América del Sur, extremo sur, Chile.

Buenas tardes lectores, espero que les guste lo que estoy creando y por favor me lo hagan saber por un reviews.

Es sencillo seguir la historia;

Cursiva, son los recuerdos o flashback de los personajes.

" " generalmente hechizos, pero en algunas ocasiones son los pensamientos.

Normal, es el transcurso en tiempo real de los hechos.

Espero que les guste, y comenten.

Capítulo I

Harry estaba sentado frente a la chimenea, pensativo, hace un par de horas que se encontraba en la misma posición, si no fuese porque una pelirroja, radiantemente hermosa que se coloco frente a él obstaculizando la danza de las llamas.

- Cariño, te he buscado por todo Hogwarts.
- Estuve aquí todo el tiempo, ¿Por qué no me buscaste en la parte más obvia?

Ginny miro a su alrededor y se encogió de hombros con una sonrisa coqueta, se sentó al lado de su novio y éste paso un brazo sobre los hombros de la chica.

- En la tarde… me encontraba conversando con Hermione en el aula de transformaciones… he, cosas de chicas- Ginny sonrió al tiempo que se sonrojaba- y escuchamos ruidos…
- ¿Las ha encontrado un profesor?- pregunto Harry posando su vista en ella momentáneamente.
- No, pero creímos que era uno, entonces nos escondimos en el armario que está ahí…
- Ya, un cotilleo… sabes que soy todo oído para esas cosas…- Harry hablo ironizado.
- Lo siento Harry, no te molesto mas…- Ginny se levanto sonrojada
- Ginny, no seas así… venga dímelo, que si es algo divertido me reiré…- el moreno sonrió para tranquilizar a la pelirroja

La chica sonrió tranquilamente y volvió a ocupar el hueco al lado de su novio, lo beso durante unos minutos y luego complacida retomo la conversación, sin percatarse de la mirada sin interés de Harry.

- Bueno, ya escondidas vimos por un hueco que entraron Malfoy y Parkinson…- Ginny miro a Harry para ver si la escuchaba, pero éste ya tenía toda su atención posada en ella- me gusta que me mires… bueno, la cosa es que Parkinson…
Ginny y Hermione se encontraban escondidas dentro de un armario que había en el aula, ambas contenían la respiración para no ser detectados, últimamente Malfoy y Parkinson tomaban renombre dentro del cuerpo estudiantil al ser considerados unos de los más rápidos con la varita.
- ¿Qué me querías decir? ¿No lo podías hacer en la sala común…? llevamos una hora caminando y buscando aulas desocupadas… - Parkinson jugaba con su varita entre los dedos
- Quería hablar sobre nosotros…- Malfoy se sentó en la mesa
- ¿para eso? Si no quieres que haya un nosotros, no lo hay, así de fácil… me voy a los invernaderos…- la morena de ojos azules se dio la vuelta con intenciones de salir
- ¿no quieres estar conmigo?- Malfoy se levanto bruscamente preocupado
- Para serte sincera… solo estoy contigo porque nos vamos a casar- Parkinson se dio la vuelta y lo encaro
- ¿no me quieres?- Malfoy miraba incrédulo a la chica que estaba frente a él, que le hablaba sin arrepentimiento y no le temblaba la voz.
- Hace mucho que deje de quererte…- la morena miro hacia la ventana
- ¿Qué hice…?- el rubio se acerco a ella para mirarla a los ojos
- ¿Qué hiciste?... – Parkinson tomo aire- hiciste que se me destrozara el corazón cada noche cuando llevabas una tipa cualquiera a tu habitación, hiciste que me sintiera una estúpida cuando no me permitías hablar frente a los Slytherin, hiciste que me ganara el titulo de la "princesa del hielo" – Parkinson hiso unas comillas con las manos- hiciste que olvidara quien soy para ser quien quieres que sea…
- ¿Por qué me hablas así?... nunca antes me habías levantado la voz…- Malfoy inconscientemente busco su varita en el bolsillo, bajo una atenta mirada de la morena.
- Corrección, jamás supiste como era mi voz… siempre hablaba mediante susurros contigo… para no incomodarte- la morena jugueteo nuevamente con su varita, haciendo que Malfoy también notara que ella la traía encima
- Eso es lo que hacen las mujeres, subordinarse ante los hombres…- Malfoy hablaba con convicción según su educación
- Eso creía yo, pero no es así… una pareja es… amarse, escucharse… experimentar, borrar los miedos, ser feliz… - Malfoy vio como a Parkinson le brillaban los ojos.
- ¿conmigo no eras así?- el de ojos grises tomo el mentón de la chica.
- No- contesto rotundamente.
- Pero gimes mucho conmigo…- Malfoy la tomo de la muñeca bruscamente.
- No seas grosero- Parkinson se soltó rápidamente.
- Si eres capaz de hablar de esas emociones "Princesa del hielo" es porque las has sentido-
- Así es…- Parkinson se alejo un poco.
- Ningún Slytherin te colocaría una mano encima sabiendo que eres mía…-

Parkinson camino hacia la ventana que mostraba el medio día, un sol opacado por la hermosura de la nieve, quizás si era la "Princesa del hielo", amaba la nieve y el invierno, igual que él…

- Los Ravenclaw no se acercan a nosotros, los Huffelpuff son unos miedosos y los Gryffindor nos odian… - Malfoy analizaba la situación
- Nos odian, pero perfectamente te metiste con una de las gemelas Patil…- Parkinson atacó sin pensar
Malfoy levanto una ceja, se dio la vuelta dándole la espalda a la morena. Cerro con frenesí los ojos, y empuño su varita lo más fuerte que pudo, las tres mujeres que estaban en la habitación se asustaron cuando vieron que el Slytherin destruía una silla con un bombarda, luego otra silla con un Desmaius y después una mesa con un sectusempra. Al cabo de unos minutos, algo tranquilizado se volvió a ver a Parkinson que estaba con su varita en lo alto, preparada para recibir cualquier hechizo.
- ¿Con que maldito Gryffindor te metiste…?- Malfoy dio dos pasos largos para quedar frente a ella.
- Yo no he… - Parkinson comenzó dudosa.
- ¿te has enamorado de un Gryffindor?- Malfoy la miro amenazante.
- Con toda mi alma…- Parkinson confeso después de unos minutos.

Ginny se tapo la boca para no emitir sonido, un Gryffindor había tenido la osadía de meterse con un Slytherin, Hermione estaba igual de sorprendida, ambas leonas se miraron y fijaron su vista en la ex – pareja de novios que estaba en el aula.

- ¿Quién diablos es? – Malfoy la tomo por los hombros y la sacudió violentamente.
- No te lo voy a decir…- Parkinson lo empujo con todas sus fuerzas.
- Quiero saber quién es, para rajarle la cara…- el rubio resoplaba molesto.
- Nunca le pondrás un dedo encima… el es mucho mejor que tu- Parkinson se alejo completamente de él.

Malfoy enrojecido de rabia dio dos pasos y le dio un bofetón a Parkinson que hiso que se callera sobre una mesa. Ginny quedo paralizada y Hermione sorprendida. El rubio le dio otro bofetón e iba por un tercero cuando la tomo y la tiro al piso. La castaña iba a salir cuando Parkinson hablo.

- ¡por el amor de Merlín! ¡Draco estoy embarazada! – Parkinson lloraba tapándose la cara
- ¿Qué has dicho?- Malfoy la tomo del piso y la sentó bruscamente en una mesa.
- Estoy embarazada, ¡no me hagas daño!- Parkinson tenía su perfecta cabellera negra revuelta y sus hermosos ojos azules anegados.
- ¿es mío?- Malfoy se alejo unos pasos de ella.
- No- contesto simplemente corriendo hacia la puerta y saliendo.
- Al cabo de unos segundos Malfoy salió y me vine a la sala común…- Termino Ginny con su relato.

- La serpiente de cloaca ¿le pego?- Harry sorprendido miro a su novia.
- Si, yo no reaccione… quede paralizada al igual que Hermione- la pelirroja se excusaba de no haber interferido.
- ¿está embarazada dijo?- pregunto Harry pensativo.
- Si, con Hermione creemos que puede ser Neville, como no ha llegado a dormir… - comento Ginny.
- Ella jamás se fijaría en Neville…- contesto Harry
- ¿Por qué no?- pregunto Ginny ofendida, después de todo Neville había sido su novio antes de volver con Harry.
- Lo siento Ginny, pero dejar a Malfoy por Neville… no creo que haya por donde perderse… ¿no crees?- Harry suavizo su voz- tiene que ser alguien mejor que Malfoy.
- El único mejor de Gryffindor como de todo el colegio junto eres tú mi amor, y tú no estás disponible…- Ginny lo beso ardientemente.

A las tres de la madrugada Harry bajaba por las escaleras de los chicos, no tenía sueño y revolverse entre las sábanas no le apetecía, se decidió por estar parado frente a la ventana para ver la nieve. Camino hasta ella y se sentó en el alfeizar. Estuvo tres horas pensando hasta que empezó a amanecer, su vida se estaba complicando y eso que ya había acabado con Voldemort. Miro hacia las escaleras de las chicas, no apareció nadie, pero por la de los chicos bajo Ron ya vestido con su uniforme y perfectamente peinado, se sorprendió de verlo ahí.

- Creí que era el único en madrugar- comento Ron sonriendo.
- No podía dormir…- dijo Harry contento.
- ¿Cómo vas con Ginny?- Ron se sentó en una banco que había.
- Bien, ¿te ha comentado algo?- Harry volvió a mirar por la ventana.
- No, pero Hermione si…- Ron miro hacia las escaleras de las chicas esperanzado.
- Venga, dime que te dijo…-
- El otro día entre tus cosas, Ginny encontró un anillo de compromiso… y cree que se lo darás en cualquier momento…-

El moreno de ojos verdes asintió, es verdad, hasta el mismo había pensado en pedírselo, pero ahora ya no estaba tan seguro, Ginny era una excelente persona, siempre preocupada de los demás, dispuesta a ayudar, hermosa, tierna y algo consentida… y los más importante, era su novia. Pero desde hace un tiempo su relación consistía más en un acto de rebeldía que de amor.

- Ron, hay algo que tengo que comentarte…- Harry afrontaría la verdad, ya era tiempo.
- Es respecto de mi hermana ¿verdad?- Ron preocupado lo miro.
- De mí y de ella…- iba a comenzar a hablar cuando Hermione se junto con ellos.
- En otro momento será mejor- Harry se levanto y subió a su habitación… ese iba a ser un día largo… cumplía un año saliendo con Ginny.

En el gran comedor había el revuelo de todos los días a la hora de la cena, Ginny cito a Harry en el aula de los requerimientos, así que el moreno tuvo que abandonar tan alegre comida para caminar hacia su cita. Se tropezó con Malfoy que estaba apoyado en el marco de la puerta del gran comedor mirando minuciosamente hacia los Gryffindor, como analizando quien sabe qué cosa, Harry miro hacia la mesa de Slytherin y Parkinson comía más de la cuenta. Al cabo de unos minutos llego frente a la puerta que necesitaba y entro sin siquiera golpear.

- Hola Harry… espero que no hayas comido mucho…- Ginny estaba con un vestido blanco que la hacía parecer una novia.
- Hola Ginny, vine a la hora que me citaste… y si comí mucho ¿no tenía que hacerlo?- pregunto Harry mirando a su alrededor y fijo su vista en una amplia cama.
- Es que creí que te darías cuenta que hoy cenaríamos juntos después de todo… - Ginny miro nerviosa a un calendario grande que había en la pared.
- Si sé que es nuestro aniversario- el moreno sonrió.

La cena transcurrió tranquila y amena, Harry se sintió cómodo hasta que de un impulso metió la mano en su bolsillo y tocó la ya conocida cajita aterciopelada, el no recordaba haberla llevado ese día encima, sin querer miró a Ginny, quizás ella había querido que la llevara y apareció en su túnica.

- ¿Por qué no jugamos a algo?...- pregunto Ginny.
- ¿a qué quieres jugar?- pregunto Harry nervioso.
- Hay un test que encontré en la biblioteca… quisiera hacerlo- la pelirroja se sentó junto a él, muy cerca. Y apareció papel y lápiz frente a ambos.

Consistía en preguntas para ver si conocías a tu pareja, Harry inconscientemente iba escribiendo lo que debía, cuando hubo terminado el test, Ginny emocionada leyó en voz alta las respuestas de ambos.
¿Estación favorita del año? A Harry no le gustaba el verano como había escrito la pelirroja, tampoco le gustaba el pudin de almendras ni mucho menos si había que elegir entre playa y campo elegía la playa, odiaba el color verde y era alérgico a las abejas.

El moreno se sorprendió al ver que la pelirroja no había acertado a nada, ni siquiera a como se llamaba su abuelo. Pero para no entristecer a su novia, sonreía y colocaba cara de asombro cada vez que ella "adivinaba" lo que le gustaba. Pero la cortesía llego hasta su ultima adoración que era las "espinacas", llego el turno de leer las respuestas de Ginny, y ella lo había hecho.

¡Dios! Harry sabia que a ella no le gustaba el invierno, no le gustaba el pudin de chocolate ni mucho menos el campo, amaba el color rojo y no el azul como lo había escrito y era alérgica a los conejos.
El juego termino con una Ginny sollozando, y un Harry abrazándola diciendo que era un estúpido juego, cuando la beso ella quiso llegar un poco más lejos.

- Vamos Harry, llevamos un año juntos ¿no crees que hora es de dar el siguiente paso?- pregunto Ginny a la luz de las llamas de la chimenea.
- No creo que sea el momento…- Harry la tomo en brazos y la sentó en el sillón junto a él.
- Quiero que la primera vez de ambos sea hoy…- Ginny miraba con adoración a su novio.
Harry miro rápidamente hacia la chimenea, no iba a ser la primera vez de él y eso destruiría el corazón de su novia, ya la había lastimado durante la noche, y no lo iba a hacer una vez más.
- Ginny quiero ir a acostarme…- Harry se estaba levantando
- Perfecto, vamos a la cama…- Ginny se levanto rápidamente ilusionada.
- No, quiero ir a mi habitación… quiero descansar- estiro su mano para que ella la tomara.

Ambos salieron y empezaron a caminar en silencio, Ginny desilusionada y Harry con una culpa por lastimarla, al doblar por una esquina vieron como mas allá estaba Malfoy y Parkinson discutiendo al parecer no los habían visto ni sentido.

- Ginny quiero que te vayas a la sala común rápidamente, si no vuelvo en media hora avisa a Ron… - Harry saco su varita y se escondió en la esquina.
- ¿Qué piensas hacer?- Ginny alarmada se escondió junto a él.
- El desgraciado ya le pego, no puedo permitir eso…- miro a Ginny- dame tu cartera, correrás más rápido…

La pelirroja tomo otro camino para volver a la sala común, el moreno con la cartera en la mano y con la otra la varita se acerco sigilosamente hacia los Slytherin.

- No quiero estar contigo ¿no lo entiendes?- Parkinson miraba por la ventana.
- Tienes que hacerlo, nos casaremos… - la tomo de los hombros y la sacudió.
- Quieres dejarla en paz serpiente de cloaca- Harry camino decididamente hacia ellos.
- No te metas donde no te llaman- Malfoy tomo la varita y apunto a Harry.
- Quieres dejarme sola Draco… ya hemos hablado, y no quiero peleas, no quiero pelear ni contigo ni con Potter…- Parkinson miro amenazadoramente a Malfoy

Malfoy levanto los hombros en claro desinterés, no guardo la varita, solo camino por donde había llegado Harry y desapareció de la vista de ambos. Parkinson iba a seguir su camino seguido de un moreno a unos cuantos pasos tras ellas, sin que la chica se diera cuenta, Harry le tomo la muñeca y la metió a un aula.

- ¿Qué sucede Potter?- Parkinson evito mirar a la cara a Harry
- Quiero que me mires a la cara Pansy…- tomo el mentón de la chica y lo levantó.
La morena se dejo ver por Harry y éste se sorprendió al ver unos morados recientes en el perfecto rostro de porcelana.
- ¿Por qué lo permitiste Pansy?- pregunto al tiempo que la abrazaba.
- Cada uno vive la vida que le toco vivir, este es mi destino…- Parkinson se aferro al cuerpo del moreno.
Estuvieron abrazados un rato, la morena sollozo durante unos minutos al tiempo que Harry la abrazaba y susurraba palabras de alivio.
- Creo que Ginny tenía unos pañuelos aquí…- rebusco en la cartera de su novia, saco los papeles del test, mientras Pansy los leía el seguía buscando.
- ¿Weasley hiso esto?- pregunto la morena.
- No te rías, mi relación no es perfecta como la tuya…- extendió los pañuelos- aquí están… ten…
- ¿estación favorita?, eso es fácil… el invierno- recibió los pañuelos, frente a sus ojos apareció una pluma.
- Genial, estaré haciendo otra hora este estúpido cuestionario- Harry tomo la pluma que le correspondía.

El test así lo requería, una vez que contestas la primera tienes que escribir hasta el final, y efectivamente, estuvieron otra hora hasta que Harry leyó los resultados.

- Invierno- recibió un asentimiento de Pansy- Pudin de chocolate… prefería el campo y le gustaba el azul…
Harry termino de leer pensativo, eran exactamente las mismas respuestas que había colocado con Ginny, no estaba pensando en su novia, estaba pensando en ella. Se asusto. Le toco el turno de Pansy, y ella había acertado en todas las respuestas, incluso después de meditar un rato dijo el nombre de su abuelo paterno.
- ¿he contestado algo mal?- pregunto la morena
Harry no contesto, se levanto de su asiento y camino hacia la ventana, había empezado a nevar y se veía más oscuro de lo común.
- Odio esta situación…- comento Harry
- ¿Qué…?-
- Odio conocerte más a ti que a mi propia novia…- se volvió hacia ella.
Pansy miro hacia otro lado, esquivando la mirada verde.
- Después de todo, ya termino tu suplicio…- Pansy camino hacia la puerta- ya no tenemos nada…
- Pansy… - llamo Harry.

Ginny se había quedado dormida en la sala común, Hermione al bajar por las escaleras a las seis de la madrugada como era costumbre para juntarse con Ron, la vio.

- ¿Qué haces aquí?- dijo después de despertarla
- ¡dios! ¿Harry ha llegado?-
- Creo que sí, estas con su túnica- respondió la castaña.

Ginny miro su cuerpo y efectivamente, estaba con la túnica de Harry sobre ella, se alegro, después de todo al parecer no había pasado a mayores sea lo que sea que haya pasado ayer con Malfoy. Suspiro aliviada, le contó a Hermione lo sucedido y como Harry siempre un caballero con su armadura quiso defender a la odiosa de Parkinson.

Ron estaba sentado en un banquillo que apareció en uno de los jardines del colegio, frente a él se encontraba Harry paseándose de un lado a otro. En la madrugada, mejor dicho al amanecer lo pilló entrando a hurtadillas a la habitación. Durante todo el día lo había estado atosigando para que le respondiera la pregunta, ¿con quién estaba? Y lo había citado a las nueve de la noche en ese lugar.

- ¿me vas a hablar o tengo que verte meditar?- es estiro a lo largo en el banquillo.
- ¿Qué crees que estuve haciendo en la noche?- tanteó el terreno.
- Bueno, o estabas en la fiesta de Ravenclaw o con mi hermana, o quizás… volando en los jardines…- Ron respondió a su pregunta.
- Si dejara a Ginny ¿Qué me dirías?- pregunto con temor.
- Que estas grande para ver qué haces con tu culo- Ron se sentó bien nuevamente.
- Estoy confundido Ron…- Harry se sentó junto a él.
- ¿respecto a qué?...- se intereso el pelirrojo
- Con tu hermana…-
- Es mi hermana, antes era Ginny-
- No sé si la quiero…-
- ¿estás enamorado de otra persona?- se levantó rápidamente Ron.
- No lo sé…-
- ¿esa persona lo sabe?-
- Sabe más cosas de mi mismo que yo-
- ¡Merlín! ¡has engañado a mi hermana, ella te ama Harry… ¿Cómo le hiciste eso?-
- No he dicho que la he engañado…- lo miro asustado- tu lo has dicho…
- ¿no lo has hecho?- pregunto el pelirrojo enarcando una ceja
- Si hipotéticamente lo he hecho ¿Qué pasaría?-
- Que yo hipotéticamente le contaría a mi hermana-
- Ginny está en el aula de astronomía- Harry se alejo de Ron hacia el lago.

El pelirrojo quedo confundido, iba a seguir a Harry cuando se dio cuenta de lo que había sucedido, una ira contra su mejor amigo creció como fuego en pasto seco, subiría al aluda de astronomía.