HAIR

by Joan Medlan

Summary: De cómo un día decide cortar su sedoso y plateado cabello envidiado por todos. Porque cada persona enfrenta el dolor de formas distintas.

Disclaimer: Los personajes de Yuri! on Ice no me pertenecen, solo los tomo prestados para esta historia.

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CAPITULO 1

Se deslizaba por la pista con una gracia inigualable, con la ropa deportiva ajustada al cuerpo, tomó velocidad empujando con su pie derecho sobre las cuchillas, girando de espaldas se impulsó y soltó todo el aire que almacenaban sus pulmones, una, dos, tres, cua… cayó en el hielo sobre su bien formado trasero. Era la decima tercera vez en la práctica que intentaba un cuádruple flip, a sus 19 años se había impuesto ese reto, soltó un suspiro de decepción.

- Victor es suficiente por hoy! - Dijo firme Yakov, su entrenador, desde el borde de la pista, bien sabia que el peli-plateado no se detendría hasta lograrlo, así que tuvo que insistir un par de veces más.

El ojiazul se acercó al borde de la pista con las gotas de sudor bajando a los costados de sus sonrojadas mejillas, le dedico una sonrisa en forma de corazón a la figura esbelta que se le acercaba.

- Wow! - dijo efusiva - Por poco y consigues clavar ese último salto cariño - continuo, juntando las manos y correspondiendo la sonrisa una peli-plateada de ojos color avellana.

- Madre! - grito como un niño pequeño lanzándose a los brazos de la señora que lo recibió gustosa

- Te he echado de menos! - Dijo apoyando su rostro en el hombro contrario.

- Yo tambien te he echado de menos cariño, así que en cuanto pude librarme de las reuniones he venido a verte.

- Natasha, qué sorpresa verle - Escucho la señora y soltó suavemente el abrazo

- Ha pasado tiempo Yakov - Saludo esta

Los tres platicaron un momento hasta que el estómago del menor de ellos empezó a protestar, ambos, madre e hijo, se dirigieron a su casa. El frio de San Petersburgo se hacia notar a medida caía la noche, junto con la colorida iluminación que poco a poco se encendía en las calles, la época festiva, a pesar de no ser tan celebrada en Rusia, era la excusa perfecta para cambiar un poco el ambiente en los negocios. Siempre le había gustado reparar en esos detalles, pensó el ojiazul observando por la ventana del auto de su madre, su cumpleaños se acercaba y su meta de conseguir los flips cuadruples ante de sus 20 años no quería dejarla pasar. Makkachin su pequeño caniche de un año, salió a recibirlo a la entrada. Su madre pasó de largo encendiendo las luces y colgando el abrigo caqui.

Victor avanzó a la cómoda sala con Makkachin cruzándose entre sus piernas, era un cachorro lleno de energía, algo que le recordaba a él mismo. Las luces recién encendidas iluminaron la instancia, un sillon de tres plazas y uno individual rodeaban la mesa central de caoba que hacía perfecto juego con aquel cuadro que colgaba en la pared. Se quedo viendo el cuadro un momento, aquel hombre de cabello rubio y de hermosos ojos azules lo observaba serio, tuvo un sentimiento reconfortante y a la vez de añoranza, al recordar cuando lo animaba en los peores días de entrenamiento.

- Tu padre siempre estuvo orgulloso de ti cariño - Dijo su madre saliendo de la cocina ante el silencio del menor - Ven, vamos a cocinar algo rico para cenar! - Lo llamo por segunda vez, a lo que Victor contesto con una sonrisa.

Él y su madre habían sufrido mucho por la muerte de su padre dos años atras. Alexander Nikiforov había sido un periodista reconocido en Rusia, con un gran sentido del deber y la justicia, reportaba los casos más críticos en los frentes de conflicto armado. Fue entonces que Alexander junto con dos de sus colegas fueron secuestrados y asesinados por terroristas. La guerra le había arrebatado a su padre de una manera abrupta y cruel, el dolor de su perdida casi le arrebata su carrera como patinador profesional, pero fue el recuerdo de sus palabras de aliento que lo motivó aún más a continuar. Tenía grabada esa frase en su mente como un mantra que se repetía antes de cada competencia.

"Muestrales como crear música con tu cuerpo"

Su madre y él cocinaron un largo rato, platicando sobre algunas anécdotas de su padre. Para ambos era inevitable no terminar recordandolo cada vez que estaban juntos. Su padre lo había apoyado desde la primera vez que se deslizó en el hielo, contrario a lo que se podría esperar de alguien que tenía una carrera tan seria como la de él, pero su único pensamiento siempre había sido velar por la felicidad del pequeño peli-plateado que tenía un talento innato para tal deporte.

Luego de cenar y tomar una ducha, Victor y su madre pasaron un bonito momento juntos en el sillon, Natasha adoraba el cabello de su hijo y le solicitaba siempre que le dejara peinarlo, con suavidad desenredaba las plateadas hebras similares a las propias. El se relajaba muchísimo con aquello, sentado en la alfombra frente al sillón, le daba mayor acceso a su sedosa cabellera.

Ya entrada la noche, recostado en su cama, contemplaba el techo de su habitación con Makkachin, cerraba sus ojos para concentrarse en cada movimiento que hacía sobre la pista. Sentía una pasión inigualable por el deporte, al punto que le relajaba pensar formas nuevas de sorprender al publico, se quedo profundamente dormido luego de un rato de cavilaciones, totalmente ajeno a lo que le depararía el futuro.

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Hola, hola

Aca empezando mi primera historia de Yuri! on Ice, espero les sea de su agrado y lo siento por el capitulo tan corto, prometo que el proximo sera mas largo.

Comentarios y sugerencias son bienvenidas.