Te vi.

Tu sonrisa tan bonita y alegre.

Desprendidas un brillo como el mismo sol.

Venías con tu hermano a la tienda de Mamá, el se quedó platicando con Sarada mientras tu veías los Girasoles.

Se que estoy loco, pero esa fue la primera vez que te vi

Eras tan pequeña, al contrario de mi, quien tenia la misma edad que tu hermano.

-Ten, pequeña-

Te tendí un girasol, veo que te sonrojas y me miras con tus ojos tan azules como el mismo cielo.

-Ey, Inojin!, deja de estar coqueteando con Himawari!-

Tu te sonrojas y vez mal a tu hermano.

-Onii•chan!- le reclamas.

Si pudiera decirte algo en ese instante sería.

"Me enamoraré desde la primera vez que te vi".

El tiempo pasa rápido.

Siempre venías aquí por un girasol, cada Miércoles de cada semana.

Te veía crecer tan rápido que me preguntaba si querías alcanzarme.

Desde que veniste a la tienda por primera vez, te despediste con un beso en la mejilla. Ahora es costumbre, y me besas la mejillas.

Ahora, te puedo decir que me he enamorado de ti.

Ahora que soy un Jounin puedo decirte lo que siento.

Me levante y me cambié, fui directo a donde te había citado.

Un capo de girasoles.

Corté un girasol y lo puse en tu oreja, tu me sonreíste y me miraste, yo no pude contener mis ganas de besarte y lo hice.

Te sorprendiste pero correspondiste.

Tus ojos brillantes, me miraron.

Te pinte en un cuadro, aquel que ahora esta en mi cuarto, plasme tu bellez

De ese momento ha pasado un año.

Tu Madre se lo ha tomado muy bien, el Hokage no se lo tomó muy bien pero me aceptó. Tu hermano molesto solo me dio a entender que tenia que conseguir su permiso.

Hoy conseguí su permiso cuando me acompaño a comprar un anillo, aquel con el cual pediría tu mano hoy en la cena.

Estoy muy nervioso...

-Hinata•sama, Hokage~sama, Boruto!-

Llamé cuando terminamos de cenar, ustedes me miraron y Himawari me observó, veo que Boruto me sonríe dándome apoyo.

-Yo...quiero pedirle la mano de su hija en Matrimonio-

Hinata•sama me sonríe, Hokage~sama solo me señala que la cuide y tu hermano me da su permiso mientras tu me besas y lloras de felicidad.

Sarada, Chōcho y tu Mamá se hacen cargo de todo lo relacionado a la boda.

Mi vida ha sido feliz hasta este momento, donde caminas lentamente desde el brazo de Naruto~sama.

Me entrega a ti en el altar.

Traes un vestido de boda blanco, estamos en un capo de Flores, en aquel día de primavera donde me confesé.

Solo escuche el "acepto" de tus labios y de los mios.

Hoy he sido muy feliz al saber que me has aceptado.

Nuestra edad no importa, el tiempo tampoco importa, pero mientras estés conmigo, lo único que importa es el amor que te profeso.

Inojin Yamanaka, a Himawari Yamanaka.

By: Lizisi