La inspiración ha despertado en mí, las ganas de transmitir mis ideas es una oferta que no puedo rechazar sin más que ahondar loe dejo con este breve fic que no creo que supere los 4 o 5 caps...Y para los que siguen mis historias pronto actualizaré las demás en De ángeles y magos la inspiración me ha abandonado, en este fic, pero tengo los suficientes capítulos para no dejarlos en suspenso, ténganme un poco de paciencia :P... bueno los dejo con esta historia titulada
Extrañas relaciones.
Summary: famosos empresarios, pero su vida es la sola, no le interesan las relaciones formales, no creen en el amor, los dos buscan los mismo compañía sin ningún tipo de compromiso, una propuesta un viaje a Italia y dos destinos por unir….
Disclaimer: SCC no me pertenece es la idea de las chicas de CLAMP, pero la historia sí es mía...
Los pequeños destellos de la luna se colaban por la ventana y chocaban contra su torso desnudo, la suave brisa marina entraba meciendo las cortinas y refrescando su cuerpo, después de todo era verano en Hong Kong, se movió tratando de encontrar la postura correcta para poder abandonarse al mundo donde tus deseos se vuelven realidad donde nada es imposible, pero el moverse sólo provocaba que las sábanas rozaran su piel, quemándola, por fin la encontró, posó sus brazos en su cabeza y miró al techo, dio un largo suspiro… ser un hombre atractivo era difícil, pero ser un magnate mundialmente conocido lo era más, aunque tenía sus ventajas obtenía lo que quería, cuando lo quería y cómo lo quería, pero también es triste pensar que nunca encontraría a la persona que valorara al hombre que es, sólo les importaba los ceros de su cuenta bancaria, lo había aprendido de una forma muy cruel pero gracias a ello aprendido que lo mejor sería enfocarse al plano sexual, los últimos cinco años de su vida los ha avocado a salir con mujeres que buscan una noche de placer sin compromisos, compromiso que él no les podía brindar y jamás lo haría a nadie… pero cómo dicen "nunca digas nunca"…
No pudo dormir en toda la noche en parte por el insoportable calor y en parte por la junta que tenía, estaba a punto de cerrar un importante contrato con una empresa japonesa mundialmente conocida dirigida por un hombre de nombre Touya Kinomoto que es conocido por la ferocidad con la que manejaba los negocios, la dirige junto con su hermana, pero la verdad no recordaba su nombre tampoco le importaba lo más seguro es que fuera otra niña mimada jugando a la mujer de negocios, sus pensamientos se vieron interrumpidos por su primo y mejor amigo Eriol Hirawizaga…
¿En qué tanto piensas primito?-pregunto con su característica sonrisa-
En nada en que quiero cerrar este contrato e irme una larga temporada de vacaciones.
Vaya nunca pensé que escucharía algo así.
La verdad he trabajado durante mucho tiempo y necesito descansar. Necesito alejarme de este mundo, tal vez vaya a mí casa de campo en Italia hace tiempo que no voy por allá.
Me parece bien…
La plática se vio interrumpida por el sonido de un teléfono…
Dime Naoko…
Señor acaban de llegar los empresarios de Japón.
Gracias pásalos a la sala de juntas en un momento los alcanzo.
De acuerdo señor.
Dejo de apretar el botón rojo para cortar la comunicación.
Listo-Eriol preguntó-
Listo-se limitó a sonreír-
Los dos jóvenes se dirigieron a la sala de juntas, al entrar distinguieron a un hombre, de mirada seria pelo gris ojos de color azul y alto, no rebasaba el 1.90, a su lado se encontraba una hermosa mujer de cabello de color ébano que contrastaba con su pálida piel unos ojos color amatista que terminaban de darle un toque misterioso, su mirada se posó en la persona que estaba sentada en la cabecera e inmediatamente se sorprendieron…
Buenos días-dijo cortésmente-, me puede decir ¿Quién es usted?
Buenos días, me supongo que usted es Syaoran Li, mi nombre es Sakura Kinomoto y vengo en representación de mi hermano.
Pensé que el trato sería directamente con él-en sus palabras se podía ver lo disgustado que estaba-
Lo siento señor Li mi hermano tuvo un contratiempo, le ofrezco mis disculpas.
Syaoran lanzó un leve gruñido lo que le faltaba lidiar con una niña, bueno al parecer los dos tenían 28 años aun así no le agradaba, se sentó al otro extremo de la mesa y una vez que su enojo estuvo controlado reparó en la mujer que estaba enfrente de él, era bella eso sería decir poco era hermosa tenía una pequeña nariz, pómulos altos, labios sensuales y lo más impresionante ese par de ojos, de color extraño que desde donde estaba parecía ser verde, tal vez después de todo no sería tan malo tratar con ella…
Bueno cómo sabrá su hermano y yo tenemos un acuerdo en el que…
Se vio interrumpido por una voz seria, y a pesar del tono seguía siendo dulce.
Señor Li con todo respeto no soy ninguna estúpida se perfectamente a lo que he venido, así que le agradecería que se ahorrara su pequeño discurso y pasemos a lo que nos interesa.
Syaoran se quedó sorprendido, al parecer no era una niña jugando a ser la exitosa mujer de negocios…
De acuerdo, Eriol por favor pásale los contratos para que la señorita Kinomoto los firme.
Eriol se los pasó no sin antes darle una mirada coqueta a la mujer que estaba a su lado. Y está se limitó a sonreírle de la misma forma.
Sakura recibió los papeles y se los pasó al hombre que estaba junto de ella, una vez que este los examinó los regresó a sus manos y los firmó. Los dejó sobre la mesa y se dirigió hacia su anfitrión…
Bueno señor Li creo no se requiere más de mi presencia, por lo que me retiro todavía tengo que arreglar algunos asuntos antes de volver a Japón.
¿Cuándo se va?-se escuchó preguntar, y para ser sinceros eso le extrañó-
Mañana.
Entonces me aceptaría una invitación para cenar.-vaya hoy si que hablaba antes de pensar, caviló, pero aun así le regaló una de sus sonrisas más encantadoras-
Lamento declinar su propuesta, pero no suelo mezclar los negocios con mi vida personal, pronto recibirá noticias de mi hermano, sin más que tratar nos vemos luego Li.
Sakura se levantó de su lugar con suma elegancia, la seguridad se podía ver en cada movimiento que hacía, Syaoran observó en silencio, enojo y sorpresa se mezclaban en su pensamiento, nadie, más bien nunca alguien lo había rechazado, Sakura hizo una leve inclinación a modo de despedida, y fue ahí cuando pudo verla de pies a cabeza, era alta de cuerpo delgado el pantalón que vestía a la cadera se ajustaba de una forma excelente a su figura remarcando sus torneadas piernas y sus caderas, la blusa que llevaba de color lila hacia resaltar sus ojos, el escote de la misma dejaba ver el inicio de sus senos todo en ella lucía espectacular…la vio salir de la oficina y sólo pudo pensar que Sakura Kinomoto era la mujer más interesante que conoció…
Vaya primito creo que es la primera vez que alguien no cae en tus redes-hizo burla Eriol-
Eso está por verse-contesto con una sonrisa en sus labios, Sakura acababa de despertar la curiosidad de Syaoran y no se saciaría tan fácilmente.
La noche llegó a la ciudad de Hong Kong, y con esto cierto alivio a sus habitantes ya no tendrían que soportar la presencia del abrasados sol, la vida nocturna en una ciudad tan Cosmopolitan como esta es muy variada y más si eres joven, tienes muchos lugares a donde ir, desde un muy sofisticado restaurant hasta el antro de moda, todos se puede hacer en esta ciudad, no todos son personas de la vida nocturna, algunos prefieren la comodidad de su casa o en su defecto del hotel…Dos hermosas mujeres se encontraban en una enorme cama, platicando, sus sonrisas resonaban por todo el cuarto dándole cierto aire encantador al mismo…
…y hablando de cosas agradables, deja que te diga que Syaoran Li es un hombre muy pero muy sexy.
Tomoyo déjame decirte que estás perdiendo tu buen gusto.
Tomoyo sonrió sabía que su prima estaba más que enojada, le encantaba hacerla repelar. Vamos Sakura no seas infantil, debes de admitir que el hombre es todo un bombón.
Sakura lo sabía, porque sería muy tonto no ver lo imponente que era Syaoran Li, es un hombre sumamente apuesto con unos ojos grandes y muy expresivos de color ámbar, esos labios que pedían ser besados, o ese cuerpo bien formado que parecía tener, si definitivamente era un hombre muy sexy…
Sakura, me estas escuchando-Tomoyo la movía levemente –
Ah sí, perdón.
Vaya primita sí que estas rara, por fin, ya vas a aceptar que es un hombre guapo o no.
Pues si lo es, aunque eso no le quita lo increíblemente arrogante y macho que es, y no lo niegues tu también viste la forma en se molestó cuando supo que trataría conmigo, es el típico hombre que piensa que las mujeres no pueden pensar, que no conciben nada sin un hombre a lado.
En eso tienes razón-admitió-aunque creo que le diste una muy buena lección, casi me rio al ver su cara de asombro cuando le dijiste que no eras estúpida que sabias a lo que ibas.
Yo también, no sabes lo satisfactorio que es poner en su lugar a un hombre así.
¿Por qué no aceptaste su invitación a salir?
Simple, no quiero pasar una velada que terminará en su cama.
No pensé que te importara eso.
Pues la verdad no, no tengo ganas de estar con otro hombre que sólo quiere ver cuán semental es.
Pensé que últimamente tú sólo pensabas en las relaciones sin compromisos.
Pues sí, para serte sincera mi instinto me dicen que me aleje de él.
Guardaron silencio, las dos sabían que implicaba eso, si en un futuro algo pasara con él, lo más seguro es que Sakura perdería algo que acababa de recuperar…su corazón.
Bueno prima me voy a dormir nos vemos mañana-Tomoyo salió de la habitación dejando a Sakura con sus meditaciones-
Sakura sabía lo que era sufrir por amor, había estado enamorada de un hombre que sólo la trataba como trofeo, la exhibía en cada reunión social que podía, la humillaba cada vez que quería, y todo porque ella era mujer, la cual ante sus ojos era un ser sin pensamiento sin voluntad, había aprendido la lección jamás se enamoraría nuevamente, jamás lloraría por alguien, jamás perdería la cordura, jamás sufriría el desamor de nuevo…por eso hace años atrás había tomado una decisión las relaciones que emprendiera de ese momento en adelante serían sin compromisos, sólo se reducirían a noches en las que buscaría compañía pero nada más…pudo conciliar el sueño entrada la madrugada, y eso no le agradaba mucho y más porque su insomnio se debió a Syaoran Li, gracias a él recordó su pasado y para ser sincera no era algo que a ella le agradará, sin conocerlo ya la había perturbado a tal grado de sentir miedo, se alejaría de él, no necesitaba pasar mucho tiempo a su lado, se iría mañana en la tarde y esa sería la última vez que vería a ese hombre que hacía que su cuerpo se estremeciera ante su mirada inquisitiva, mientras analizaba su cuerpo, o a ese hombre que sabía que le daría problemas…
Voy, ya voy-grito desde su cama, se paró rápidamente, los leves golpes que provenían de la puerta habían interrumpido su sueño, abrió la puerta y se encontró con un enorme ramo de flores, abrió sus ojos de par en par denotando sorpresa, hacía mucho tiempo que ella no recibía ese tipo de detalles, pronto su sorpresa se vio remplazada por fastidio cuando escuchó la voz del hombre que portaba esas flores-
Una flor, para otra flor.
Vaya, Li que ingenioso es usted no se le pudo ocurrir algo mejor.-contestó sarcástica-
Mi inventiva se ve interrumpida cuando de usted se trata, ninguna palabra describiría su belleza.
Oh gracias, supongo que debo sentirme halagada.
Que le parece si en lugar de regresar cada elogio que hago a su persona me deja pasar, para poder poner estas flores en algún lugar antes de que mis brazos se entuman.
Pues si no queda de otra-se hizo a un lado dejando entrar al hombre-
Syaoran las puso las flores en la mesa que se encontraba en el recibidor, volteó para encararse con la hermosa japonesa pero se quedó sin habla, al parecer estaba dormida ya que su pelo se encontraba un poco desordenado, eso era lo de menos lo más interesante era su forma de vestir, tenía puesta una pequeña bata de color hueso que casi se podía confundir con su piel, terminaba a la mitad de sus muslos por lo que podía observarlos sin ningún impedimento, la bata amoldaba sus curvas de una manera peligrosa, no dejaba nada a la imaginación…Sakura se puso nerviosa al sentir su mirada recorrerle el cuerpo, y pronto calló en cuenta de el por qué.
Creo que me iré a vestir, en seguida regreso.
Syaoran sonrió la puso nerviosa y eso le agradaba, así que mientas esperaba su regreso se sentó en la pequeña sala de la suite.
Bueno Li ahora si me puede decir a que debo tan grata sorpresa.- dijo Sakura exageradamente , ya se encontraba vestida decentemente, se puso unos jeans a la cadera y una blusa de tirantes de color rosada.
Sólo pasaba a saludarla, y de paso invitarla a desayunar.
Creo que ya había dejado en claro eso…
Pero no soy un hombre que se dé por vencido fácilmente.
Me alegra por usted que sea un hombre de iniciativa-se burlo- no soy ningún trofeo que se pueda ganar o perder.
Lo sé, no suelo tratar a las mujeres como objetos, sólo quiero que salgamos a desayunar.-su sonrisa encantadora apareció de nuevo-
Vasos Li, dejémonos de jueguitos y dígame ¿qué es lo que quiere?
Vaya usted sí que es directa Kinomoto…
Es una de mis grandes virtudes-se burlo de nuevo-seamos sinceros para que hacer todo un teatro si sólo quiere acostarse conmigo o me equivoco-interrogó-
Syaoran se quedó mudo, vaya que era una persona muy difícil, eso sólo hacia más interesante la situación.
No lo puedo negar, usted es una mujer muy hermosa, pero no sólo quiero acostarme con usted como dice, me gustaría tratarla más, se me hace una mujer interesante.
No adornemos la situación, lo de conocerme ni usted se lo cree, démosle el beneficio de la duda y suponiendo que sea verdad, lamento decirle que no busco compromisos serios, no me interesan.
Vaya ya somos dos, y he ahí una razón más para conocernos, yo no busco a alguien para comprometerme, no creo en esa palabra. Es muy pronto para hablar de esto, usted me atrae físicamente, me gustaría entablar otro tipo de relación con usted.
¿A caso me está proponiendo una aventura?
Si lo quiere ver de esa forma, si, se la estoy proponiendo.
Me halaga que un hombre como usted, si sabe a lo que me refiero, me proponga algo así, está seguro completamente seguro, yo regreso hoy mismo a Japón y no creo que nos volvamos a ver.
Eso se puede arreglar, tenía previsto tomar unas vacaciones después de cerrar el trato con ustedes, así que por qué no viene conmigo, le aseguro que no la pasaremos muy bien.
Sakura lo miró, y pensó, es una oferta muy tentadora, también necesitaba unas vacaciones pero de eso a compartirlas con un hombre que no conocía, eso ya era otra cosa, pensándolo bien que perdía no más de lo que ganaba… aun así debían dejar algunas cosas en claro…
Es tentadora la oferta, suponiendo que acepte debe prometerme una cosa.
Claro, lo que quiera.
Pasaremos ese tiempo juntos, disfrutaremos del momento, nada de compromisos, nada de palabras de amor.
Syaoran la miró y se sorprendió al ver que pensaban de la misma forma sonrió a lo mejor después de todo no sería tan loco pasar con ella dos largas semanas en su casa de Italia.
Me leyó el pensamiento, estoy totalmente de acuerdo con usted.
Sakura lo miró ese hombre le daba miedo, no porque fuera aterrador más bien por lo que podría pasar, aun así le parecía atractivo, y aunque se quería alejar de él para que huir de las cosas después de todo los dos buscaban lo mismo compañía sin compromisos, y aunque nunca había hecho algo así la experiencia parecía prometer mucho, qué pensaría su hermano o Tomoyo, recapacitó por qué no una vez en su vida dejar de pensar en los demás y pensar en ella, después de todo sería esa la última vez que lo viera…
Bueno Li, creo que por decirlo de una forma tenemos un trato, acepto su propuesta, con la última condición de que lo que pase allá se queda ahí, y que después de eso no nos volveremos a ver y si lo hacemos será estrictamente profesional.
Syaoran sonrió complacido. Me parece perfecto, dejemos los formalismos de llamarme Li y dime Syaoran, después de todo pasaremos dos semanas juntos.
Sakura experimentó un leve escalofrió ante la forma tan sugerente de decirlo.
Bueno Syaoran, entonces para estar a la par llámame por mi nombre.
Syaoran sufrió un leve gozo al escuchar su nombre en labios de la castaña.
De acuerdo Sakura, pasaré está tarde por ti, nos marcharemos hoy mismo, regresaremos dentro de dos semanas.
Me parece bien, así me das tiempo de comprar algo de ropa¿por cierto a donde vamos?
A Italia, tengo una casa en el campo allá.
Italia, bonito país, entonces nos vemos más tarde.
Nos vemos, prometo que no te arrepentirás.
Sakura acompañó a Syaoran a la puerta, y reflexionó en sus últimas palabras, arrepentirse, no tendría por qué ¿o sí?...se metió a bañar para tratar de despejar su mente y pensar en lo que acababa de hacer, y la forma más adecuada de decírselo a Tomoyo…
Espero que sea de su agrado, y ya saebn submitan un review para hecerme feliz :P...nos leemos pronto
