CAPITULO 1- REENCUENTROS.

Un chico de cabello azabache caminaba por las solitarias calles de Konoha, era increíble la paz que podía sentirse en las calles a las 3 de la mañana, habían pasado 4 años desde el día en que decidió marcharse de Konoha en busca de su hermano, muchas cosas habían cambiado, cuando se marchó, estaba cegado por el odio, perdido en la amargura, sediento de venganza, pero gracias a Naruto y su padre Minato, la verdad habia salido a la luz, él y su hermano habían arreglado sus diferencias la inocencia de Itachi habia sido comprobada, y por fin hoy estaban de vuelta, solo tenía1 cosa en mente, doblegar su orgullo y pedirle disculpas a la chica que ocupaba su mente y corazón desde el día en que se fue…

-Conque aquí estabas Teme, mis padres y yo pasamos horas esperándolos en el Aeropuerto, cómo ni Itachi y tú contestaban, regresamos a casa muy preocupados por ustedes, si no fuera por Kakashi-Sensei, estaríamos aún con el alma en un hilo-Naruto miraba ofuscado a su amigo le desesperaba su manera tan pedante de siempre, ante el silencio de su amigo, el rubio apretó sus puños- Si serás un bastardo…!

-Hmp! Tan escandaloso como siempre, podrías dejar de gritar Usuratonkachi, llevo una hora en Konoha y con sólo escucharte, quisiera regresarme a Londres en 2 segundos- Sasuke sonrió de lado, y le dio un ligero hombrazo a Naruto al pasar a lado de él, el rubio sonrió, sabía que eso era lo más parecido a un abrazo que el Uchiha pudiera dar.

-No haz cambiado nada Teme, sabía que te encontraría aquí, después de todo fue en este lugar donde todo comenzó- El rubio se puso las manos sobre la nuca y siguió avanzando detrás de Sasuke.

-Hmp! Me preguntó cómo es que Hinata Hyuga está loca por ti, si sólo abres la boca para decir estupideces- ante el silencio del rubio, el pelinegro agregó - aunque a decir verdad, la chica Hyuga nunca se ha distinguido por ser la más lista de su clan- El Uchiha sonrió de lado al ver que su comentario habia causado el efecto que esperaba.

-Maldito bastardo, retráctate de lo que dijiste Teme, Hinata-Chan, no sólo es una persona muy bella, es una chica muy inteligente ´ttebayo, gracias a su buena administración, los Hyuga y los Senju han llegando a ser una de las empresas más importantes de todo Japón- Naruto estaba indignado, como era posible que ese ególatra le dijera tonta a su chica.

-Ya, relájate Dobe, sólo fue un comentario, me voy a casa, mañana tengo que ir por mi uniforme y a comprar los libros para la maldita escuela, aún no concibo como fue que Itachi tuvo la brillante idea de meterme en la misma escuela de bobos que tu.- Sasuke no daba crédito a su suerte, después de todo lo que habían pasado, Itachi habia optado por mandarlo a un internado, y no a cualquiera, era el mejor de todo Japón y en él iban todos sus viejos conocidos.

-No es una maldita escuela, es el colegio de la Hoja escondida de Konoha, fundado por el Honorable Hashirama Senju y el no tan honorable Madara Uchiha, que si no me equivoco era tu desquiciado bisabuelo- Naruto empezó a carcajearse ante la crispación del Uchiha, al parecer el termino desquiciado, no era el favorito del pelinegro.

-Hmp., Me voy, ya son casi las 4 de la mañana y tengo cosas más importantes que estar discutiendo con un Usuratonkachi como tú- el pelinegro le dio la espalda al rubio, habia avanzado un par de cuadras cuando alcanzo a escuchar al escandaloso de Naruto.

-Bienvenido a casa a Teme!- Naruto sonrió, caminaba en sentido opuesto a Sasuke, dirigiéndose a su casa.

-Hmp., Gracias Dobe.- susurro para si mismo el pelinegro, perdiéndose entre las calles de Konoha.

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Ya habia amanecido, el reloj marcaba las 7 de la mañana, pero como siempre, la chica le habia ganado a la alarma, se oía el agua de la regadera; sobre la cama, habia un hermoso vestido de lino color blanco, un par de flats color rojo, y junto a ellos un hermoso bolso cruzado del mismo color, todo estaba muy ordenado, como todos los días, pensó una rubia de enormes senos, que se paseaba por la habitación, esperando que su nieta saliera del baño.

-Oba-Chan, me haz pegado un buen susto, creí que seguías dormida- una hermosa chica de ojos verdes salía justo del cuarto de baño, con una bata atada a su cintura y una toalla sobre su cabeza.

-¿Que insinúas querida? ¿Que la líder de este pueblo es una vil floja?- la rubia le sonrió a la chica y se acercó para darle un fuerte abrazo.

-¿A qué viene esto Oba-chan?- pregunto la pelirosa intrigada ante el comportamiento de su abuela.

.Nada en especial pequeña, solo vine a saludar a mi nieta y a decirte que te apures, Jiraya pasa por nosotras en media hora y Shizune ya está lista, el avión de los Hyuga llega a las 9:00 en punto, no querrás llegar tarde o ¿Me equivoco?

-Claro que no Oba-Chan, yo estoy lista en 5 minutos, estas 4 semanas han sido eternas, así que no pienso llegar ni con un minuto de retraso- la pelirosa beso a su abuela y se disponía a vestir, cuando noto que la rubia se mordía el labio.

-Vamos Tsunade-Shishou, dime que sucede, esta visita tuya matutina es muy extraña, por lo regular la que va a buscarte a la recamara para apresurarte soy yo, y no me digas que nada, porque no te voy a creer.- la pelirosa se cruzó de brazos, la inquietud en los amielados ojos de su abuela la angustiaba.

-Bien, siéntate querida, sé que debí decirte esto en cuanto me entere, pero no encontraba la forma de decírtelo, pero gracias al escandaloso de Naruto, toda la Villa a esta alturas lo debe de saber- la Hokage tomo asiento junto a la ventana, evitando a toda costa la mirada de su pequeña.

Sakura sintió las palabras de su abuela como una bofetada, en la madrugada cuando despertó de un sobresalto, creyó estar soñando, Naruto le daba la bienvenida a Sasuke, ella inquieta abrió su ventana, y no vio nada, era una madrugada tranquila y fría para ser verano, fue al baño a lavarse la cara, y se volvió acostar recriminándose mentalmente por seguir soñando con el regreso del Uchiha menor.

-Así que no fue un sueño el grito de Naruto en la madrugada, ¿Por qué no me lo dijiste? ¿Desde cuándo lo sabes?- la chica paso de la incredulidad a la rabia, perdiendo el control de sus emociones.

-Pequeña, entiéndeme…

-Pequeña nada, ese es el problema Tsunade-Sama, me sigues viendo y tratando como a una niña, y no lo soy, por Kami, tengo 17 años, tal vez apenas soy una adolescente, pero puedo entender las cosas y tengo derecho de enterarme de ellas- Sakura respiro profundo, sabía que estaba siendo injusta con su abuela, entendía que sólo quería protegerla, pero a veces la sobreprotección de sus abuelos la asfixiaba.

-Lo siento Sakura, no sabía cómo ibas a reaccionar, planeaba decírtelo hoy por la noche, después de nuestra comida con los Hyuga, pensando en que tal vez el regreso de nuestros amigos te harían asimilarlo con más claridad, pero me equivoque, no contaba que los Uchiha decidieran llegar el día de ayer, hasta donde Kakashi me comentó, tenían prevista su llegada para hoy por la tarde.-Tsunade estaba preocupada por la reacción de la chica.

-De acuerdo, me hubiera gustado que me lo comentaras en el momento en el que te enteraste, pero no veo porque sea un motivo de discusión entre nosotras abuela, ni tampoco el porque me lo tuvieras que ocultar, entiendo que no era un es un secreto lo que sentí por Sasuke y mucho menos los desaires que él me hizo, pero, aunque él me haya hecho mucho daño, no implica que tenga que ser un tema delicado entre la familia, mi amor y desengaño por él han quedado en el pasado; me da gusto que pueda regresar a su hogar con Itachi, es una alegría que se haya hecho justicia, sólo espero de verdad, que sus intenciones de regresar a la aldea, sean distintas, a las intenciones con las que se fue de aquí- Sakura tomo su vestido y se dirigió a su vestidor.

-Tienes razón hija, creo que le di más importancia de lo que ameritaba, veo que has madurado mucho en este tiempo, lo que me da mucho gusto, tal vez tu abuelo tiene razón en decir en que eres un ave, que por egoísta no te permito volar- Tsunade se acercó a su nieta y besó su frente, está por su parte acaricio su mejilla-

-Lo siento Oba-Chan, no quise hablarte como lo hice, quiero que sepas que sólo necesitas confiar más en mí y debes dejar de tener miedo, ya soy una señorita capaz de afrontar todo lo que se venga, después de todo siempre cuento con el respaldo de los mejores: mis abuelos- la chica beso la mejilla de su abuela, quien antes de salir le dijo.

-Te amamos querida, nunca lo olvides.

- Y yo a ustedes- dijo una Sakura sonriendo, que al cerrar la puerta, dejo de luchar contra las lágrimas que se apresuraban por salir, las cuales inmediatamente se limpió, se vistió con su hermoso vestido blanco, se puso una base ligera de maquillaje, unos toque de rubor en su mejillas, arreglo sus pestañas y puso gloss en sus labios, se peinó con su típico flequillo de lado y alació su cabellera rosada, que le llegaba por debajo del hombro, al final se puso el dije que su padre le dio antes de morir, al quedar lista se miró al espejo y le hablo a su reflejo.

-Sakura Haruno Senju, eres la persona más tonta que he conocido en mi vida, pero también eres la más hermosa y valiente chica que pueda existir, has vivido y superado cosas que ninguno de nosotros ha vivido y que muchos no serían capaz de afrontar, no permitas que nadie, ni siquiera Uchiha, te haga perder ese brillo que te caracteriza- Sakura se sonrojo al repetir aquellas palabras que la trajeron de vuelta de ese abismo en el cual Sasuke la hizo caer, tocó instintivamente su frente, al recordar lo que vino después de aquella frase, lo que la hizo sonreír otra vez.

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-Y bien Teme, ¿Dónde te quedaste de ver con Itachi?- el rubio caminaba más aprisa de lo normal, era increíble que el tarado de Sasuke lo haya escogido a él, en ese preciso día, para hacer las compras.

-No me digas Teme, Dobe; Quedamos de vernos en KonohaCenter, iríamos a comprar los uniformes, los libros y ropa, ya que al parecer Mr. Galán no tiene nada decente que llevar a la universidad, podrías dejar de mirar el reloj Usuratonkachi, haces que me pongas de mal humor-Sasuke odiaba que Naruto quisiera hacerse el interesante.

-No me digas Usuratonkachi ,Teme, pensé que mal humor era tu apellido, no tengo tiempo para estupideces, Hinata llega a las 9:00 al aeropuerto, te llevare a KonohaCenter y le diré a Sakura-chan que me recoja ahí, y en cuanto a ti, con Itachi o sin Itachi, te las arreglas solo, ya que han pasado 4 semanas desde que vi por Última vez a mi Hinata-Chan y no quiero llegar tarde a recogerla- Naruto empujaba a Sasuke por la multitud tenían que llegar en 5 minutos o la Haruno lo dejaba.

En cuanto al pelinegro, se dejaba empujar por el rubio sin protestar, la sola mención de Sakura, lo dejo sin procesar sus ideas, sabía que tendría que verla, pero no habia preparado aún un discurso para cuando la viera, aunque tal vez no iba a ser tan difícil, ella estaría enojada y dolida, pero al verlo se le olvidaría todo y se echaría sobre sus brazos, sólo era cuestión de que el manejara la situación y en algún momento oportuno, él le pediría disculpas y todo sería exactamente igual que hace 4 años, era una fortuna que Sakura fuera tan predecible, y que él fuera un excelente estratega, el pelinegro sonrió de lado triunfante ante su solución; cuando de pronto, se percató que ya estaban en Konoha Center.

-Bien Teme, misión cumplida, le envié un texto a Sakura-Chan y es cuestión de minutos que estará aquí, te veo en la tarde en tu casa para irnos al colegio, hoy es la asignación de camas, así que forzosamente tienes que asistir aunque sea fin de semana, no pongas esa cara, si no vas te puede tocar con los más ñoños del colegio- El rubio se dirigía hacia la esquina para esperar a la pelirosa cuando una camioneta negra le cerró el paso.

-¡Qué demonios! Fíjese Baka… ¿Sakura? ¡Sakura Chan! Casi me matas de un susto 'ttebayo!- El rubio paso una mano por si cabello, tratando recuperar el aliento, se dirigió a la pelirosa, mientras el azabache se dirigía también hacia ella.

-Jajaja! Lo siento Naruto, debiste ver tu cara, estabas completamente asustado- La pelirosa sujetaba fuertemente su estómago mientras reía, se veía absolutamente hermosa sonriendo a percepción del pelinegro, que tuvo que agitar la cabeza para ahuyentar esos pensamientos.

-no estaba asustado Sakura-Chan, sólo un poco sorprendido, no todos los días una hermosa chica te hecha una camioneta encima, y a todo esto, ¿De dónde salió esta camioneta, no se la habrás robado al viejo pervertido eh Sakura-Chan?- fue el turno de reír de Naruto ante el enojo de la chica.

-Baka, te he dicho mil veces que no le digas así a mi abuelo, para tu información es mi regalo por haber pasado a 5º , así que decidí estrenarla el día de hoy, y a ti, ¿cuándo te levantan el castigo eh Naruto?- La pelirosa no se habia percatado de la presencia del Pelinegro, hasta que el Uchiha, cansado de que lo ignoraran, interrumpió a los chicos.

-Bien Dobe, lamento interrumpir su "interesante" encuentro, pero necesito saber a qué hora pasaras por mí, para tener listas mis cosas- El pelinegro sonrió de lado, al notar la reacción sorprendida de la Haruno, habia cambiado su semblante, era tan predecible.

-Teme, te dije que por la tarde, te marco más al rato para confirmarte, por cierto Baka, después de 4 años sin vernos, ¿no piensas Saludar a Sakura-Chan?, después de todo crecimos juntos y siempre fuimos buenos amigos- El rubio, miró a Sakura que habia cambiado su semblante alegre, a uno más tenso.

-Hmp.- Fue todo lo que se oyó del pelinegro, sacando a Sakura de su ensoñación, el rubio por su parte apretó los puños, estaba dispuesto a estallar en gritos, cuando Sakura le ganó la palabra.

-Naruto, no estoy para las ceremonias, y mucho menos espero que Sasuke quiera una en este momento, súbete ya, que se nos hace tarde para llegar al aeropuerto y no te perdonaría que no llegáramos a tiempo- Sakura le dio la espalda a los chicos y se subió a la camioneta dejando sin habla a un obediente Naruto, que se subió a la camioneta sin protestar, y aunque el Uchiha seguía con su semblante sereno estaba tan perplejo como Naruto.

-Hey, Uchiha, bienvenido a Konoha- fue lo único que le oyó decir Sasuke a Sakura, antes de que esta cerrara su ventanilla y arrancará la camioneta, que se fue abriendo paso entre la avenida, perdiéndose entre los autos, dejando a un Sasuke perplejo, con una extraña sensación, por primera vez, el que alguien lo llamara Sasuke o Uchiha le resultaba molesto e hiriente , definitivamente las cosas no habían sucedido como él las habia planeado, aquella sonrisa triunfante de 5 minutos atrás se habían transformado en una mueca de derrota.

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-¿Qué fue todo eso Sakura-Chan?- Estaban por llegar al aeropuerto, cuando Naruto se atrevió a preguntarle a Sakura, sobre su nada amable encuentro con Sasuke.

-¿A qué te refieres Naruto?- preguntó la chica lo más serena posible.

-No te hagas 'ttebayo, tu encuentro con Sasuke, esa manera tan fría de darle la bienvenida-

-¿Qué esperabas Naruto, que le hiciera caravanas, o tal vez, una fiesta? Creo que no necesito explicarte mi actitud con Sasuke después de nuestra tormentosa historia, y de una vez te advierto, que aunque 4 años atrás fuimos los 3 muy unidos, no cuentes conmigo para revivir viejos tiempos, el día que lo vuelva a ver en la calle, que espero que no sea muy a menudo, tendré la misma actitud que hasta ahorita- la chica tomo su bolso y azotó la puerta tras ella.

-Sakura-Chan, tengo que decirte algo antes de que entremos- El rubio salió a toda prisa detrás de la pelirosa, ya que esta, habia cruzado el estacionamiento corriendo.

-No insistas Naruto, déjame en paz- La chica corría luchando contras las lágrimas, tenía que llegar a la sala de espera junto a sus abuelos, sólo así Naruto mantendría la boca cerrada, estaba a punto de entrar al Aeropuerto, cuando Naruto la tomo por el brazo.

-Sakura-Chan conmigo no te hagas la dura 'ttebayo, te conozco mejor que nadie en este mundo y sé que te duele el regreso de Sasuke, también sé que soñabas con este momento, y que estas confundida por el rumbo que ha tomado tu vida, acepto que el Teme parece ser el mismo insensible de siempre, pero de verdad que ha cambiado su perspectiva de ver la vida, para él también es difícil a Konoha y enfrentar a sus amigos después de lo que hizo- el rubio aflojo el agarre al ver que la chica se habia serenado, la abrazó al ver que las lágrimas brotaban de sus ojos y agregó- desahógate Sakura-Chan, sabes que aquí estoy yo para apoyarte en todo, eres mi hermanita y nunca te voy a dejar sola.

-Gracias Naruto, lo sé, siempre puedo contar contigo hermanito, sólo que, el regreso de Sasuke me tiene muy abrumada, y una vez más reitero que estar en S&U villa de la hoja escondida ha sido lo mejor de mi vida, y con un poco de suerte los fines de semana pueda evitar contacto con Sasuke- la pelirosa limpio sus lágrimas y le hizo señas de que la siguiera.

-Sakura-Chan, creo que eso no va a ser posible- el rubio se rascaba la nuca, sabias que la noticia de Sasuke en el colegio, le dolería a su amiga.

- ¿Qué dices?- preguntó la chica angustiada.

-El teme se incorporara al S&U villa de la hoja escondida, y temo decirte que se integrara a nuestro grupo- el chico miró a Sakura preocupado, sólo que en lugar que esta se rompiera en lamentos, sólo sonreía.

-Bien, no será tan grave, después de todo, cómo bien mencionaste, mi vida ha tomado otro rumbo y Sasuke no entra dentro de esa transición, entremos, el avión de los Hyuga ya ha de haber aterrizado.- la chica cruzo el Hobbie, hasta llegar a la sala donde se encontraban sus abuelos y su tía Shizune.

-Vaya chicos por poco no llegan, apuesto que ha sido culpa de Naruto- Jiraya sonreía al ver la reacción de su ahijado-

-¿Pero qué dices viejo pervertido? Claro que no ha sido mi culpa, en todo caso ha sido culpa de Sakura y su forma tan lenta de conducir.

-Te he dicho mil veces Baka, que no le digas así a mi abuelo, y sobre mi manera de conducir si no te parece, para la otra ven en tu propio auto- la chica le dio un golpe tan severo, que Naruto cayó de rodillas al suelo.

-Vaya, aún no hemos anunciado nuestra entrada y ya empezaron las muestras de cariño, señorita Haruno.- Un hombre maduro de ojos perlas se aproximaba a la sala de espera del aeropuerto.

-Hiashi-Sama, disculpe no vimos en que momento llegaros.

-No te preocupes hija, nos da gusto que vinieran por nosotros- Hiashi le sonrió a la pelirosa, que de inmediato la sonrisa fue reemplazada por una mueca de molestia al escuchar un estruendoso grito.

-Hinata-Chan, te extrañe tanto 'ttebayo. El rubio abrazaba a su sonrojada novia, mientras los demás se saludaban entre jubilosos abrazos.

Sakura miraba por todas partes, sentía que su corazón se oprimía en su pecho, recorría insistentemente la sala de espera y no parecía hallar lo que buscaba, hasta que una voz detrás de ella le hizo dar un sobresaltó.

-Se te perdió algo mujer- Un chico alto, de un cuerpo esbelto, pero musculoso sonrió de medio lado al percatarse que habia sorprendió a la hermosa pelirosa de ojos jade-

La pelirosa se giró y se encontró con esos hermosos ojos perlas, que tanto habia echado de menos.

-Neji-Kun, te extrañe tanto- alcanzó a pronunciar la pelirosa.

-No tienes una idea cabal de lo que te extrañe yo a ti, Cariño.- Al terminar la frase, el Hyuga cargo a su chica y le dio un apasionado beso, confirmando definitivamente, que la habia echado de menos.