Ron estaba en la sala común, hacía calor y nadie estaba en el castillo, sólo el disfrutando de un libro de quidditch; Hermione, estaba sentada en otro sillón, leyendo la revista corazón de bruja… un silencio sepulcral reinaba entre ellos… hasta que Hermione dobló una esquina de la hoja de la revista, la dejo en la mesa y se sentó junto a Ron, se cruzaron las miradas, él se ruborizó ante la seguridad en la mirada de Hermione, ella sin esperar nada dijo:

-Ron, no esperemos más-y acto seguido lo besó, un beso que dejó muy plasmado a Ron, pero que lo incitaba a seguir besándola y besándola, en un solo largo beso descubrió el cuerpo de la muchacha a flor de caricias, se sentía muy entusiasmado, y los ojos de ella reflejaban la misma sensación, acomodándose arriba de la muchacha, el pelirrojo atacó al cuello… ese blanco cuello que se le entregaba solo, sin decir no, sólo un suspirito que lo derritió aún mas (si es que se podía)-Ron… Ron… Ron… ¡¡¡RONALD WEASLEY!!!

Ron abrió los ojos de golpe, un fuerte color salmón casi le desprende la retina ¿su habitación?... miró compulsivamente a todos lados… Hermione no estaba, había sido un sueño… un buen sueño… pero el rostro enojado de su madre lo borró.

-por dios, Ron ¿tengo que sacarte de la cama con orden del ministerio de la magia?

-n-no... -susurró él, pensando en el sueño aún.

-ve a tomar desayuno, los gemelos comen mucho últimamente y tu tienes un cuerpo de músculo que tienes que alimentar…-Ron dejó de escuchar en ese momento, arrastró los pies hasta el espejo, sus ojos azules le devolvieron la mirada de "OH, Hermione, como amaría tenerte así como en el sueño"- ¿vas a entrenar hoy también?- preguntó su madre

-sí… hasta un poco mas tarde…

-¡Merlín, Ron! No te vemos ni la nariz… haz quebrado todo lo que encuentras en el camino de la quaffle, y hoy entrenarás hasta un poco más tarde… ¿hay alguien o algo que te haga entrenar tanto?-preguntó suspicaz Molly, que de tonta no tenia ni uno de sus colorines cabellos.

-"claro, es Hermione, mamá, tengo unas ganas te tirármela en algún matorral cercano y follar como cerdos…"- pensó Ron, pero su boca por si sola dijo:

-la fuerza de la costumbre…

-entonces la "fuerza de la costumbre" Granger esta esperándote en el comedor- dijo su madre, y si las miradas mataran, un avada kedabra abría salido de los ojos de Ron directamente a la arteria aorta de Molly.

Ron bajó, se tumbó entre Harry y Hermione que disfrutaban sus tostadas, se bebió su vaso de jugo y trató de irse.

-y el "cometa Halley" Weasley abandona la mesa-dijo Harry.

-¿no nos harás compañía aunque sea un ratito?-dijo Hermione cansada y con dolor de cuello por los constantes entrenamientos en la famosísima escoba-sólo un ratito…

En ese momento el aroma de Hermione llegó a la Nariz del pelirrojo, era un agradable olor a limón ¡un bendito olor a limón!

-cinco minutos- Hermione saltó de la silla de la emoción, y se colgó del cuello de su amor platónico, dándole miles de besitos en las mejillas.

-sencillamente serán los únicos cinco minutos que pasaré contigo estas vacaciones-dijo Hermione susurrándole al oído, Ron comenzó a desesperarse… era ese olor a limón, sus calorcito de su cuerpo, esos pelitos de su nuca, esos besitos, ese susurro… "que no pase nada incontrolable, que no pase nada incontrolable" pensaba muy asustado.

-disfruten los cinco minutos solos, iremos a buscar una casa para Harry-dijo Ginny.

-recuerden que es mi ultimo año con los Dursley, así que iremos a buscar algo sencillo por aquí cerquito… la Sra. Molly se ofreció a decorarlo, y el Sr. Arthur se ofreció a conectarlo a la red flú…

-y nosotros iremos a la tienda-dijeron los gemelos al unísono.

-¿n-nos que-quedaremos s-solos-s?-preguntó con miedo Ron.

-sí-respondieron todos los demás con sonrisas maliciosas.

"Ave María, esto si que va a ser todo un suplicio" pensó Ron.

"Dios mío ¿solos los dos?, tengo que ponerme algo mas… mas… ¡sexy!, quiero que se fije ahora también en mi cuerpo" pensó Hermione dispuesta a salir desnuda si se requería.

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-No fuego, no bebidas alcohólicas, no revistas porno por lechuza... -decía Molly a los gemelos como de costumbre cada mañana…

-¿crees que pediríamos esas cosas?-preguntó Fred con cara de santo.

-estas con una mala imagen nuestra- continuó George.

-mala imagen mis pelotas- dijo Molly mostrándole cinco grandes bolsas de basura con revistas en cuya portada aparecían mujeres con su feminidad a todo cachete; botellas de whisky de fuego, y varias sabanas quemadas.

-¡mamá, se nos hace tarde para elegir la casa perfecta!-dijo Ginny, corriendo de un lado a otro.

-¡DIOS SANTO, GINNY! YA VOOOOOOOOOOOOOOOOY

-hogar dulce hogar-susurró Ron que seguía sentado en la mesa mientras su casa era un lío, Hermione que estaba junto a él soltó una risita cantarina.

-tu familia es hermosa- dijo Hermione con melancolía- yo siempre quise tener hermanos.

-te regalo uno, tienes variedad entre 6.

-tórtolos… ¡digo, chicos!- bromeó Arthur- volveremos en unas cinco horas, cuiden la casa, y no hagan nada que los gemelos harían.

En ese momento los 5 integrantes de la familia Weasley y Harry abandonaron la madriguera, Ron soltó un suspirito de satisfacción.

-¿me esperas?, quiero ponerme mas cómoda-dijo Hermione tratando de sonar lujuriosa.

-s-si- dijo anonadado Ron- ahora que lo pienso, estoy en bóxer, me iré a vestir.

Los dos subieron, Ron trató de buscar algo decente que ponerse, se paro frente al espejo, se desordenó su pelo rojo, miró su cuerpo… ¿le gustaría a Hermione?... no era feo, el se encontraba pasable, le ganaba lejos Harry a su parecer; su torso desnudo marcado por los constantes abdominales había tenido muy buena aceptación por las chicas, su voz estaba bien, una chica de quinto año le había dicho que se parecía a la de un tal Robbie Williams… algún cantante muggle debería ser (n/a: lo siento, no pude resistir la tentación!)

-Ron, tienes que vestirte, no debes pensar en todo el día en tus fantasías con Hermione, es solo una amiga… -se reprimía Ron mientras se colocaba la camiseta negra sin mangas, se subió el pantalón también negro con líneas blancas verticales y zapatillas negras.

En la habitación de la menor de los Weasley Hermione no tenía mucho éxito… quería verse tentadora pero no zorra, por que para eso mejor Ron se metía con Parvati.

-Hermione, Hermione, recuerda ser sutil y risueña, sutil y risueña…

Decidió ponerse una polera con pabilos roja, sin espalda, y una falda negra de gasa con unas sandalias rojas.

-provocativa, pero decente-murmuró mirándose al espejo, sus pechos no estaban nada de mal, en realidad muchas chicas le envidiaban su talla de sostén, no todas tiene 97 centímetros en esa zona, lo que hacía que también se lucieran sus largas piernas.-no estoy mal- se auto convenció, tomó un guante de encaje que adoraba y se lo colocó- Dispuesta a matar a Ron Weasley.

En la sala de la madriguera Ron estaba leyendo una revista de quidditch cuando Hermione bajó… sin quererlo su labio inferior bajó (y algo en la parte inferior de su cuerpo subió); Hermione lo miró tratando de dedicarle la mirada mas calenturienta que una mujer puede hacer, definitivamente Ron estaba demasiado hermoso…

-¿que haces?- preguntó ella, sentándose a su lado derecho.

-leía- balbuceó Ron mostrándole la revista en sus sudorosas manos.

-que aburrido… ¿no se te ocurre algo mas… divertido que podamos hacer tú y yo solos?-dijo aún mas valentonamente Hermione… un momento, esa era una insinuación, Ron tragó saliva, en realidad si se le ocurría, y estaba que ardía por eso.

-¿a que estás dispuesta?- dijo Ron por si solo, ni el creyó que algún día le hablaría así a Hermione.

-a lo que me propongas… aunque no tan rápido, Ronnie, quiero que… "entibiemos" el ambiente… baila conmigo- respondió Herms, poniéndose de pie y levantando a Ron también- ¿Sabes bailar salsa?

-no se bailar nada.

-entonces ahora aprenderás muchas cosas conmigo- dijo Hermione moviendo la varita (n/a: se supone que van en séptimo curso, ya pueden usar magia en casa)

Procura seducirme muy despacio

Y no reparo de lo que en el acto te haré

Procura caminarme ya, como ola del mar

Y te aseguro que me hundo para siempre en tu rodar

Quizá convengas, que te alejes quizá

Me domina la tentación

De imaginar que estoy tan cerca de ti

Tan cerca sin poder resistir.

-¿esto es la "salsa"?- preguntó Ron, Hermione comenzó a mover las caderas, tomó la mano izquierda de el muchacho y la colocó en su cintura la otra la entrelazó con sus dedos.

Procura coquetearme más

Y no reparo de lo que te haré

Procura ser parte de mí

Y te aseguro que me hundo en ti

Procura no mirarme más

Y no sabrás lo que te perderás

Es el dilema del que tú y yo podemos escapar.

-baila conmigo- susurró Hermione, moviéndose mas cadenciosamente, Ron hacía verdaderos esfuerzos por seguirla, pero era un fracaso.

Procura coquetearme más

Y no reparo de lo que te haré

Procura ser parte de mí

Y te aseguro que me hundo en ti

Procura no mirarme más

Y no sabrás lo que te perderás

Es el dilema del que tú y yo podemos escapar.

-soy un fracaso-dijo Ron, decepcionado.

-no, no lo eres, la salsa es coquetería… coquetea conmigo…

Procura coquetearme más

Y no reparo de lo que te haré

Procura ser parte de mí

Y te aseguro que me hundo en ti

Procura no mirarme más

Y no sabrás lo que te perderás

Es el problema del que tú y yo podemos escapar.

Mi corazón se acelera, porque tu día te llega

Sabes que hay luna llena.

Ir acercando tus labios, coquetearme despacio

Que yo caiga en tus brazos.

Ir acercando tus labios, coquetearme despacio

Que yo caiga en tus brazos.

Mi corazón se acelera, porque tu día te llega

Sabes que hay luna llena.

-síguele la letra a la canción…

-créeme que me es realmente familiar.-dijo Ron sonriendo, se estaba soltando, empezaba a bailar bien.

Procura coquetearme más

Y no reparo de lo que te haré.

Terminada la canción Ron se tomó de las manos de la chica, y comenzó a girar, los dos soltaban risas nerviosas y pequeños grititos, hasta que Herms tropezó y Ron cayó encima de ella.