Advertencias: What if, OOC.

Resumen: Y si Sho y Kyoko nunca hubiesen ido a Tokio.

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Extraños

La distancia crece, lo sabe, ya no le preocupa como solía hacerlo.

Se sienta allí deseando que le importara, pero incluso las fuerzas para desear le fallan.

¿Cómo sucedió? ¿Cuándo ser la señora Fuwa dejó de ser motivo de felicidad?

Ah, seguramente con cada desplante, cada cena guardada en el refrigerador, con los no puedo, con los "la próxima vez" que nunca llegan, cuando no escuchaba su voz y al final se hace tan pequeña que ahoga.

Así empieza, dejas de esperar, luego dejas de creer, y luego llega la indiferencia. Si llega o no llega, si lo recuerda o no, ya no importa, porque al final son poco más que dos extraños viviendo bajo el mismo techo, compartiendo la misma cama.

Envuelve su cuerpo en la sábana de hotel, sus ojos se clavan en el hafu* rubio de ojos verdes que duerme entre el resto de sábanas revueltas. Una risa agridulce surge de su pecho. Ese debería ser el extraño, ese con él que se va a la cama cada par de semanas, con el que toma un ocasional café, ese que le arranca las risas largamente perdidas, ese que la ve y la escucha, pero no, él no es el extraño, el extraño es ese que habita en su casa, ese que de a poco salió del lugar que ocupaba en su corazón.


NA. Hafu: Es usado en Japón para referirse a alguien birracial, quién étnicamente es solo mitad japonés.

Esto lleva meses en mi archivo y no tenía planeado subirlo pero ya estaba escrito, así que qué mas.