Hola, hace poco me estaba preguntando por que seiren siempre había sido tan fría, así que decidí inventarme una parte de su vida a partir de que llega a la academia cross, en este momento se supone que es HUMANA, asi que por eso está en la clase diurna.

Habrá amor, traiciones, ¡mordidas! Y creo que hasta ahora va bien, ¡ pero que maldita falta de inspiración!

Disfrútenlo como yo disfruto hacerlo.

Nota: seiren y kaname son propiedad de Matsuri Hino. (si existe la remota posibilidad de que ella esté leyendo esto quiero decirle que amo VK). Todos los demás personajes son mios.

Seiren

Chapter one

Estaba patrullando esa noche, bajo la ventana de kaname-sama, me pregunté, ¿Cómo fue que terminé aquí? Sirviendo fielmente como guardiana a un sangre pura. Recordé lo que había pasado hace tres años…

.

.

.

-agh! Fue la clase de ética mas aburrida que he tenido en años!- dijo mi nueva amiga Miyuki, fue toda una suerte conocerla. Entré a la academia cross a la mitad del semestre, apenas llevaba dos días ahí, y Miyuki (que era mi compañera de habitación) se había mostrado amigable desde el principio, en cambio yo, me mostraba fría y distante, así soy, así he sido desde que tengo memoria.

Nunca fui buena para hacer amigos, por lo que realmente tuve unos amigos que duraran toda mi vida, por eso, me sentía realmente bien con Miyuki, nunca me habían tratado de una forma tan amistosa en tan poco tiempo.

-¿Por qué casi no hablas Sei-chan?- preguntó. Hace años que nadie me llamaba así. Desde que murió mi madre.

-pues… nunca fui buena con las relaciones publicas.

-¿pero que pasa que siempre pareces deprimida?

Me sentí incómoda con esa pregunta, era bastante común en mi vida, pero nunca quise responderla, siempre me quedé callada, y entonces comprendían que no me gustaba hablar de eso, entones solo cambiaban el tema. Pero esto también era diferente. Esta vez yo confié en ella, así que decidí contarle todo.

-ah! Lo siento, no debí pregutar, te vez algo incómoda, así que…

-Está bien- la interrumpí- la cosa es, que mi madre murió cuando yo tenía siete años, mi padre se hiso alcoholico, yo no quiero estorbarle, y si yo no estoy con el, supongo que buscará una forma de salir adelante, así que yo solo decidí venir, una tía me está ayudando a pagar.

-oh, sei-chan, en serio lo siento-dijo mientras me abrazaba-prometo que no diré nada.

-gracias miyuki-chan.

-no te preocupes, estaré contigo siempre.-sonrió.

Íbamos hacia los dormitorios y vimos en típico túmulo de gente haciendo un escándalo.

-todos los alumnos de la clase diurna a sus dormitorios –dijo la prefecta, que según me habían dicho, se llamaba Mikoto, ella al ver que nadie le hacía caso gritó –A VER RENACUAJOS A SUS DORMITORIOS YA!

Al escuchar sus gritos, su hermano y gemelo kenshi, se acercó para ayudarla.

-ya la oyeron todos, váyanse ya! –muchas chicas suspiraron, unas de frustración y otras de amor.

Kenshi y Mikoto, los prefectos, kenshi: es el mas guapo de la clase diurna según todas las chicas (y uno que otro chico). Mikoto: todos los chicos de la clase diurna se le habían declarado, pero según lo que había oído, ella los había rechazado a todos.

-aaaaaah! –sonidos de admiración y suspiros fueron el resultado de que la clase nocturna pasara por el camino de las piedras hacia los otros salones. Era comprensible, todos ellos eran hermosos, pero uno en especial fue el que llamó mi atención, pero no por que fuera guapísimo, si no, por que en sus ojos castaños se veía un rastro de soledad.

-son increíbles no? –dijo Miyuki interrumpiendo mis pensamientos.

-quién es el de hasta enfrente?

-quien? Ah… es Kuran Kaname, nunca se le ha visto acompañado por alguien a quien le preste especial atención, así que no te ilusiones con él.

-realmente es sólo curiosidad. –"realmente no es él con el que me gustaría hablar" pensé para mí, ya que Kenshi había atraído mas de mi atención.

Kenshi tenía el cabello negro y los ojos verdes, obviamente igual que Mikoto, pero al mismo tiempo cada uno era muy diferente del otro.

Todos se marcharon a sus respectivos dormitorios.

-Miyuki-chan, quisiera estar sola un rato.

-ok, te veré alrato.

Se fue, quedándome solamente yo, caminé haca el bosque y me senté en un árbol, sentía que tenía muchas cosas en que pensar. Poco a poco me quedé dormida.

….sueño…

-Sei-chan! –gritó mamá –donde estabs?

-me perdí mamá-respondí. –quise ir a la tienda por un chocolate. –me abrazó.

-no vuelvas a hacer eso sei-chan, enserio me asustaste pequeña. Ahora, vamos a casa.

Desperté hecha un mar de lágrimas. Ella me tomó de la mano ese día, un día antes que haber muerto en aquel accidente.

-por que pasó eso? –grité abrazandome a mi misma –ella no tuvo que haber muerto!

-estas bien? –dijo alguien detrás de mí

¿review?