni mierdas sé cómo sé tanto de top models.

Entonces lo supe. Cuando la vi caminar de regreso a mí. No es como si Mimi intentara provocar a los otros tipos de alrededor suyo. Mimi es una diva, que cuando escucha una música con buen ritmo, desfila como si estuviese en un evento de moda en Milán. Lo lleva en la sangre. Ella no necesita llamar la atención. Lo sabe. Pero está en sus génes llamarla. Tampoco me preocupa, siempre y cuando sea a mí al que al final de día elija. No importa qué tan alocada y diferente sea mi chica, de hoy en adelante, buscaré marcarle el ritmo para que se luzca.

Fin.

03/08/16

¡Perdón por OoC! ja, ja, ja. Lo siento tanto. El otro día me di cuenta que cuando escucho música a todo volumen en la calle, algo dentro de mí hace que la sangre burbujee y quiera moverme con estilo. Já. Perdón por utilizar a Mimi para esto, pero es que me pudo más.

Saludos.