Sintió esos fuertes brazos, alrededor de su cintura, mientras leves tonos carmesís cubrían sus mejillas — adoro tus nuevos anteojos — susurro una voz bastante varonil, mientras le depositaba un delicado beso en la parte posterior de su cuello, arrancándole un leve suspiro de excitación.
Consigan un cuarto cabeza cuadrada — gruño la hermana de su prometido, ocasionando una leve risita de parte de la chica, y un gruñido de fastidio por parte del chico.
Quizás pudiéramos continuar esto en nuestro departamento — propuso Marcie algo sonrojada.
Esa es una maravillosa idea — murmuro el chico besándola dulcemente en los labios.
Definitivamente Charlie Brown, ya no era tan tímido, como antes, definitivamente no, pensó la chica al instante de sonrojarse, mientras su prometido la tomaba en brazos y se encaminaba a salir de la casa de sus padres.
