Hola, bueno...este es uno de los primero fan fics que escribo, y al parecer...sera por capítulos ^^u tratare de actualizar
por lo menos una vez a la semana y si no lo hago, no me maten T-T) soy nueva en esto. Bueno, basta de hablar!
En primer lugar quiero agradecer a todas las personas que me dieron ánimos para escribir este fic, en especial a
Luu1225, va dedicado a ella este primer capitulo y debo decir que fue la persona que me inspiro para escribir mis propias historias.
Bueno, sin mas que decir les dejo mi primer fan fic, ojala lo sigan y lo disfruten ^^
¿Navidad?
— ¡K-Koujaku! ¿Puedes ayudarme un poco? —Dijo el peliazul mientras sostenía un par de cajas pesadas, los cuales eran paquetes que debía entregar lo más rápido posible.
—En seguida—Contestó el mayor tomando las cajas que sostenía Aoba con dificultad, era un hombre muy fuerte, de eso no había duda alguna, quizá por eso casi todas las chicas iban a cortarse el cabello a su peluquería, aunado también con su carácter y su belleza.
Era un día un tanto extraño. Aoba había recibido más pedidos de lo normal, eso beneficiaba a Haga-san pero aun así, no podía evitar sentirse un tanto extraño por la sobrecarga de trabajo sorpresiva.
— Koujaku—Dijo en un tono un tanto cansado Aoba— ¿No te parece raro que haya recibido muchas llamadas? —Preguntó algo reflexivo acerca de los varios pedidos recibidos.
— ¿Uh? Puede ser…Pero…Hoy es noche buena, así que no es muy raro— El joven mostró una pequeña risa al notar la sorpresa en la cara de su amigo, como era de esperarse de Aoba, el muy despistado olvido que se acercaban las festividades navideñas.
— ¡Cierto! ¡Lo había olvidado! —Murmuró nervioso rascándose la cabeza—Lo siento…—Bajó la cabeza algo arrepentido por su aparente desorientación en fechas.
—No tienes porque disculparte—Dijo riendo el de ojos rojo para luego revolver los cabellos del menor.
— ¡Oye! Deja de hacer eso… ¡Ya no soy un niño! —Exclamó con un tono rosado en sus mejillas Aoba, avergonzado por tal manía de su amigo.
—Pero sigues comportándote como tal—Replicó Koujaku con una sonrisa en su rostro, pero entre ese momento de risas había entrado alguien a la tienda—Al parecer tenemos visitas indeseables…—Mencionó mirando al comprador que acababa de entrar ¿Quién sería para que reaccionara de esa manera el mayor? Bueno…Solo podía ser una persona para que el gentil Koujaku dijera eso.
—Yo…—Saludó en un tono sin emoción como siempre el indeseado—Oh…Estas aquí…—Miró a Koujaku despectivamente al decir eso, cambiando al instante su mirar hacia el trabajador de la tienda—Aoba, avísame cuando este peluquero de tercera se vaya.
— ¡Ah! ¿A quién llamas peluquero de tercera? Mocoso idiota—Gritó Koujaku algo exaltado por cómo le decía el altanero rubio.
—A ti viejo anticuado—Contestó Noiz algo fastidiado por el reproche del peluquero.
—Maníaco de la tecnología—Las miradas de ambos chocaron en ese instante, siguiendo con sus insultos que subían de tono de voz cada vez más hasta llegar al punto de comenzar a corretearse por toda la tienda, ocasionando que todo lo que había en los estantes cayera. Sus peleas eran normales, casi frecuentes por así decirlo. ¿Por qué frecuentes? Bueno, Noiz últimamente salía más seguido y por esas "casualidades" siempre se encontraba con Koujaku en su camino.
— ¡Deténganse! —Gritó Aoba antes de que estos dos se molieran a golpes y de paso, destruyeran toda la tienda, o bueno, lo poco que quedaba de ella.
— ¡Él empezó! –Señalaron ambos con disgusto, matándose con la mirada y gruñendo por lo bajo, quizá hasta unos niños de primaria eran más maduros en ese instante comparado a ese par.
—No me importa quien haya empezado el conflicto, solo no peleen aquí en la tienda…Además... ¿Por qué viniste a la tienda Noiz? Si siempre encargas por envió a domicilio—Apuntó algo desentendido al rubio.
— Tenía ganas –Pronunció aquellas palabras de forma serena, restándole importancia al asunto—Y también porque me dijeron que el envió de las piezas que necesito para reparar un Allmate no se podía hacer el 24 o el 25 de diciembre—Señaló con molestia por no tener sus refacciones a tiempo.
—Claro que no se puede. Cualquiera lo sabe. Bueno…Menos tu y hasta hace unos 10 minutos, Aoba—El peliazul rió un poco al escuchar a su amigo señalarle su desorientación en fechas—Es noche buena y navidad.
El rubio se quedo por un momento en silencio ¿Noche buena? ¿Navidad? No sabía que eran aquellas palabras pronunciadas por Koujaku.
— ¿No tienes idea de lo que son esas festividades? —Miró Koujaku un tanto sorprendido al chico de los piercings al notar que no tenía ni la más remota idea de lo que decía.
— La verdad no… ¿Es algo importante o es solo una cosa para perder el tiempo? —Koujaku suspiró y se rascó la mejilla tratando de pensar en cómo explicarle al rubio tal fecha especial.
—Bueno…La navidad es cuando te reúnes en la casa de alguno de tus familiares o amigos para pasarlo con ellos, compartir, estar juntos y pasarla bien. Hace que te sientas feliz por estar cerca de las personas que mas quieres en tu vida. Además la comida que se comparte en familia y con amigos—El rubio notaba como Koujaku paulatinamente iba bajando el tono de voz cada vez que mencionaba la parte de familia.
A Noiz le pasaba lo mismo pero éste solo lucía indiferencia ante ese tema, odiaba a su familia por lo que le hicieron y juró que nunca más volvería a verlos, por lo menos a sus "padres" si es que así podía llamarles.
— ¡Y no te olvides de los regalos Koujaku! —Exclamó en un tono emocionado Aoba, el cual dirigió para tomar la manga del japonés que comenzaba a lucir un rostro desolado, animándolo al instante con el detalle y desvío del tema.
— ¿Regalos? Entonces la navidad sería algo… ¿Comercial? —Dijo el rubio al escuchar lo que dijo Aoba acerca de los regalos.
—Los regalos se los das al ser querido—Refutó con una sonrisa en su rostro Koujaku. A pesar de su pasado, podía celebrar la navidad con Tae-san y Aoba, justo como cuando eran niños.
—Ya veo...—El rubio miró su coil en busca de más información y leyó algo mas, la "Navidad" era algo que se compartía más con la pareja que con amigos.
—Entonces…Aoba—Mención Koujaku al mirar al mencionado mientras acomodaba las cajas que se cayeron durante su pequeña pelea con Noiz en donde sin querer, destruyeron casi toda la tienda— ¿Qué te parece si esta vez pasamos la navidad en mi casa? —Ofreció al de ojos azules con una sonrisa en su rostro, siempre pasaban la navidad en casa de Tae-san así que cambiar de aires no estaba de más
— ¡Me parece bien! –Exclamó Aoba un tanto emocionado para luego dirigir su mirada hacia el rubio—Noiz ¿Quieres venir con nosotros? —Preguntó con una gran sonrisa en lo que colocaba una ligera caja en los estantes.
El rubio solo se quedo en silencio ante el ofrecimiento. Eso era algo nuevo para él, pasar tiempo con personas en una festividad de la cual recién se había enterado sonaba tentador y raro—Estoy algo ocupado, si es que me queda tiempo libre iré—Se sorprendió un poco al ver la reacción tan positiva de parte Koujaku, quien al parecer no tenía problema alguno, lo que más esperaba era que quizá le aventara la caja o le dijera que todo era una broma.
—Espero que vayas, ¡Sería bueno que pasaras tu primera navidad con nosotros! —Exclamó Aoba con ilusión, no podía evitar decir aquellas palabras con un brillo en sus ojos, la navidad era una de sus festividades favoritas, aunque la hubiera olvidado por un momento.
— ¿Y tú no tienes objeción con que yo vaya? —Noiz dirigió su mirada a Koujaku diciendo aquellas palabras, no le importaba si decía que si igual iría para molestarlo, es más, quería que le dijera algo para que volviera a equilibrarse el universo.
Al contrario de sus predicciones, Koujaku suspiró acomodando la ultima caja en el estante—No tengo problema mientras Aoba sea feliz—Levantó sus hombros en signo de despreocupación y sin darse cuenta le había sonreído hacia el líder de Ruff Rabbit, el mismo con quien había deshecho casi toda la tienda minutos atrás.
—Ya veo... —Volvió a mirar a su Coil para ver si disponía de tiempo, el cual tenía pero era demasiado orgulloso como para aceptar tan de repente—Tengo tiempo, así que iré. Siéntanse afortunados.
—Está bien. Entonces supongo que tendré que preparar las cosas para esta noche y recibirlos como corresponde—Contestó Koujaku con una sonrisa acercándose a la puerta—Nos vemos—Se despidió de ambos con cierta emoción para luego salir de la tienda.
Tiempo de preparativos y espera.
El líder de Benishigure se encontraba paseando por la tiendas en busca de lo necesario para esperar la navidad en su hogar. Ya tenía todos los ingredientes para la cena de esa noche, prepararía langostinos en tempura, sushi, salmón ahumado pero le faltaba algo… ¡El postre! Era lo más indispensable para terminar con broche de oro una cena entre amigos aunque para su sorpresa, cuando se dirigía a la última tienda para buscar su delicia final, se encontró con aquel chico de los piercings.
—Yo—Dijo en un tono sin emoción ¿Qué hacía en una tienda de comida? De la información que tenía Koujaku acerca de él-Gracias a Aoba- sabía que lo único que comía el rubio era pasta y pizza a domicilio.
— ¿Qué haces por aquí? —Cuestionó Koujaku con sorpresa, hasta Beni parpadeó un par de veces para creerse lo que estaba viendo.
—Buscaba algo para llevar a tu casa, según investigue los familiares y…—Sacudió su cabeza por un momento, estaba por decir pareja pero por alguna razón prefirió omitir esa palabra que se mantenía inmersa en sus pensamientos—Amigos llevan algo para compartir, así que pensé en llevar un pastel—Terminó de decir en un tono serio—No te sientas especial viejo—Recalcó antes de que el otro pudiera sentirse alabado por ese detalle que solo hacía por cortesía.
Aquella escena era un tanto divertida para Koujaku, ¿Noiz mostraba una a actitud tsundere? Le parecía un tanto adorable de su parte así que solo asintió sonriendo.
—Claro que no me sentiré especial ni nada por el estilo, mocoso—Contestó Koujaku con una sonrisa—Supongo que nos vemos en un rato. No llegues tarde como de costumbre—Dijo en un tono serio mientras se dirigía hacia la puerta para salir de la tienda aunque algo de lo que compró el peluquero llamó la atención del chico de los piercings ¿Acaso era pizza y Pasta lo que había comprado? Si bien Noiz había leído que por lo general se preparaban comidas tradicionales…Entonces ¿Por qué el japonés había comprado eso? De pronto sintió como su pecho se comprimía preguntándose si se sentía feliz por aquello o confundido. No sabía que pensar, así que borró esas ideas de su cerebro y decidió pensar en que pastel llevaría a la casa del japonés que ya había salido de la tienda.
Bueno, llegamos al fin del primer capitulo!
¿Opiniones? ¿Reviews?
Díganme que les pareció y si vale la pena que siga con este fan fic (^^)u
